Decanos de la UTN de todo el país acompañaron a los padres de Micaela García

El Decano de la Facultad Regional Río Grande de la Universidad Tecnológica Nacional, acompañó a los padres de la joven asesinada Micaela García en el último adiós que el pueblo entrerriano le brindó a la joven estudiante asesinada. Además de Ferreyra, participaron el Rector de la UTN, ingeniero Carlos Brotto y demás decanos de otras facultades del país. Cabe destacar que el padre de Micaela, es Decano de la Facultad Regional Concepción del Uruguay de la UTN.

Río Grande.- “Venimos a acompañar en el dolor a nuestro colega Decano Néstor García en este día fatídico en que despide a su hija asesinada”, comentó el ingeniero Mario Ferreyra al asistir justamente al multitudinario evento en el Centro de Educación Física de Concepción del Uruguay. Además de Ferreyra, participaron el Rector de la UTN, ingeniero Carlos Brotto, los decanos de otras facultades regionales del país tanto de la UTN como el licenciado Leonardo Saíz, ingenieros Omar Berardi, Alberto Toloza, Nicolás Di Paola y asimismo autoridades académicas de otras universidades nacionales.
“Solo un padre puede saber el dolor que significa perder un hijo y por eso comprendemos el inmenso dolor que hoy tiene nuestro colega y amibo Néstor García”, añadió Ferrerya.

«Vamos a lograr el país que ella quería»

Familiares y amigos le dieron el último adiós a la joven asesinada en Gualeguay. Néstor García destacó el rol de militante de su hija y afirmó que «era mucho más que una chica que hacía caridad».
El Centro de Educación Física de Concepción del Uruguay se llenó de familiares y amigos que fueron a despedir a Micaela García, la estudiante asesinada en Gualeguay. Entre decenas de jóvenes que se comprometieron con su lucha, el papá de la chica dio un mensaje esperanzador. “Esta semana nos dimos cuenta de que no todo es una porquería. Vamos a lograr el país que Micaela quiere”, dijo Néstor García. Andrea Lescano, la mamá de la víctima, agregó: “Las cosas van a cambiar si dejamos de criar hijos machistas”.
García destacó que su hija “era mucho más que un chica de clase media que hacía caridad” y se mostró orgulloso porque formaba parte del Movimiento Evita y del colectivo Ni una menos. “Ella pensaba que desde la Juventud Peronista podía cambiar las cosas. Estoy convencido de que eligió bien el lugar”, remarcó.
El hombre agradeció el apoyo que recibió y destacó el trabajo del fiscal y de la policía. “La mayoría somos buenos. La diferencia es que solemos estar de la mitad de la fila hacia atrás y los que están adelante -en general- no tienen la vocación genuina de servir. Logran que no nos queramos involucrar, tenemos que cambiar”, sostuvo.
García también contó que lo llamó la presidenta del Supremo Tribunal de Justicia de Entre Ríos y que se largó a llorar. Según dijo, la jueza le propuso reunirse con él para corregir las cosas que no están bien y le pidió perdón por lo que no modificaron antes. “Lo valoro enormemente”, aseguró.
Más temprano, el papá de Micaela había dicho que comparte la postura de Mauricio Macri, que cuestionó el fallo del juez Carlos Rossi por otorgarle la libertad condicional al violador. Así, opinó que los cambios tienen que ser estructurales y que hay que hacerlos con leyes, no con represión ni mano dura. Además, consideró inaceptable que un ladrón tenga más pena que un abusador.
Néstor García también criticó al expresidente de la Corte, Eugenio Zaffaroni y afirmó que un violador no puede estar en la calle sin ningún control.
En su despedida, Andrea Lescano contó que su hija siempre le insistía para que se involucre en política y le decía “aunque sea tenés que hacerlo desde otro lado”. “Vengo de una generación en la que formamos hijos machistas. Si las mujeres dejamos de educar así, desde la base estaríamos cambiando muchas cosas”, opinó.
La mujer también anunció que llevará adelante una fundación para continuar con los sueños que tenía su hija y concluyó: “Estoy en paz. Sé que dí todo por mi negra. Ilumíname para poder continuar”.
Micaela García desapareció en la madrugada del 8 de abril, cuando salió de un boliche en Gualeguay, Entre Ríos. Finalmente, su cuerpo fue encontrado el sábado a ocho kilómetros de donde había sido vista por última vez. El principal sospechoso del homicidio es Sebastián Wagner, un hombre que tenía dos condenas por violación y había sido beneficiado con la libertad condicional por el juez Carlos Rossi.