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El ministro de Industria Ramiro Caballero dio detalles del encuentro con el sector empresario y sindical para trabajar en medidas que permitan mejorar la competitividad de los productos fabricados en la provincia. Esperan plantear al Estado nacional una protección para la industria fueguina, ante la apertura de importaciones. Se ampliará la convocatoria a Aduana, Puertos y Transporte, para bajar costos de producción y, en el segundo semestre, mejorar la estabilidad del empleo. “Si hay una caída económica en la Argentina lógicamente nos va a impactar”, advirtió.

22-03-16 Río Grande.- El ministro de Industria Ramiro Caballero se refirió por FM del Pueblo al encuentro mantenido con empresarios y gremios, junto a la gobernadora Rosana Bertone, para mejorar la competitividad de los productos fabricados en la isla.
Dijo que fue una reunión “planificada hacía un tiempo para poder convocar a las industrias promocionadas de la provincia y el sector gremial, y trabajar sobre las perspectivas que tenemos para el 2016 en nuestra isla. Por otro lado, ver los mecanismos que vamos a llevar adelante a través del Ministerio de Industria, para trabajar con las empresas relacionadas con el régimen industrial y el sector trabajador”.
El objetivo es analizar “de qué manera se consolida la industria y si necesitamos trabajar sobre normativas o readecuaciones”.
“Con la gobernadora planteamos a industriales y gremios que el gobierno de la provincia no quiere ser ajeno a las determinaciones nacionales, sino estar presente en cada discusión donde se hable del régimen, llevando iniciativas provinciales para mejorar la competitividad de nuestros productos. Muchas veces se discute el costo laboral o el precio final de los productos fabricados en la isla, y es momento de empezar a rediscutir estos componentes que hacen a la producción de Tierra del Fuego, con distintos actores”, explicó.
“Hablamos de empresarios y del sector laboral, y vamos a sumar a la Aduana y Puertos dentro de poco, también a Transportes, Despachantes de Aduana, a una mesa de trabajo para ver de qué manera mejoramos la competitividad de nuestros productos y las iniciativas que queremos llevar adelante”, apuntó sobre la mesa ampliada.

Protección ante todo

Caballero observó que hay “una política nacional distinta. Por las reuniones que tuvimos con el ministro de la Producción Francisco Cabrera, nos hablan permanentemente de que no quieren afectar la producción y el empleo, pero tenemos que ser competitivos ante la posibilidad de apertura de la importación. Ese trabajo queremos llevarlo de cerca con el gobierno nacional y rediscutir cualquier situación adversa para los productos fabricados en Argentina”.
Por el momento la situación es buena y el año comenzó “con una importante cantidad de trabajadores. En marzo los números son estables respecto de lo que fue marzo del 2015, y un poquito mayor inclusive, con producciones positivas e interesantes”, señaló sobre la mano de obra ocupada y la fabricación que sigue avanzando.
No obstante, expuso que “hay un stock de productos fabricados a fines del año pasado, porque hay un enfriamiento de la economía. En el segundo semestre queremos que se empiece a trabajar con mayor estabilidad de empleo y vamos a estar muy regulados por lo que el mercado vaya a demandar. Si hay una caída económica en la Argentina lógicamente nos va a impactar y espero que ese escenario no se dé”.

Paliativos anticrisis

La mejora de la competitividad pasa por bajar costos y “estamos trabajando en mejorar los componentes provinciales. Queremos mejorar la eficiencia del Puerto de Ushuaia, y sabemos que nos hace falta un puerto en Río Grande. Nos hemos reunido hace diez días con Gómez Centurión, director Nacional de Aduana, para ver cómo pueden colaborar para que los costos extras de la industria sean menores y no incida en el precio del producto”, informó.
“También queremos trabajar con los transportistas, porque tenemos costos altos de logística de Buenos Aires a Tierra del Fuego. Hemos perdido buques que venían de Oriente, porque muchos bajan en Buenos Aires y vienen en camión o barco de Buenos Aires a Ushuaia, y todo ese mecanismo nos encarece”, manifestó.
Consultado sobre el plan canje de celulares lanzado a nivel nacional, reconoció que “es ambicioso, pero todavía se está evaluando, porque hablan de 75 a 80 dólares el celular en el mercado y hay que trabajarlo muy bien. Además estamos atentos a cualquier situación en toda la industria promocionada, desde la textil a la plástica”.

Nuevas propuestas

Agregó que prevén elevar a Nación “un par de inquietudes: una es contener la apertura de la importación y ver de qué manera nos van a cuidar, para que trabajemos en nuevas inversiones para mejorar la industrialización; por otro lado, ser complementarios con otras regiones para incorporar otros productos que puedan llegar a otra región de Argentina para su industrialización final. Estoy hablando del sistema fabril agrícola, el automotriz, el medicinal”, citó como ejemplos.
“Queremos que un producto fabricado en Tierra del Fuego llegue al mercado nacional”, subrayó, considerando fundamental no parar la producción. “Si faltara producto, podrían abrir la importación y nadie quiere eso. Por otro lado está el desarrollo de proveedores locales. Lo que no puede pasar es que en Tierra del Fuego se pare la producción”, reiteró.
Se le preguntó por qué no llegan los buques de Oriente como antes al puerto de Ushuaia, y dijo que “hay distintas razones: hay temas de bandera, y por otro lado está el tema de volúmenes, que por cuestiones logísticas llegan directamente a Buenos Aires y se está trabajando para ver de qué manera revertimos esa situación”.
Dejó planteada la posibilidad de abrir el régimen y, cuanto menos, se va a proponer: “Hoy tenemos un régimen cerrado y lo que podríamos hacer es incorporar nuevos productos o sustitución. Eso está vigente y permite que las empresas radicadas en Tierra del Fuego que ven un producto que está perdiendo mercado, puedan incorporar algún otro. Para nuevos proyectos y nuevas empresas el régimen está cerrado y queremos proponer de qué manera el estado nacional pretende que se desarrolle industrialmente la Argentina, para incorporar nuevos proyectos a Tierra del Fuego y lograr ese objetivo. O bien como provincia evaluar proyectos que se quieran venir a radicar y llevarlos como iniciativa a nivel nacional para incorporarlos a Tierra del Fuego”, dijo.

Pedido de colaboración

Asimismo, la gestión Bertone apeló a la ayuda de las propias empresas: “En la charla con los industriales, la gobernadora dio el panorama provincial que tenemos, por otro lado los llamó a colaborar no solamente para entender la situación provincial sino ayudar en lo que entienden que pueden dar una mano. Se ha invitado a trabajar con el Banco Tierra del Fuego; a promocionar lo que se hace, la industria que tenemos, a nivel provincial y nacional; a mejorar el grado de compromiso con la sociedad y mostrar a la Argentina qué es la industria fueguina. Si no, no se sabe bien qué se hace y debemos trabajar interna y externamente. Por eso también están invitados a poder trabajar con el Banco”, concluyó.