Juan Domínguez, presidente barrio Arraigo Sur, expuso al programa Dos Preguntan, de Radio Universidad, la crítica situación de miles de familias sin gas de red, que desde hace días no tienen cómo calefaccionarse.
El presidente del barrio Arraigo Sur aseguró que desde marzo estaban advirtiendo a la gestión Ríos sobre la merma en la provisión de gas. Con excusas y sin soluciones, el fin de semana algunos pernoctaron en la escuela de Margen Sur, con el riesgo de sufrir robos, o recurrieron a familiares. El abastecimiento cubre menos de la mitad de la demanda y muchas viviendas no tienen calefacción alternativa a leña o electricidad. Recién mañana llegarían los primeros camiones con gas para envasar de refuerzo. Y afirman que el frío ya se cobró una vida.
20-07-2015 Río Grande.– Juan Domínguez, presidente barrio Arraigo Sur, expuso al programa Dos Preguntan, de Radio Universidad, la crítica situación de miles de familias sin gas de red, que desde hace días no tienen cómo calefaccionarse.
La distribución no cubre la mitad de la demanda y “desde marzo” se venía advirtiendo al gobierno de Ríos sobre la merma en la provisión. Ahora cuestionan “la inoperancia” que habría costado la vida de una beba y pone en riesgo a cientos de niños de la zona.
El viernes lograron reunirse con la gobernadora y debatieron la situación “hasta la medianoche”, pero la solución no llegó.
“Trataron de definir lo indefinible, porque no hay cómo cerrar la cuestión del gas, no saben de dónde sacarlo y la gobernadora no sabe cómo fue que se le escapó de las manos. La inoperancia de su gabinete nos llevó a estas consecuencias”, expresó, con “2.875 familias en déficit”, según precisó.
Como medida paliativa, dijo que “se cerró la provisión de gas a los sectores empresariales para priorizar el gas a los vecinos y tratar de salir a la brevedad de esta situación. Nos dieron un número estimativo de la cantidad de garrafas que iba a recibir cada barrio”, pero el mismo viernes estaba prevista la entrega de 350 tubos cuando se necesitaban mil.
“El viernes se envasaron 360 tubos. Yo fui designado por los vecinos como veedor para tener acceso a la información de la planta de Gas Austral, el gas que viene de YSUR y el gas que se envasa y se distribuye. Para el sábado se estimaba un poco más de 400 tubos como envasado. La mayor demanda es de tubos de 45 kilos y se prioriza esto”, manifestó, aunque con las temperaturas actuales cada tubo dura apenas tres días.
Para el sábado se decidió destinar toda la carga que llegara de YSUR a envasar tubos, y el domingo a recargar los zeppelin de las familias que usan gas a granel, “porque tenemos más de 450 familias que están en lista de espera y se les terminó el gas hace tres o cuatro días”, dijo Domínguez sobre este grupo.
Corte de puente, y pobres contra pobres
Cabe recordar la decisión de los vecinos el pasado jueves de cortar el puente General Mosconi en reclamo de respuestas, algunos con varios días sin calefacción. “El día del corte del puente logramos reunirnos con el representante de la Secretaría de Hidrocarburos pero no supo dar respuesta y en realidad lo mandaron a escuchar. Se dieron enfrentamientos entre los vecinos y por eso el viernes decidimos levantar el corte. Se tomó la decisión de ocupar la delegación de gobierno de la provincia, pedir la presencia de la gobernadora y que ella determine cómo nos íbamos a organizar para solucionar este problema que tenemos instalado. Necesitábamos medidas urgentes, porque los vecinos estaban muriéndose de frío y no podíamos seguir soportándolo”, dijo de la situación desesperante que los llevó a ocupar un edificio público.
“El viernes, con todos los referentes barriales, se formó una mesa de negociación y se declaró la emergencia provincial para poder solucionar este tema. Desde las 16:30 hasta la medianoche siguieron las discusiones y se logró la firma del acta acuerdo con el compromiso de reunirse nuevamente el lunes –por hoy- para decretar el estado de emergencia”, detalló el dirigente barrial del saldo de este encuentro.
Provisión insuficiente
En el pedido de los vecinos se puede observar que el gas que se estuvo repartiendo el fin de semana estuvo lejos de cubrir la demanda. “Nosotros entregamos un petitorio en mano a la gobernadora, donde pedimos 900 tubos de 45 kilos por día más la carga de zeppelin para los vecinos que tienen gas a granel, por separado. Lo que estaban haciendo era dividir la carga que viene de las petroleras para envasar y para los zeppelin. La demanda es de 900 tubos diarios aparte del gas a granel”, remarcó, pese a lo cual apenas rondó los 400 la entrega del sábado y el domingo se destinó a los zeppelin.
