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Souto dio a conocer una deuda de coparticipación “de 90 millones”.

El secretario de Gobierno Oscar Souto estimó que la deuda de coparticipación del gobierno con la capital fueguina ronda los 90 millones y habló de “cifras similares” con el Municipio de Río Grande. Hace pocos días la secretaria de Finanzas Andrea Ontoria aseguraba que había sólo “días de atraso” y el monto se había reducido. Souto sostuvo que es uno de los “problemas en común” con la gestión Melella. Además celebró el primer paso que dio el Concejo Deliberante para la aprobación del empréstito que permitirá adquirir colectivos para la ciudad. Al margen de las diferencias, adelantó que si la gobernadora Rosana Bertone pretende presidir el PJ, la van a acompañar.

El secretario de Gobierno de la Municipalidad de Ushuaia, Oscar Souto, dio a conocer una deuda de coparticipación de 90 millones, pocos días después de que la secretaria de Finanzas Andrea Ontoria marcara una notable diferencia con el Municipio de Río Grande.

Río Grande.- El secretario de Gobierno de la Municipalidad de Ushuaia, Oscar Souto, dio a conocer una deuda de coparticipación de 90 millones, pocos días después de que la secretaria de Finanzas Andrea Ontoria marcara una notable diferencia con el Municipio de Río Grande, asegurando que “hay días de atraso y antes eran meses” y que la gestión Vuoto “no tendría espalda” para soportar cien millones de deuda.
Souto, por el contrario, sostuvo que es un “problema en común” entre las gestiones de Vuoto y Melella, y que las cifras son similares.
Por Radio Universidad se refirió ante todo a la aprobación en primera lectura del empréstito para adquirir los colectivos para la ciudad, por parte del Concejo Deliberante. Explicó que todavía falta concluir el proceso de aprobación de la toma del crédito. “Se aprobó la posibilidad de que esto se siga discutiendo, que requiere de una mayoría agravada. Habrá continuidad de este trámite parlamentario, con una audiencia pública”, dijo, dado que “en una nueva sesión” se aprobaría la segunda lectura, para concluir con el aval al endeudamiento.
Recordó a los concejales que se opusieron que “la última licitación en Río Grande quedó desierta”, y que “son muy pocas las empresas que prestan este servicio, porque son oligopólicas y no superan la decena. Una escala como Ushuaia no les conviene”.
Con la actual prestataria, Autobuses Santa Fe, “tuvimos que hacer dos renegociaciones”, apuntó, apostando ahora a “la empresa como sociedad del estado, que está creada desde diciembre. Los trabajadores pasarán a la sociedad estatal, regidos por el mismo convenio que tiene la UTA, y lo que se gana se reinvierte, porque cada 36 meses aproximadamente hay que renovar la flota, por las condiciones de la ciudad”, dijo.
“De 20 unidades hay 16 en este momento, ya no traen repuestos, hay vehículos que circulan sin calefacción y los horarios no se cumplen”, manifestó de las dificultades por todos conocidas.
Esperan tener los vehículos “en diciembre” y que empiecen a funcionar el primer día de enero en la ciudad.

