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El viernes se reunieron los privados con el intendente Vuoto y su equipo y, hasta ahora, no hay intención de suspender la aplicación de la norma.

Río Grande.- Ángelo Querciali, presidente de la Cámara de Comercio de Ushuaia, dio detalles este sábado por Radio Universidad 93.5 del encuentro que mantuvo el intendente Walter Vuoto y parte de su equipo, con los representantes de las cámaras empresarias y vecinos en general.
La tarifaria municipal preocupa a todos los sectores y hay un pedido formal de suspensión hasta tanto el Concejo trate las reformas que se están elevando. “Nos reunimos muchos sectores sociales, directamente con el intendente Walter Vuoto y su equipo. En realidad la necesidad de los privados y la ciudadanía era leer los fundamentos y los estudios que se hicieron para llegar a la tarifaria, para poder entenderla y contestar con seriedad”, explicó Querciali, dado que en la ordenanza no se expones estos datos ni hubo debate de los concejales, que aprobaron a mano alzada y “sin análisis”, como admitieron.
Para Querciali es importante pode ver “la técnica fina” que aplicó el Ejecutivo, con sus contadores y abogados, “para analizar el impacto que tiene, ver si a lo mejor ellos tienen razón y hay cosas en las que podemos colaborar, que es la intención porque todos sabemos que si el municipio no recauda, no funciona la ciudad”, dijo.
Observó que “la capacidad contributiva está muy diezmada hoy por la situación del país y la provincia”, como factor a analizar al momento de votar un ajuste de esta naturaleza.

Sin análisis

Se le consultó a Querciali sobre las declaraciones públicas del concejal del PRO Tomás Bertotto, quien admitió que votó la tarifaria “en general” sabiendo que “había cosas para corregir”, y que esperaba ahora avanzar con modificaciones. También el edil afirmó que “no hubo tiempo de análisis”, aun contando con doce asesores por concejal: “Tal vez tenga demasiados asesores y no tiene tiempo de atenderlos a todos”, ironizó el empresario, y prefirió no detenerse en este tema.
“Yo trabajo en una empresa que tiene ocho administrativos, estoy en la misma oficina que ellos y rara vez puedo hablar con todos, porque tengo que ocuparme de otras cosas y no me alcanza el día”, contrastó, y puso énfasis en que no se puede argumentar falta de análisis porque “legislar es una responsabilidad fundamental de ellos y el pueblo los eligió para legislar. No pueden decir que no tuvieron tiempo”.
Reiteró que prefiere “no profundizar en estos errores, porque más que discutir este tema, estamos abocados en ver cómo lo solucionamos rápidamente, de la forma más equitativa posible, para que la tarifaria sirva al propósito del ciudadano y de la Municipalidad”.
“Después será discusión aparte ver por qué pasó como pasó. Hoy queremos concentrarnos en que esto salga rápido”, subrayó.