“Los barrios están en pleno proceso de crecimiento y continuamente hay vecinos que se están trasladando a vivir, dejando sus alquileres, y van a necesitar la provisión de gas envasado”, observó sobre la demanda que sigue creciendo.
Tres días por tubo
Se le preguntó al vecino cuánto dura un tubo de 45 kilos para una familia tipo, y respondió que “en plena época invernal, con estas temperaturas que estamos teniendo, que es uno de los iviernos más crudos, está durando tres días, para una familia de cuatro personas. En mi casa somos cuatro, tenemos dos calefactores, el calefón y la cocina. Usamos calefón porque si hablamos de termotanque la demanda es mayor y gastaríamos más gas. Estas medidas tomamos para optimizar el consumo y nuestra economía, porque estamos pagando entre 720 y 1.000 pesos por mes en gas, para cuatro personas. Hay gente que paga cuatro mil pesos por mes y es una situación crítica”, señaló.
De allí que se incorporó en el acta firmada por Ríos el compromiso de gestionar la red de gas, aunque el descreimiento en los vecinos persiste, al tratarse de un gobierno en retirada que en dos gestiones sucesivas no llevó soluciones. “En el acta acuerdo que firmó la gobernadora, pedimos la inmediata intervención del gobierno para gestionar todo lo necesario para las redes internas de los barrios, por medio de algún plan o crédito interno. Queremos que el gobierno instrumente las herramientas necesarias para tener las redes en los barrios y pedimos que apenas pase la veda invernal se haga el llamado a licitación para ampliar y terminar los gasoductos, para dar el servicio a todas las viviendas”, indicó.
La respuesta de Ríos fue pasar la responsabilidad a Bertone: “La gobernadora nos decía que iba a hablar con la gobernadora electa porque este es un proyecto a largo plazo. Hoy puede firmar cualquier cosa y no es serio que deje todo el desastre para el gobierno entrante”, observó el dirigente.
El costo que afrontan los sectores más pobres de la ciudad es más que significativo, si bien hoy ni pagando tienen gas: son “72 pesos con subsidio por cada tubo y, si no, son 510 pesos sin subsidio para 45 kilos de gas”, que dura tres días en el mejor de los casos.
Paliativos insuficientes
Se le preguntó sobre el aporte de palets para calefaccionarse, y Domínguez dio cuenta de la reunión con funcionarios del municipio, de quienes “surgió esta idea de colaborar, más allá de que el gas es un problema ajeno a ellos. Intentaban articular una medida de ayuda con algo para solucionar de inmediato el problema a las familias. Les explicamos que son muy pocas las que tienen la doble alternativa de calefacción a gas y salamandra. Desde el municipio explicaban que hace cuatro años que tienen una política de erradicar la calefacción a leña, por la cantidad de accidentes que hubo todos estos años. La municipalidad tenía empadronados a los vecinos que necesitaban de la leña pero se modificó el sistema y prácticamente se erradicó este tipo de calefacción, así que es complicado volver atrás. Además es complicado conseguir leña seca y no tenemos un padrón de las familias para darle esta solución. La Municipalidad consiguió unos palets y están haciendo un paliativo, como asistencia el fin de semana para las familias”, dijo, en medio de una emergencia sin precedentes.
“Hablamos no sólo de calefacción sino de poder cocinar para la familia, para los niños de los barrios”, subrayó.
Papeles sin valor
Respecto de los bonos de gas, el dirigente expuso la ironía del gobierno que aumentó la cantidad pero no tienen dónde canjearlos porque no hay gas. “El gobierno daba bonos para 8 tubos de 45 kilos por mes, y el mes pasado nos agregaron dos bonos más. Hoy tenemos diez y eso discutimos con la gobernadora, porque no hay gas. Están emitiendo algo que el gobierno no puede respaldar”, fustigó, exponiendo “la inoperancia que hubo al dar más cantidad de bonos a los vecinos sin tener gas. En mi caso particular recién ocupé dos bonos porque no pude comprar más gas. El gobierno daba ocho bonos, ahora dio diez, pero no hay gas”, reiteró.
Sin explicaciones
Respecto de la postura de la productora YSUR y la distribuidora Gas del Sur, según el dirigente nada quedó claro y se enredaron en sus contradicciones. “El responsable de YSUR no supo explicar la situación, porque dice que viene produciendo la misma cantidad de gas de hace tres o cuatro meses atrás. Pero volcados a la cantidad de tubos de 45, nos decía la gerente de Gas Austral que en mayo envasaron 500 tubos y ahora envasaron 150 tubos. Les preguntamos dónde está el gas y no supieron explicar la parte técnica de qué pasa que no se está envasando”, expresó.