Deuda sí, deuda no

Con respecto a la deuda de coparticipación que mantiene el gobierno, teniendo en cuenta que Río Grande reclama 120 millones, Souto manifestó que “andamos en una cifra similar”, marcando una visión muy diferente de la secretaria de Finanzas Andrea Ontoria.
“Calculamos que nos están adeudando 90 millones de pesos”, estimó, cuando pocos días atrás Ontoria daba a conocer una regularización en los últimos dos meses y que había atrasos “de días”.
Al margen de la deuda, se logró depositar los fondos para pagar los salarios municipales y en segundo orden de prioridades está el pago a Agrotécnica Fueguina, encargada de la recolección de residuos. Los funcionarios quedan para después: “El mes pasado cobramos alrededor del 16 y el julio cobramos el 29 porque se sumaba el medio aguinaldo. Siempre privilegiamos a los empleados”, subrayó Souto, que no ahorró críticas a Federico Sciurano por la crisis municipal. “Nos dejaron una deuda que suma 373 millones y el ex intendente Sciurano hace pocos días pretendió minimizar la cifra, diciendo que eran 170 millones cuando antes era cero. Tuvimos que pedir un préstamo de 20 millones a la provincia, que estamos devolviendo, y tiene el caradurismo de pasar de cero a 170 millones como si no fuese nada”, criticó.
Refiriéndose a la deuda que certificó la Sindicatura como herencia, indicó que “esa cifra no contempla el acuerdo de 47 millones con Agrotécnica Fueguina de un reclamo de redeterminación de precios que no se cumplía desde julio de 2014. Hay 45 millones de distintos proveedores, que van desde los 20 mil pesos a los 15 millones, que están esperando el pago y en algunos casos están judicializados. Hay una deuda pendiente de 90 millones con el IPAUSS y ninguna de estas deudas está en el informe de la Sindicatura. Si determinan que esta deuda es exigible, hay que pagarla”, remarcó, preguntando a “los dos síndicos que firmaron el informe”, de los tres integrantes, si en caso de un juicio adverso se harían cargo de las costas.

Calles heredadas

Dentro de la deuda heredada, Souto incluyó el “estado deplorable de las calles de la ciudad. En veinte días vamos a empezar el plan de obras, cuando el clima lo permita, y también es una deuda, porque vamos a tener que hacernos cargo del mantenimiento que no se contempló ni el año pasado ni el anterior. Es el deterioro de dos o tres años de descuido de la ciudad”, aseveró.

Apoyo a Bertone

Pese a la deuda y las diferencias internas, Souto confirmó la decisión de apoyar a Rosana Bertone si decide postularse para presidir el partido. “Somos muy respetuosos de la figura de la gobernadora y el FPV ha podido gobernar las tres ciudades y la provincia por un proceso de unidad que arrancó en mayo de 2015 y terminó en las elecciones de junio y julio. Son notorias las diferencias a partir del conflicto que se suscitó en la provincia y algunas miradas con respecto al gobierno nacional y leyes que han votado”, reconoció.
También fue crítico porque “no nos han convocado como sector que gobierna la ciudad y tiene diputados nacionales, concejales en las tres ciudades y un legislador”; no obstante “si la gobernadora pretende que la acompañemos, le hemos manifestado que nos sumaríamos, pero tenemos una identidad que queremos respetar”.
“Hay muchos peronistas que miran preocupados las situaciones que se plantean en la provincia, como las posturas que se han tomado con las leyes aprobadas en enero, o lo que algunos consideran un acercamiento demasiado fuerte con el gobierno nacional. Nosotros lo entendemos y lo sabemos en carne propia, porque gobernar la provincia enfrentados con el gobierno nacional es difícil”, expresó.
“Hay diferencias ideológicas y críticas pero la respetamos como la gobernadora del FPV y del frente que seguimos integrando. Si desea presentarse como candidata a presidente del PJ nosotros la acompañaríamos”, reiteró Souto.
Igualmente consideró que “hay problemas más graves para atender que una interna partidaria”, sobre todo con la pérdida de fuentes de trabajo y la crisis en la industria. “Esto nos tiene que encontrar juntos peleando para que no se profundice en la provincia”, abogó.

Relación con Melella

Por último se lo consultó sobre la relación entre los intendentes y dijo que “la última vez que estuvimos junto con el intendente Vuoto fue por Semana Santa, cuando estaban los accesos cortados y tuvimos que viajar en una avioneta particular”.
“El intendente Vuoto no se ha vuelto a ver con Melella, pero hay contacto telefónico con algunos funcionarios en áreas comunes. Tampoco es necesario estar reuniéndose todos los días para compartir los problemas. Hay problemas comunes a las ciudades, uno es la deuda, otro es el transporte, y otro son las obras de infraestructura”, puntualizó.
“No tenemos necesidades de hablar y ambos conocemos los problemas de los vecinos de nuestras ciudades”, concluyó.