El secretario General del gremio de la construcción, Julio Ramírez, estimó que alrededor de 2.800 trabajadores del sector se encuentran ocupados actualmente en Tierra del Fuego. Destacó la reactivación en todo el país, que permite casi una ocupación plena a nivel local, donde sigue llegando gente a diario en busca de trabajo. Todavía falta personal especializado, que debe traerse de fuera de la provincia.
Río Grande.- El titular del gremio de la construcción, Julio Ramírez, dialogó con Radio Universidad 93.5 sobre la situación del sector, que se encuentra casi con ocupación a pleno en toda la provincia.
“La mayor parte de las obras empezó, ya se empezó a mover en diciembre y estamos todos trabajando. Falta empezar algunas obras más para terminar de completar toda la gente que está desocupada, hasta la veda invernal”, dijo.
“En Río Grande empezó la red de gas, las 125 viviendas del barrio Austral, los gimnasios. En Ushuaia hay asfalto y obra pública por empezar. Tenemos trabajando casi mil compañeros en Río Grande, contando los que tomó la empresa Total, que son casi 300”, señaló sobre la zona norte.
Reconoció que sigue faltando personal calificado: “No tenemos oficiales soldadores, soldador de alta, amoladores oficiales hay pocos, para todo lo que es trabajo del campo. Lo que sí tenemos son oficiales albañiles, medio oficiales y ayudantes para las obras de la ciudad, porque todos los días llega gente a la isla y es toda de la construcción, no es gente que viene a las fábricas. Para esto siempre sobra gente y tenemos desocupados que llegan todos los días del norte a la isla”, afirmó.
También hay buen nivel de ocupación en Tolhuin, donde “empezaron ahora con obras públicas, y en Ushuaia también tenemos más de mil personas trabajando, con el hospital, la obra del puerto. Tenemos más desocupación en Río Grande, por la gente que llega todos los días. Pero la gente local de Río Grande y Ushuaia casi en su totalidad está ocupada”, reiteró.
Se le preguntó si exigen un tiempo de residencia al trabajador para que pueda ingresar, pero por el momento se lograría ubicar a todos, salvo “el personal calificado que no hay, lo trae la empresa. Todos lo que hagan falta y tenemos en la isla, entran de plano”, dijo.
Pavimentación lenta
Respecto de los trabajos de pavimentación, marcó una gran diferencia con el país vecino. “Acá siempre pasa lo mismo, trabajan las mismas empresas, las que tiran hormigón son las mismas. No veo que haya algo nuevo, más rápido. Cuando venía viajando me fijé en el camino de Chile. Hace diez días faltaba un tramo de tres kilómetros y cuando volví ya estaban hechos, todos de hormigón. Lo que pasa es que tienen las herramientas necesarias, las máquinas que hacen el asfalto. En diez o quince días esa obra hasta la frontera ya está terminada y nosotros tardamos mucho más. En la ruta 3 se tira el asfalto caliente, que se empieza a hundir cuando andan los camiones. Sería bueno un hormigón como en Chile, que queda para toda la vida”, planteó.
Privados “sin plata”
Consultado sobre la obra privada, dijo que “se empezó a mover un poco porque estaba bastante parado. La gente del privado no tiene plata para hacer una vivienda, están terminando algunas obras pero no hay nuevas”, afirmó.
Hizo la excepción para el caso de Total, que “está haciendo cinco compresores y vamos a tener más de un año de trabajo. Con eso tenemos más o menos 280 compañeros ocupados”, estimó.
El dirigente espera que se pueda seguir trabajando en la veda invernal. “En las viviendas del Austral se tratará de terminar en la temporada todo lo que es por fuera, y en invierno concluir con las instalaciones internas de luz, gas, para que no sean despedidos los compañeros. Tal vez haya alguno, pero apuntamos a que sea el mínimo y puedan seguir trabajando. Esas son casas del IPV”, apuntó.
Paritarias en marzo
Por último cifró expectativas en cerrar un buen acuerdo salarial en marzo, cuando comienzan las paritarias del gremio de la construcción. “Nuestro secretario general se va a encargar de encabezar esto y veremos cómo va. Todos andan en un 15% pero yo creo que va a ser un poquito más. En todo el país se abrieron muchas obras y este gobierno nacional le dio mucho a la construcción. Yo no soy del palo del gobierno, pero tengo que reconocer que hay muchas obras en todo el país, y con Gerardo Martínez obviamente vamos a apoyar para que esto siga así. Nos interesa que la gente tenga trabajo. Después, la política no la tengo en cuenta”, expresó.
Consultado sobre la promesa del ministro Rogelio Frigerio de que Tierra del Fuego será la primer provincia en tener todos los servicios, al cabo de dos años, confió en que “sea así y no sea una promesa de campaña por las elecciones de 2019. Del dicho al hecho, hay mucho trecho”.
Lo cierto es que la UOCRA cuenta con “entre 2.700 y 2.800”personas actualmente empleadas en toda la provincia, y los salarios se están pagando en blanco, de acuerdo a la escala vigente: “Un ayudante que trabaja en el campo en una línea del gasoducto, trabajando los sábados, al mes cobra unos 35 mil pesos. En la ciudad el ayudante cobra entre 25 y 27 mil pesos. Un soldador de alta gana más de 60 mil pesos. Los amoladores están en más de 50 mil pesos -detalló Ramírez-. Creo que no es un sueldo malo, quizás no alcanza para todas las necesidades pero hacemos lo posible para conseguirle algo más a la gente, como el pago de viandas y que sumen un poco más. En la construcción hoy por hoy no puedo decir que estamos mal”, concluyó.
Post your comments