“Descreemos de todo, se habló de una medida de fuerza dentro de YSUR –para justificar la merma de producción-, lo corroboramos con un delegado sindical de petroleros privados y nos dijo que no hay ningún conflicto con la petrolera ni una medida de fuerza. Desmintieron todo lo que salió en los medios de que la planta está produciendo a pleno y el mismo gas que los últimos meses. No entendemos nada”, admitió el vecino.
Agregó que “el gerente de Sartini dijo que en Ushuaia se estaba vendiendo gas al Shopping. Hay muchas cosas que se dicen, nuestras familias se mueren de frío y sin embargo se está abasteciendo de gas a un shopping”, cuestionó.
“Nosotros queremos comprar el gas, no queremos que lo regalen y lo pagamos carísimo. Sin subsidio un tubo cuesta 510 pesos y si no tenemos los bonos hablamos de cinco mil pesos al mes”, ejemplificó.
Autoevacuados
Ya entre jueves y viernes se había conocido la decisión de algunas familias de recurrir a familiares y amigos de otros puntos de la ciudad para alojarse temporalmente, a riesgo de morir de frío. El fin de semana otro grupo de familias recurrió a la escuela de margen sur, en una situación vergonzante y peligrosa porque alienta la delincuencia.
“El alojamiento en la escuela se incluyó en el acta acuerdo y la garantía de una ambulancia permanente para evitar mayores inconvenientes. Hay familias que fueron a cenar y pernoctar a la escuela. Nosotros no proponíamos que los vecinos abandonen sus hogares porque hay riesgo de que les roben lo poco que tienen, así que muchas familias no estaban de acuerdo con esto. Se habló con la cooperativa para que las familias se puedan calefaccionar eléctricamente con tarifas congeladas a lo que pagamos el mes pasado. Es un paliativo pero solamente para las familias que pueden hacerlo, porque hay barrios que no tienen la potencia necesaria instalada y las redes eléctricas son provisorias”, advirtió.
“Si vamos a promover que se calefaccionen con artefactos eléctricos en esas zonas, el caos va a ser superior porque va a colapsar la red eléctrica. Si hay instalaciones precarias corremos el riesgo de incendiar viviendas y dejar sin luz a vecinos que están conectados a los mismos transformadores, porque van a colapsar todos”, sentenció.
Promesas incumplidas
Finalmente expuso las promesas de campaña de Ríos, que no cumplió en ninguno de sus dos mandatos: recordó que el barrio Arraigo Sur es el resultado de la ocupación del macizo “el 13 de noviembre de 2010, en plena campaña política de la actual gobernadora. Ella cerró la campaña prometiendo todos los servicios a estos barrios y llegó al gobierno con la mano de los vecinos que confiaron en esa promesa. Fuimos por una necesidad de una tierra, porque yo alquilaba un terreno donde tenía la casilla y pagaba carísimo sin tener servicios ni nada. Recurrimos a esto por la inoperancia de los gobiernos para dar soluciones habitacionales”, sostuvo en respuesta a los que les cuestionan la ocupación de las tierras.
Con la ley de expropiación todavía está todo por hacerse. “La escritura está en manos del IPV y fuimos a parar ahí con la promesa de que nos iban a dar solución”, dijo cuando en su momento surgieron rumores de una ocupación alentada por punteros del PSP.
Lamentó que al poco tiempo se vio que “no hay ninguna decisión política de dar solución ni control de nada. Tenemos una obra eléctrica aprobada desde antes de las elecciones, el gobierno pagó la mitad y la Cooperativa no avanzó con la obra. Además hay una falta de control para que se terminen las cosas”, sumó a su crítica.
Y concluyó denunciando la muerte de una bebé “por frío”, que se ocultó durante la campaña: “Ya tuvimos el caso de una beba hace pocos días, que no se hizo público por taparlo por la campaña política. Se murió de frío una nena, así que no esperemos que muera más gente. Nosotros no vamos a llevar falsas expectativas a los vecinos: la realidad es que no hay gas y el responsable es el gobierno por no haber tomado medidas a tiempo. Nosotros tenemos notas remitidas desde marzo, porque ya se notaba una merma. Nos decían que se mandaba la mitad de la carga a Ushuaia y otro día venía a Río Grande. El gobierno no tomó cartas en su momento para resolverlo”, finalizó, identificando a quien consideran único responsable.
Post your comments