La legisladora Martínez cargó contra ex aliados por los contratos temporarios
La legisladora del FPV Myriam Martínez atacó al diputado Oscar Martínez por “no defender” la estabilidad de los trabajadores de la industria y priorizar altos salarios. Explicó que con estos niveles, la empresa “contrata uno en vez de dos trabajadores”, por el costo que implica. Aseguró que los empleados “están presos” porque, si reclaman al gremio, pierden el contrato. También, denunció que son obligados a concurrir a las marchas. No prevé ningún pronunciamiento ni acción legislativa por este tema. Tampoco por las declaraciones del ministro de Comunicaciones Oscar Aguad en contra de Tierra del Fuego que, a más de una semana, admitió no haber escuchado.
Río Grande.- La legisladora del FPV Myriam Martínez cargó contra un ex aliado del kirchnerismo como Oscar Martínez y criticó los llamados contratos basura, que durante la campaña electoral había defendido la entonces senadora Rosana Bertone.
Fue en una entrevista con FM Del Pueblo, donde la legisladora fue consultada ante todo sobre las declaraciones del ministro de Comunicaciones Oscar Aguad, que calificó como “un problema” a Tierra del Fuego, cuestionando el “sistema de protección” que impide la actualización tecnológica, además del “alto costo fiscal”. Y hasta aseguró que hay “un año de retraso” en materia de tecnología por esta situación, planteando que se debe solucionar.
“La verdad no leí las declaraciones del ministro Aguad –admitió, a más de una semana de pronunciadas y con referencias en todos los medios y redes sociales al tema-. Sí estoy en conocimiento del anuncio del Presidente de la Nación con respecto a la fabricación de esta nueva línea de celulares. Esto lo vemos con buenos ojos pero también tenemos que ser realistas con lo que está pasando en materia laboral, no solamente acá sino en todo el país”, dijo.
Oscar Martínez, el blanco
La legisladora optó por cuestionar severamente al diputado Oscar Martínez, acusándolo de priorizar altos niveles salariales antes que la estabilidad de los trabajadores. Se mostró escéptica frente a los anuncios del gobierno nacional sobre la fabricación de celulares 4G por “cómo se encuentran los trabajadores de las electrónicas, porque no son de planta permanente y no tienen una relación laboral estable. Eso hay que defenderlo porque muchos trabajadores no tienen una seguridad laboral, más allá de si hay consumo o no lo hay”, expuso.
“Hay contratos transitorios y hace mucho estamos viviendo esta realidad contractual”, indicó, preguntándose “si la prioridad es el salario o la estabilidad laboral”, en un mensaje al sindicato de la UOM y las negociaciones que lleva con el sector empresario.
“¿Qué se hizo para lograr la estabilidad laboral de los trabajadores de la industria?, porque si hay demanda, van a seguir tomando personal y hay gente que hace seis años está contratada en la industria”, planteó, y explicó que “el trabajador no lo reclama, porque se queda sin el contrato. Es una manera contractual engañosa y falsa”, definió.
Sin datos
La legisladora no pudo aportar datos sobre cuántos empleados de la industria tienen planta permanente, de los 12.200 que existen en la actualidad, de acuerdo a las cifras oficiales que aportó el Ministro del área. Tampoco la evolución de la efectivización, si la hubo. Insistió en sus reproches a la UOM acerca de “qué hizo para que tengan una situación laboral estable” y manifestó que desde el gremio “priorizaron el salario antes que los puestos de trabajo estable”.
“¿Cuántos años un trabajador tiene que ser planta transitoria? Ese trabajador no puede solicitar un crédito, no puede proyectarse en la vida”, reflexionó.
