El abogado que asesora a un grupo de madereros de Tolhuin expuso la decisión de avanzar en la conformación de una entidad que los nuclee. Buscan “alguna puerta de salida y algún oxígeno que impida la asfixia total”, dijo el Dr. Raúl Robles. El primer paso será un planteo al poder político en todos sus niveles para bajar la presión fiscal y acceder al crédito. Los problemas detonaron con las inversiones realizadas a partir de promesas del gobierno que no cumplió, y requisitos de la AFIP y la AREF. Están dispuestos a seguir invirtiendo en maquinaria y complementarse.
Río Grande.- El Dr. Raúl Robles, abogado de un grupo de productores madereros de Tolhuin, informó sobre la decisión de organizarse en una entidad que los nuclee, para reclamar con otra fortaleza al poder político medidas que les permitan sortear la crisis.
Robles ejerce la profesión desde hace 39 años, es profesor de la UBA y visita con frecuencia la provincia. Este viernes participó de una reunión en la localidad mediterránea, para buscar salidas que no sean el cierre de los establecimientos o el despido de personal.
En diálogo con Radio Universidad 93.5, apuntó al endeudamiento del sector ante la promesa del gobierno de comprar mobiliario de lenga, como reconversión a la caída de demanda del sector industrial, al que proveían de palets.
“Es una situación altamente preocupante y se necesita tanto del acompañamiento conjunto del sector productivo como de las autoridades gubernamentales en sus tres estamentos, ya sea nacional, provincial y municipal”, dijo.
“De los 550 trabajadores relacionados de manera directa con la explotación del bosque nativo, hoy quedan alrededor de 150, según datos del sindicato que los nuclea. Esto marca una crisis sin discusión en los madereros, que es altamente angustiante”, subrayó Robles.
“Los despidos en la actividad privada son dolorosos, pero más grave que eso es el cierre de las fuentes de trabajo. Hay que poner un límite, tiene que haber acompañamiento y asumir que esto lo resolvemos en conjunto”, sentenció.
Explicó que fue convocado al encuentro de empresarios madereros “para buscar alguna puerta de salida y algún oxígeno que nos impida la asfixia total. Siempre hubo una oscilación, pero ahora hay circunstancias que han profundizado el efecto de la crisis. Esto preocupa seriamente a los hombres que están en esta actividad”.
“Uno de los que participó de la reunión decía que esto es como la paciencia, todo tiene su límite. Es muy importante el esfuerzo que hacen los hombres de campo, porque dejan la salud para preservar las fuentes de trabajo y el desarrollo”, destacó.
Hoy tienen prevista la publicación de una solicitada, por problemas con AREF y AFIP, y la inversión a partir de promesas del gobierno, que no cumplió.
“Las circunstancias hacen que deban reconvertirse”, manifestó, teniendo en cuenta que, por la baja de producción de la industria, la fabricación de palets para embalaje de productos terminados, cayó de 20 mil mensuales a 1.500 palets, es decir menos del diez por ciento.
“Una vez que comienza la producción, necesitan respuestas con las ventas. El gobierno provincial emitió una resolución para adquirir muebles y aberturas de madera, pero para participar de esas licitaciones tienen que estar en orden con respecto a las cargas fiscales. Justamente están adeudados porque esas cargas son muy pesadas. Esto no repercute en beneficio del desarrollo y la contención de los madereros”, planteó el letrado.
Entre los productores, se discutió la alternativa de reducción de la jornada a la mitad, “otros están presentando preventivos de crisis, por la imposibilidad de sostener al personal empleado y pagar aportes e impuestos, pero estos emprendedores tienen el cuero curtido, no solamente porque trabajan en el monte con temperaturas extremas, manipulan mercadería altamente pesada, sino que tienen a sus familias y quieren aportar para que la región crezca”, afirmó.