Esperando explicaciones

Para hoy se espera la respuesta del intendente Vuoto al pedido formal de explicaciones, fundamentos y análisis previos a la presentación del proyecto.
“Tiene que haber un expediente con una fundamentación, un estudio de cómo impacta esto, toda la parte técnica de la Municipalidad que tiene que llevar a cabo esto. Queremos creer que está hecho ese estudio pero lo hemos pedido y todavía no lo hemos conseguido”, dijo Querciali.
“El intendente a través de su gabinete y asesores se comprometió a entregar el lunes la documentación, para que la podamos leer rápidamente. No es intención ni espíritu del privado demorar las definiciones 60 ó 90 días. Si se puede resolver en una semana, que el Municipio empiece a cobrar impuestos con la nueva tarifaria, pero queremos que esté ajustada”, sentenció.
Los ajustes se deben realizar “en el impuesto inmobiliario, en el impuesto automotor, que afectan a todos los habitantes de la ciudad. Tenemos otras iniciativas privadas para que el Municipio recaude en forma directa y aumente sus ingresos para poder desarrollar sus funciones”, aseguró.
Además dio a conocer la oposición generalizada al escalonamiento de alícuotas, de acuerdo a la riqueza o no de cada contribuyente: “No creemos en el escalonamiento para el caso del impuesto automotor. Si la alícuota es del 1% del valor del vehículo, se va a pagar más en función del vehículo que cada uno tenga”, planteó.
El proyecto de Vuoto implica “ir castigando progresivamente según le haya ido un poco mejor o un poco peor a cada uno”, en función de la diferenciación entre autos importados, o autos Mercosur que se realiza, con alícuotas más elevadas para los autos de alta gama.
“La mayoría de las personas en la provincia tenemos acceso a buenos autos, muchos tienen su propia casa o terreno, por los beneficios fiscales que tiene la isla y nos ha ayudado a vivir de una manera distinta de otras provincias”, manifestó Querciali, y consideró que “hay que pagar por lo que vale el auto, más allá de si es Mercosur o importado. El porcentaje tiene que ser equitativo, y no puede ser progresivo, porque no es justo”.
En igual sentido se debe adecuar el impuesto inmobiliario: “Lo mismo ocurre con las propiedades. Se pagará más caro si está en el centro, pero la alícuota debe ser la misma”, indicó, dado que también se votó una progresión para las propiedades de mayor valor, cuando ya está previsto en la zonificación.

Vuoto y el No a la suspensión

Con respecto a la postura del intendente ante los planteos que se hicieron, “creo que nos entendió pero tiene su postura personal, que está defendiendo”, dijo Querciali.
“A diferencia de una semana atrás, quedamos en tratar de ver de ambas partes si podemos mejorar algunas cosas. Es un cambio importante, más allá de que dice que la tarifaria no la va a suspender. Dice que podemos negociar y que a través de la reglamentación se puedan modificar cosas. Yo creo que algunas sí se pueden cambiar, y otras legalmente no, porque si la ordenanza dice que el 4% de determinado impuesto se puede escalonar, eso ya está y la reglamentación no puede ir en contra de la ordenanza.
Se podrá diferir el tiempo, pero al final hay que llegar a lo que dice la tarifaria”, sostuvo.

Contexto complicado

El presidente de la Cámara se enfocó en el contexto en que se vota esta tarifaria, con una inflación nacional que “en 2016 va a estar en un 42%”, admitida por funcionarios de Economía.
Agregó a esto “la suba importante del gas en Tierra del Fuego. Por acción de las cámaras y con ayuda del gobierno provincial se logró parar el tarifazo por seis meses y, de dos mil por ciento, bajó a quinientos por ciento. Pero esto va a volver y después tenemos la luz”.
“Hay que analizar la capacidad contributiva de los ciudadanos y si esto va a sumar más recesión. La suma de inflación y recesión es una receta que da un resultado que no se quiere ver”, cuestionó.

El cierre de comercios y despidos “indefectiblemente va a pasar –dijo Querciali-. Algunos comercios ya cerraron producto del problema gremial que hubo en Ushuaia y afectó más que en Río Grande. Esto está pasando y creo que se va a agravar a corto plazo, porque los costos fijos se han vuelto imposibles y la facturación cada vez es más pequeña”.

Cierre de comercios y despidos

Sin la tarifaria municipal, los demás tarifazos y la recesión están afectando empleo. El cierre de comercios y despidos “indefectiblemente va a pasar –dijo Querciali-. Algunos comercios ya cerraron producto del problema gremial que hubo en Ushuaia y afectó más que en Río Grande. Esto está pasando y creo que se va a agravar a corto plazo, porque los costos fijos se han vuelto imposibles y la facturación cada vez es más pequeña”.
“En mi caso particular pasa. Estamos preocupadísimos por el futuro a corto plazo, porque tenemos muchos empleados”, sostuvo desde su rol de comerciante.