Sin acciones
Dado que el MPF en la gestión anterior impulsó leyes contra los llamados “contratos basura”, se le preguntó sobre qué acciones legislativas emprendió o prevé emprender el bloque kirchnerista: “Esta no es una cuestión que tiene que pasar por la Legislatura –respondió Martínez-. Acá, o están dentro de la ley o fuera de la ley. Hay acuerdos que se hicieron desde la UOM con el Ministerio de Trabajo de la Nación”, dijo, y señaló al gremio como responsable de “llevar adelante estas negociaciones y marcar las prioridades”.
No obstante se diferenció del MPF –que realizó estas mismas críticas mientras el FPV defendía la modalidad-, aclarando que “yo no digo que es un contrato basura, porque si genera trabajo y a la familia le ingresa un salario, no lo tomo como contrato basura. Yo no dije eso ni ahora ni antes, aunque hubo legisladores que sí lo dijeron. Lo que digo es que se le permitió a las empresas que durante muchos años utilizaran a los trabajadores de esta manera contractual”.
Los “presos” de la UOM
La legisladora además apuntó al gremio como responsable de mantener cautivos a los trabajadores, en complicidad con el sector empresario. “No pueden hacer presentaciones, porque si los trabajadores van al Ministerio de Trabajo de la provincia, después no les renuevan el contrato. Los trabajadores están presos, y esto hay que decirlo. Los reclamos los tienen que hacer en el Ministerio de Trabajo y dar a conocer la situación, de que hace seis años están contratados en diferentes líneas, y tuvimos años valiosísimos para poder llevar dignidad a los trabajadores; pero no se preocuparon por esto. Se preocuparon para que los trabajadores cobraran 20 ó 30 mil pesos de salario y, en vez de tener dos trabajadores en planta permanente, teníamos uno, porque la empresa no podía solventar los valores de los salarios”.
“Hoy estamos en una telaraña y tenemos un problema nacional, porque hay un pueblo que ha acompañado a este Presidente, y los que sufren son los trabajadores”, dijo, sumando críticas a Macri en su rol de opositora desde el FPV. “Todos sabíamos cuál era la propuesta del presidente Macri y esto va a ser una lucha de todos los días”, advirtió.
Agregó que “la gobernadora está manteniendo una relación institucional muy buena con el gobierno nacional para que la provincia pueda salir adelante, porque estaba muy mal económicamente y también para tener la posibilidad de ampliar el régimen industrial”, pero volvió a dudar de “esta propuesta que viene del gobierno nacional para la fabricación de los nuevos celulares. No sé si va a dar trabajo y tampoco sé si va a dar estabilidad; porque si no lo hicieron antes, no creo que lo hagan ahora”, sentenció.
Sostuvo que desde la UOM y el Ministerio de Trabajo de Nación –durante el gobierno kirchnerista- “hubo un convenio –de contratos temporarios- que se llevó adelante, pero eso no está bien. Lo hicieron porque se les permitió. Esto lo tendría que explicar el secretario general de la UOM Oscar Martínez, que también es diputado de la Nación; y se lo tendría que explicar a los trabajadores”.
“No tengo el porcentaje real de trabajadores contratados bajo estas modalidades, pero son muchísimos, y están esperando que se los convoque. Otros viven con miedo porque el contrato se les va renovando cada treinta días”, planteó.
Se reiteró la pregunta acerca de alguna acción legislativa de reclamo o pedido de informes para conocer cuántos trabajan en relación de dependencia de manera efectiva, cuántos son trabajadores temporarios y cuántos están esperando ser llamados, pero delegó la gestión en el Ejecutivo: “Tengo conocimiento de que desde el Ministerio de Trabajo de la provincia se está trabajando en el tema, para poder revertir esto y que sea un camino digno y justo, pero no lo van a poder hacer de un día para otro”.
“Estas cuestiones que se tendrían que haber resuelto hace años atrás no se pueden resolver de un día para otro. Estoy hay que tenerlo en agenda, y los que reclaman por la dignidad de los trabajadores son los que tienen que defenderla. A veces escucho a Oscar Martínez y pregunto por qué no defendió la estabilidad, antes que cobren 30 ó 40 mil pesos de salario, para que estén en planta permanente”, reiteró.