“Más allá del procedimiento preventivo de crisis que tienen como posibilidad, o la quiebra, están conformando una entidad que los aglutine y defienda los intereses de los industriales de la madera”, informó, confiando en que la organización les permitirá “relacionarse y negociar con el gobierno, tanto municipal, provincial y nacional”.
Menos presión, más inversiones
“Esta conformación de la entidad apunta a negociar la posibilidad de reducir la presión tributaria, pero además hay otras gestiones que se diseñaron en esta convocatoria, que es una diversificación mayor de la producción, incorporando tecnología de punta, evitando la duplicación del equipamiento”, dijo.
“Cada aserradero tiene motoarrastradores, tractores, camiones. Es decir que, si hay doce aserraderos, esto se multiplica por doce. Si se incorpora tecnología de punta, la idea sería complementarse entre los aserraderos con el equipamiento”, detalló de la iniciativa.
Consideró que “lo óptimo” sería que el gobierno genere un programa antes de invertir, pero “la realidad muestra que los políticos que actualmente conducen no sé si están tan comprometidos con recibir y aceptar alternativas y propuestas de los que conocen de manera directa la actividad”, lamentó.
Consultado sobre el crédito que dio el gobierno a una empresa para que ponga un secadero en Tolhuin, cuando la mayoría de los aserraderos lo tienen, indicó que “los secaderos que tienen los aserraderos están hechos ‘a lo campo’, pero de todas maneras tienen su efecto, y se puede bajar el grado de humedad de los rollizos. Si se ha apoyado a una determinada empresa para incorporar un secadero industrial, no es bueno si no se hace a través de un programa más general”, expuso.
Reiteró que “la crisis es de una situación extrema y hay que capitalizar oportunidades, uniéndose y distribuyendo las tareas, para incorporar maquinaria para la diversificación. Esto es lo que se ha debatido y ha prendido en este conjunto de empresarios, que están verdaderamente angustiados”.
“Antes de un avance jurídico, se están agotando estos pasos con el conjunto del sector maderero para pedir a las autoridades que acompañen. Ellos están dispuestos a reordenar su conducta empresaria, para posibilitar el desarrollo de la industria”, garantizó el abogado.
La posibilidad de reinsertarse en otra actividad es muy limitada, dado que la mayoría lleva años de experiencia en esta especialidad: “Este sector tiene un perfil laboral bastante acotado, tienen las manos encallecidas por el sacrificio del trabajo y no sé si tienen muchas oportunidades de reinstalarse en otra actividad. Todos tenemos que asumir el compromiso de reorganizar la actividad y empezar a desarrollarla, buscando variantes de industrialización y mercados de exportación nacional e internacional, y reducir los costos en la medida que sea posible”, sostuvo.
“Tenemos que superar esta coyuntura y ahí debe estar el compromiso de la clase política de participar de manera más activa”, enfatizó, si bien hasta el momento no se acercaron funcionarios. “En esta reunión fue marcado como una ausencia lamentable. Se ha propiciado acompañar a los políticos que promuevan las iniciativas que defiendan la producción del bosque nativo. El político que no acompaña, no suma, y hay que dejarlo de lado o cambiarlo. Esto es algo que todos los argentinos debemos considerar, tanto en la actividad maderera como en cualquier otra actividad industrial”.
Espera que se sumen más productores, dado que la convocatoria logró que concurriera una parte de los productores. “Hay que empezar a participar sin egoísmo. Las puertas están abiertas para que se sumen todos, porque tendrían más peso para hacer las gestiones ante los distintos gobiernos”, aseveró.
Entre las inversiones proyectadas, dio a conocer “la instalación de un biodigestor que genere energía para abaratar costos, y volcar el exceso a la actividad privada o pública. Se están buscando salidas, porque la alternativa es dejar todo parado y hacer el trámite en tribunales para cerrar las fuentes de trabajo, o tratar de seguir apostando al futuro y a engrandecer la región”, concluyó.
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