Turismo en caída

Otra fuente de ingresos fundamental para Ushuaia está afectada por distintos problemas, que van desde la crisis de Brasil hasta el clima, dado que no hay nieve todavía en los centros invernales. “Aparte de la recesión del país hay situaciones particulares en Ushuaia. El turismo importante en los últimos dos años en cuanto al uso del Cerro Castor y los deportes invernales, venía de Brasil. Brasil tiene sus propios problemas de devaluación, y tampoco va a venir. Por su devaluación, nosotros quedamos caros. Esto es como la tormenta perfecta: se juntaron todos los actores que se podían juntar para perjudicar la actividad económica de Ushuaia y toda Tierra del Fuego”, expuso.
“Estamos todos preocupados porque el turismo, de forma directa o indirecta, repercute en la salud económica de toda la provincia y ha bajado bastante; por la situación de Brasil, y por la poca nieve: ningún centro de esquí está abierto porque no hay nieve en toda la Patagonia. Un centro invernal genera reactivación, de hotelería, taxis, aviones, remises, excursiones, montones de cosas que se empiezan a mover en función del turismo y hay derrame hacia todos lados. Hoy eso no está pasando”, planteó.

Basta de feriados

En este marco recesivo, rechazó que se sostenga la política de feriados que impuso el kirchnerismo. El feriado extra largo “no fue bueno”, aseguró, en medio de un país con una crisis tal que dejó lejos de la idea original de favorecer el turismo interno.
“Somos un país que no puede tener 18 ó 20 feriados. Son muchos días que se deja de trabajar, que las empresas dejan de producir y es un costo tremendo para el país. Habría que rever algunos feriados y acomodarlos, porque no podemos tener tantas interrupciones durante el año”, sostuvo Querciali.

Alquileres por las nubes

Un costo que también sube para el comercio, y la población en general, son los alquileres. En Ushuaia se habla de más de diez mil dólares para alquilar un local en pleno centro. “El comercio está concentrado en la avenida San Martín por la topografía de la ciudad y hay menos espacios físicos. Los alquileres son elevados y hay diferencia con Río Grande. No es que todos los alquileres de Ushuaia están tremendamente caros, depende del dueño de la propiedad, del acuerdo, de la cantidad de años que uno está alquilando. Hay propietarios que creen que debe ser más y otros que entienden que no es momento de ajustar. Algunos pretenden subir, por la carga impositiva, el valor de las propiedades. Yo pago alquileres y entiendo algunas cuestiones, pero me parece que están caros en proporción a la facturación que tiene cada local”, manifestó.

Agua sin medida

El servicio de agua potable es un tema más que ocupa a las cámaras. “Nos juntamos todo el tiempo con la cámara de turismo, hotelería, gastronomía, porque la verdad estamos todos muy preocupados”, dijo Querciali, y en materia de este servicio, Ushuaia está entre las ciudades más caras de Latinoamérica.
“Estamos en conversaciones con la DPOSS para empezar a pagar por lo que se consume. Tenemos mala calidad de agua, los medidores son muy pocos y uno debería pagar por lo que consume. Hay propiedades de mil metros que tienen un solo baño y no pueden pagar por los mil metros”, expresó, dado que así se cobra en general: por la superficie cubierta y no por el consumo.
“Hay que pagar el precio de lo que vale el metro cúbico”, reclamó.

Supermercados y remarcación

Por otra parte, se le consultó si interviene la cámara en la constante remarcación de precios de los supermercados, y marcó las limitaciones de la organización en este punto. “Esto pasa en todo el país y las cadenas de supermercados son nacionales. No viene de una directiva del gerente de cada sucursal sino que es una política nacional. No lo justifico, nos hemos convertido en un país extremadamente caro, con desorden por la no previsibilidad, y es muy difícil operar a futuro. Como ciudadano me encantaría que bajaran los precios, pero hay que cambiar muchas cosas en el país para eso”, lamentó.
Salvo los supermercados, en la mayoría de los rubros los precios no se han tocado: “Nosotros no podemos aumentar ningún precio porque nuestro rubro no es de primera necesidad. Hoy la gente se ocupa de las necesidades básicas y a nadie le está sobrando nada”, aseveró, con unos 1.500 comercios en Ushuaia que esperan una tarifaria criteriosa y acorde a la realidad.