“El trabajador está preso y se tiene que callar la boca. No le puede decir nada al sindicato, porque no lo llaman más, lo mismo si le dicen algo a la empresa. Tienen que bajar la cabeza, callarse la boca y salir a marchar cuando hay marchas, porque también tienen que hacer eso: si no salen a marchar, tampoco les renuevan los contratos. Eso es así y todos lo sabemos. Y tengo muchos amigos que trabajan en las empresas metalúrgicas, por eso sé muy bien de lo que estoy hablando”, aseveró.
Aguad que no has de beber
En el último tramo de la entrevista se puso al aire el audio del ministro Oscar Aguad, dado que la legisladora no lo había escuchado, para que opinara sobre el tema: “Son lamentables las declaraciones, por la falta de conocimiento que tiene el Ministro sobre Tierra del Fuego y el trabajo que se realiza en nuestras empresas electrónicas”, dijo, pero recordó que la decisión de lanzar un plan que prevé la fabricación de millones de celulares en la provincia “la tomó el Presidente”.
“Es lamentable que un Ministro se exprese de esta manera sobre una provincia, donde la principal fuente de trabajo viene del sector industrial. Es lamentable no haber tenido un poco más de tacto”, sostuvo.
Y concluyó afirmando que la gobernadora está conversando con el gobierno nacional para extender el régimen industrial, no para que nos quiten los beneficios”.
En campaña, respaldaban los contratos temporarios: Brusco cambio de discurso del FPV
Si bien la legisladora del FPV Myriam Martínez atacó los llamados “contratos basura”, durante la campaña el discurso del FPV era otro. La entonces senadora Rosana Bertone había defendido la temporalidad, argumentando que, si se efectiviza a los trabajadores, “empiezan a faltar”. Y cosechó críticas del fallecido Jorge Garramuño, quien luego terminó siendo su aliado electoral.
El nuevo discurso de la legisladora Myriam Martínez sorprendió por el contraste de la postura que vino adoptando la actual gobernadora, cuando fue diputada y luego como senadora nacional del FPV, avalando el acuerdo con la UOM, AFARTE y el Ministerio de Trabajo, e incluso el empleo temporario como remedio para frenar el ausentismo.
En septiembre de 2013, Rosana Bertone –diputada por el FPV- había explicado que “muchas veces se cae en este tipo de contratación para garantizar la permanencia en el trabajo, porque cuando pasan a ser efectivos comienzan a faltar”.
También agregaba que los altos niveles salariales conspiraban contra la efectivización: “Muchas veces se prefiere este tipo de contratos con montos mayores por parte de las empresas, y este nivel salarial hace que muchas veces si se debe dar con un empleado contratado fijo a la empresa se le hace muy difícil seguir en un marco de competencia, entonces no es tan fácil de resolver”.
Bertone ponía la mirada sobre el ausentismo, porque “en nuestras fábricas es alto del 11, 12 o 13 por ciento, cuando en países industrializados el ausentismo es del 2 o 3 por ciento”, en una entrevista con FM Master’s, donde dio su explicación de que “muchas veces se cae en este tipo de contratación para garantizar la permanencia en el trabajo, porque cuando pasan a ser efectivos comienzan a faltar”.
Quien luego fue su aliado político y aportó sus hombres de confianza a la gestión, el senador fallecido Jorge Garramuño, había criticado esta postura de Bertone: “Lo que sucede con Bertone es que empieza a mostrar la hilacha. Ella es amiga de algunos de los empresarios que se benefician con todo esto, y por eso los defiende”, decía el mopofista, involucrando a “los dirigentes gremiales que se molestan porque hablamos de esta situación. Ellos deberían estar defendiendo lo que defendemos nosotros, salvo que haya intereses que no están del todo claros”.
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