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El presidente de la Cámara de Comercio de Río Grande, Diego Navarro, hizo su balance del 2017. Consideró que fue un año muy duro, no sólo para el sector del comercio sino para la población en general, y lamentó el retroceso en materia de desarrollo. Instó a las autoridades a traccionar para trabajar en conjunto y salir adelante.

Río Grande.- El presidente de la Cámara de Comercio, Diego Navarro, hizo su balance del año que finaliza por Radio Universidad 93.5, y ante todo planteó que “toda la sociedad está esperanzada en que podamos terminar el año en paz. La sociedad quiere un país con posibilidad de desarrollo y donde nuestros hijos vivan en paz. No queremos vivir nuevamente la década del ’70 y queremos la democracia, que exige responsabilidad, es una libertad con responsabilidad; si no, es libertinaje”.

El presidente de la Cámara de Comercio, Diego Navarro, hizo su balance del año que finaliza por Radio Universidad 93.5, y ante todo planteó que “toda la sociedad está esperanzada en que podamos terminar el año en paz. La sociedad quiere un país con posibilidad de desarrollo y donde nuestros hijos vivan en paz. No queremos vivir nuevamente la década del ’70”.

Luego de los sucesos de los últimos días, y un clima social todavía enrarecido, manifestó que “es triste ver el estado en que está nuestro país, con un déficit del 8.3 en 2017, y tenemos que adecuar las cuentas para volver a crecer. Hoy estamos de rodillas y algunos le echan la culpa a los últimos doce años, al gobierno actual, pero hace muchos años venimos equivocando el camino, que se hace con trabajo y no siendo Papá Noel y regalando. El pueblo necesita recuperar la dignidad del trabajo”, subrayó.

También planteó la necesidad de mirar “las particularidades del interior, que no es uno solo, pero así nos toman. Esto no se soluciona con la provincia de Buenos Aires o Capital Federal”, expresó, ante la mirada centralista del gobierno nacional.

Pidió apertura a las autoridades políticas hacia la sociedad y los sectores que pueden hacer su aporte. “No hay funcionarios que sepan de todo y hay que salir adelante entre todos. Yo siento que venimos para atrás, y no hablo de esta gestión. Seguramente la gobernadora está haciendo lo posible para sostener los problemas que tiene a nivel nacional, porque cada vez piden más cosas”, expuso.

Recordó el mensaje de Macri en campaña, las promesas de continuidad del régimen y la mano de obra ocupada, que no tiene ninguna relación con lo que está haciendo ahora. “Nos hacen ver como si fuéramos parásitos, como cuando la Dra. Carrió dijo que era mejor que nos mandaran el dinero antes que mantener la promoción, como una limosna. El costo fiscal de Tierra del Fuego es una mentira, porque si sacan la promoción no cobran ese dinero. Si Tierra del Fuego no produce, lo hace Manaos y puede ingresar sin pagar aranceles, por lo que también habría un costo fiscal y la mano de obra sería de Brasil”, manifestó.

“Es cierto que no podemos tener una monoactividad, por eso es importante el puerto de Río Grande, que traería aparejado la petroquímica y otras oportunidades de desarrollo. En Chile, si alguien quiere invertir, ya tienen una investigación para trabajar en salmónidos o cosas por el estilo, y realmente hay seriedad. Nosotros tenemos que cambiar, invertir en progreso y desarrollo. Tenemos el CADIC y seguramente el CONICET podría colaborar, y facilitar la radicación de los inversores desde el estado”, indicó.

“Hay mucha gente que se fundió porque no tuvo apoyo y debe haber acompañamiento, no solamente recursos. Tenemos la madera para hacer muebles de calidad, agua de un nivel de pureza excelente, con poco sodio, y tenemos que colaborar entre todos para que a los emprendedores le vaya bien. Si todos crecen, vamos a tener una economía saludable y calidad de vida”, afirmó.

En resumen, analizó que el 2017 “fue un año con muchos altibajos y obstáculos, que hemos sabido superar; en otros casos, como la pérdida de las líneas de informática, fue muy duro. El tema de impuestos internos se pudo superar. A principios de año tuvimos un dolor de cabeza con los Precios Transparentes, que también se logró superar. Hemos sufrido la pérdida de puestos de trabajo, pero el espíritu emprendedor que tiene Río Grande, con más de la mitad de la población con menos de 25 años, nos da una energía para salir adelante. Tenemos que enfrentar los obstáculos y superarlos todos juntos, por eso le pido a las autoridades que traccionen en conjunto, que no se estén enfrentando, porque Tierra del Fuego es una sola y nuestros hijos están esperando un horizonte claro. Ha sido un año con obstáculos pero tenemos esperanza porque los podemos superar”, concluyó