Más de la mitad de los 35 mil habitantes del otro lado del río, no tienen gas ni agua. Pagan hasta tres mil pesos adicionales porque el cupo de gas envasado no basta. Hubo emprendimientos fracasados en las chacras por falta de agua. No hay recolección de basura por estar fuera del circuito y deben llevarla todos los días a algún contenedor del centro de la ciudad. Se harán cargo de la instalación de la red pero reclaman respuestas de las instituciones.
Río Grande.- Vecinos de la Margen Sur visitaron los estudios de Radio Universidad para exponer la situación que atraviesan por la falta de servicios esenciales, como las redes de gas y de agua.
Mientras una familia tipo paga menos de 300 pesos por el gas de red, en la Margen Sur deben desembolsar hasta tres mil pesos por el gas envasado
Uno de los casos contados en primera persona es el del profesor Hugo Schneider, que por elección vive en la zona.
El pasado jueves hubo una reunión de vecinos “para plantear lo injusto de esta situación, porque somos ciudadanos que tenemos otra categoría, y en una provincia productora de gas destinamos una parte muy importante de nuestros ingresos por no tener gas de red”, dijo.
“No nos quedamos en el lugar de víctimas, he planteado la situación en los medios”, recordó sobre un reclamo de vieja data, dado que “todas las personas no conectadas a la red de gas, usan gas envasado o a granel”.
Esto ocurre tanto en la zona de los asentamientos, como en las chacras de Margen Sur, y en nuevos barrios donde “muchos ciudadanos que no tienen gas de red”.
Subsidio insuficiente
Schneider explicó que el estado provincial junto con la nación subsidian “una parte solamente del consumo”.
Son “180 kilos durante los siete meses de ‘calor’ y 360 kilos en los meses más fríos. Todo el excedente lo debemos pagar a 7,50 el kilo de gas”, dijo, aunque en estas latitudes siempre hay excedentes porque no hay meses de calor que permitan prescindir de la calefacción, ni siquiera en verano.
En los llamados meses de calor el consumo en su hogar no baja de “los 400 kilos mensuales. Tenemos un calefactor grande, tres pequeños, un calefón y una cocina, para un grupo familiar de seis integrantes. En invierno llega a 700 u 800 kilos de gas” dijo del consumo mensual.
“Tengo que pagar alrededor de 1.500 pesos adicionales. El gas subsidiado alcanza para medio mes en verano y un cuarto de mes en invierno. Son entre 2.500 y 3.000 pesos que gasto por mes de gas”, estimó.
Además está el trámite burocrático al que se ven sometidos: “Todos los años hay que hacer el trámite de reempadronamiento, y he estado dos horas y media haciendo cola con mi hijo en brazos. Hay que ir a retirar el bono de gas durante los primeros cinco días del mes, en una situación de hacinamiento de todas las personas que tienen que ir en un horario reducido y un espacio reducido”, dijo.
Más de la mitad sin servicios
El dirigente barrial Sergio Fresia, si bien reside en una zona de Margen Sur con gas de red, participó de la reunión convocado para aportar su experiencia, dado que en su momento tuvieron que pagar el tendido de su propio bolsillo.
Dijo que del otro lado del puente hay “alrededor de 35 mil habitantes y un poco más de la mitad está con bonos de gas. Hay asentamientos y barrios privados, que se abastecen con gas envasado, como el caso de Punta Popper y el nuevo barrio de la UOM”.
Explicó que los vecinos lo convocaron “para ver si podemos llevar adelante el mismo proyecto que llevamos hace años, en el barrio Aeroposta, cuando los vecinos pagamos la red de gas”.
“La red de gas la debería hacer Camuzzi, pero cuando gana la licitación no está prevista la obligatoriedad de hacerla. Así que, o la hace la provincia o la hacemos los vecinos”, señaló.
Fresia colaboró agilizando el trámite en Buenos Aires para que se autorice la red y “dicen que en los próximos días estaría listo el plano para enviarlo a Río Grande”, informó.
El pago que realicen los vecinos, Camuzzi lo devuelve luego con gas, pero la inversión inicial con un importante desembolso correrá por cuenta de ellos.
ENARGAS ausente
El profesor Schneider expuso la intención de “visibilizar el problema porque vamos a pagar de nuestro bolsillo una red que va a terminar siendo propiedad de Camuzzi”, y se preguntó por “el rol de Enargas como ente regulador, que tiene la obligación de exigir a la empresa que preste el servicio”.
Marcó la “ausencia del estado nacional en el caso de Enargas” y también la falla de “diputados y senadores, que es notoria”, porque a esta altura debieron modificar el problema que se padece en la Argentina por la desinversión de Camuzzi.
Sin agua
Otro tema “paradójico por estar ubicados al lado del curso de agua dulce más importante de Tierra del Fuego”, es la falta de agua potable por red.
“Se han hecho ríos de tinta sobre discursos políticos relacionados con la productividad de las chacras de la margen sur, que no tienen agua. Dependemos de que la Municipalidad nos lleve dos mil litros de agua por semana como máximo”, dijo Schneider.
“Tenemos dos emprendimientos productivos fracasados por falta de agua. Tuvimos que devolver el préstamo de la Municipalidad, con la experiencia fracasada por la ausencia del estado en la provisión de agua”, enfatizó sobre las consecuencias que no sólo afectan a las familias sino que impiden el desarrollo de la economía de la zona.
“El agua la pagamos y no se puede pedir más, porque la Municipalidad tampoco da abasto”, dijo.
Estimó que hay 1.200 metros desde la red más cercana y unos 2000 metros si se cuenta hasta la zona de chacras, y sostuvo que los vecinos “están dispuestos a comprar las cañerías”.
Esperan que la Municipalidad pueda poner la mano de obra para contar cuanto antes con este servicio.
Sin recolección de basura
Un tercer servicio esencial del que carecen es la recolección de basura, porque hay zonas “fuera del circuito de recolección” por lo que están pidiendo “tres o cuatro containers” para colocar en estos sectores.
“Hay gente que tira la basura a la orilla del río. Nosotros tenemos que traer nuestra bolsa de basura todos los días hasta el pueblo y dejarla en algún container. No tenemos otra alternativa”, dijo el profesor, pero no todos tienen ese hábito y en operativos de limpieza anteriores la municipalidad ha levantado hasta “tres camiones de basura junto al río”.
“Tenemos titulo de propiedad y hemos pagado nuestras casas, ahora vamos a autogestionar el tema del agua y vamos a poner más de cuatro mil pesos cada uno, si es que la Municipalidad pone la mano de obra. Estamos haciendo todo”, concluyó el profesor, reclamando a las instituciones el respaldo que no les están dando.