Dialogamos con Rodrigo Rivarola, chef de “Don Juan”, un restaurante bien argentino. Se fue a Italia hace 11 años. Está orgulloso de compartir nuestras culturas en Milán. Tiene algo especial con Tierra del Fuego y tiene relación directa con el Papa Francisco. Extraña a su Córdoba natal pero no puede despegarse de la “tierra tana”.
En Radio Universidad
Quien escribe considera que no es ninguna novedad que un argentino viva en Italia. Pero como lo que piense no es interesante, los invito a que conozcan la historia de Rodrigo Rivarola. Cordobés de alma y bien argentino, decidió partir desde su país en el 2005 para instalarse en Milán y hace disgustar a los miles de argentinos que pasaron, siguen pasando y pasarán por el restaurante, también argentino, de “Don Juan”.
En diálogo con Radio Universidad, en “De la Mejor Manera”, que conduce Lorena Vera y Alberto Centurión, nuestro periodista corresponsal en Roma, Marcelo D’Aloisio, nos presentó en su habitual columna, “El personaje de los viernes”, a Rodrigo, quien llegó hace 11 años y está feliz de lo que hace. “Me gusta lo que hago porque transmito todas las cosas de Argentina y Córdoba. Acá hacemos empanadas, carnes asadas, postres, de todo”.
Aprovechamos la oportunidad para preguntarle sobre el paladar italiano, y nos reveló que “lo que más le gusta a la gente de Milán es el lomo a la parrilla. Si bien los argentinos no lo consumimos tanto a la parrilla, ellos si porque no tiene grasa. Los platos que más me gustan hacer son todos con carne. Acá les cocinamos a muchos famosos argentinos”.
Su recomendación es que “prueben nuestras empanadas. Si hablamos de Argentina, aparte de hablar de carnes, hablamos de empandas. Hacemos de pollo, carne, verduras. Mercedes Sosa ha venido a comer acá y les encantó nuestras empandas así que para mí fue un gran orgullo. Siempre estoy contento de divulgar nuestra cultura que es muy apreciada en Italia”.
Si bien Rodrigo está feliz de su vida en Italia, el flamante chef se pone nostálgico y nos cuenta: “Extraño mucho todo lo que es Córdoba. Se extraña la gente sobre todo. Las culturas y los modos cambian, pero lo que más extraño obviamente son mis familiares y los asados con mis amigos ya que acá no se acostumbra tanto a eso. Acá son muchos más fríos. De todas maneras me gusta vivir acá. Siempre hay cosas para hacer. Por ejemplo ahora se hace la feria más grande del mundo del mueble. Se llena de gente y está bueno porque vas conociendo gente”.
“Siempre mientras trabajamos nos dejan tomar mate porque obviamente es nuestra cultura. La carne que nosotros ofrecemos son los seis cortes que se pueden exportar de Argentina. Lomo bife de chorizo, bife ancho y corazón de cuadril. Últimamente el problema que tenemos es que aumentó un montón la carne. Un 30% o 40% aumentó así que para el restaurante es difícil obtener ganancia. El kilo de lomo cuesta 30 euros. El bife de chorizo 19 euros”, agrega.
Continúa detallando que en “Don Juan” “vendemos la parrillada, la molleja, los riñones, le hacemos conocer todo lo que nosotros comemos. Algunas cosas no podemos vender porque hay cosas que no están permitidas, por ejemplo la morcilla. El chimichurri lo preparamos nosotros. Hacemos todo bien casero como la salsa criolla”.
Con lo que respecta a la bebida, Rodrigo nos comentó que ofrecen la cerveza Quilmes, como así también diferentes vinos como Norton, Rutini, etc.
“Vienen muchos argentinos. Acá en Milán y alrededores hay un montón de argentinos. El cliente argentino es exigente. Los mozos siempre nos dicen que llegan entonces nosotros le hacemos la carne a punto. Acá prácticamente se come cruda la carne”.
Su llegada a Milán
El cordobés eligió Milán porque un hermano ya se encontraba instalado en Italia. “Siempre es más fácil cuando uno tiene familiar. También tenía a mis abuelos. Al principio es difícil igual, eh. Porque uno no conoce el idioma por ejemplo”.
“Los dueños del restaurante me recibieron muy bien. Hace 10 años que ya estoy acá y lo cierto es que estando en Europa uno aprende mucho. Porque se progresa mucho en lo que respecta a la cocina por ejemplo que es lo que me gusta a mí. Utilizan otras técnicas”, detalla Rodrigo.
“Me vine solo. Obviamente que se extraña la familia. Siempre digo que voy a volver y pasan los años y seguimos estando acá. Si fuera casado me hubiera vuelto. Como tengo la posibilidad de crecer más, me quedo por ahora”.
Cocinando para famosos
El chef de “Don Juan”, nos compartió una curiosa anécdota: “Acá venia seguido Tiziano Ferro. Venía a comer. Me llamaba y quería que le haga de comer. Vino más seguido y me dejó su número, no sé para qué, ustedes entenderán”, bromeó
“Acá siempre hacían reuniones Ronaldinho, Kaká, Alexander Pato. Terminaban de jugar sus partidos y venían a comer acá todos juntos. Por suerte pude cocinarles a muchos jugadores argentinos. Cambiasso, Zanetti, Burdisso Yepes era un gran cliente nuestros”.
Rodrigo reconoce que le cocinó a diferentes personalidades políticas, pero al no “ser cholulo” tomó un poco de distancia.
Tierra del Fuego presente
“Casualmente, nos comentó que nuestra provincia también es parte de su vida. “En Tierra del Fuego tengo una amiga que trabajó conmigo acá en Italia. Candelaria. Es una muy buena amiga”.
Papa Francisco
Finalizando la entrevista, Rodrigo mostró su lado más sensible quizás y nos compartió una impecable historia. “Mi hermano tuvo un accidente y mis padres tuvieron que venir a Italia. Siempre estoy agradecido por este problema pero está bueno que la gente sepa que mis padres fueron a Roma y hablaron con el Papa Francisco. Él le dio una mano enorme. Les consiguió una casa a través de la iglesia. Siempre estoy agradecido con Francisco. Es bueno que sepan que es un Santo de verdad”.
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