El vicepresidente del PJ recordó que cuando el peronismo fue unido, siempre ganó. En el nuevo armado se sumarían otros partidos que ya formaron parte de la propuesta electoral de 2017, encabezada por Laura Colazo. Pino mencionó al intendente capitalino, al diputado nacional reelecto, pero no a Gustavo Melella.
Río Grande.- El presidente del Concejo Deliberante de Ushuaia, Juan Carlos Pino, además vicepresidente del PJ fueguino, habló ayer con Radio Universidad 93.5 sobre las perspectivas para el 2019 y expuso sus aspiraciones de conformar un nuevo frente, que reúna partidos que se sumaron en la propuesta electoral de 2017, como el de Laura Colazo, otros que tienen referentes dentro del gobierno en la actualidad, y también al intendente Vuoto y al diputado Martín Pérez, que habían sido parte del proyecto de 2015.
En marzo está previsto un congreso partidario, según había adelantado el vicegobernador Arcando, y se le preguntó si hablarán de cómo reagruparse luego de la derrota electoral de la lista que encabezó Colazo. Para Pino no fue una derrota sino una buena elección, dentro de la difícil posición que tenía el gobierno de Bertone: “Nosotros teníamos la opción de distintos candidatos. Podríamos haber sumado al FPV y armar un frente del sector de Cristina Kirchner, o sumarnos al del gobierno nacional. Sin embargo decidimos llevar candidatos propios y sumar sectores que tienen que ver con un futuro frente en Tierra del Fuego. Elegimos a Laura Colazo por un acercamiento de su partido y fuimos con candidatos propios de Tierra del Fuego”, manifestó.
Reconoció que “la lucha entre el kirchnerismo y el gobierno nacional a Tierra del Fuego la ponía en un lugar muy difícil y se buscó algo intermedio. No fue una mala elección, lo que pasó es que la gente miró más lo que pasaba a nivel nacional, como en otras provincias”.
“El peronismo cada vez que fue en unidad, siempre ganó. Por eso miro para adelante y espero la unidad del peronismo, donde esté Walter Vuoto, Martín Pérez, Queno y Rosana Bertone”, puntualizó, aspirando a reconstruir la propuesta de 2015, ampliada a otros partidos, y a su vez dejando excluidos a otros, dado que no mencionó al radical Gustavo Melella.
Pino aseguró respecto de este nuevo frente que ya se está “trabajando para que se lleve adelante. Hay nuevos emergentes como Martín Pérez en Río Grande y Laura Colazo, y uno arma con todos los sectores, internos y externos. En el estado pueden trabajar todos los sectores, acompañando, como ocurrió con el partido PAR de Lolo Cárdenas, con el MPF donde está Castelli, o en el Ministerio de Economía donde hay un radical. El gobierno está conformado por distintos partidos y esto fue un compromiso que se llevó adelante”, dijo de los acuerdos de 2015, que se tradujeron en un gabinete y áreas del estado de composición heterogénea.
Según Pino “se puede convivir tranquilamente y se puede llevar adelante un proyecto de provincia y de ciudad. A esto aspiramos. Yo me junto con todos los sectores y no tengo inconveniente. Me reúno con los históricos, como Carlos Manfredotti, Mario Daniele, Chiquito Martínez. También me junto con los nuevos sectores que se han formado. Son reuniones partidarias y de trabajo”, dijo.
Aclaró que “no todos tenemos la misma postura con respecto a lo que hay que hacer para adelante, pero tenemos claro que la unidad la conformamos todos, Martín Pérez, Queno, Vuoto, Rosana Bertone, los compañeros petroleros, los que militan en algún gremio u organismo social. Nosotros somos un partido frentista y necesitamos también de otros partidos políticos”, expresó.
Melella, aparte
Si bien no lo mencionó, Pino deslizó una crítica velada a quien no formaría parte de la nueva construcción. “Cuando convocamos e hicimos un frente, todos ganamos. Ahora, algunos sintieron que ganaron solos -disparó-. Usaron toda la estructura del frente para llegar a determinados cargos, y hay confrontación con el proyecto de provincia y de ciudad que queremos. Esa es la diferencia. Nosotros apostamos a solucionar los problemas de la gente; ahora si otro va a pintar, a poner cordón cuneta, florcitas, y va a pagar los sueldos, no es la política que queremos”, sentenció.
La aspiración reeleccionista es clara: “Nuestro proyecto va más allá de una gestión y tiene que ver con una política de estado. Queremos que se tome como una política de estado la inversión pública y que no sea solamente el pago de salarios la discusión”, subrayó.
Concejo por los barrios
Por otra parte, se refirió a la sesión del miércoles, que no se realizó en el recinto y será una modalidad sostenida todo el período legislativo: “El Concejo va a salir a sesionar a todos los barrios y esta vez lo hicimos en La Cantera, que abarca varios barrios de la ciudad. Nunca habíamos decidido salir continuamente y este año todas las sesiones las vamos a hacer fuera del Concejo Deliberante, la próxima se hará en el sector del Río Pipo, en el mes de abril”, adelantó.
“La idea es que la gente conozca cómo funciona el Concejo Deliberante, cómo llevan adelante los proyectos. Esta vez participó la Prefectura, la Cooperativa Renacer, vecinos del barrio La Cantera, San Vicente, sesionamos desde las 11 hasta las 18 y pasó gente con distintos temas”, dijo.
“Trasladamos las taquígrafas, el sonido, todo a un gimnasio y no bajó de cien personas la participación en todo el día”, destacó.
Obras en marcha
También abordó las obras que se están ejecutando, junto con la provincia. El municipio tenía “2.770 millones de presupuesto y, con el convenio firmado con el gobierno, recibimos 270 millones más, así que rondamos los 3.000 millones de pesos. Esos 270 millones tienen destino específico para obra pública”, indicó.
“Las calles principales se han asfaltado, se han repavimentado y se están haciendo obras estructurales como la Perito Moreno, porque se le han incorporado cuatro carriles. Además estamos trabajando permanentemente con la crisis habitacional en Ushuaia. Nosotros desdoblamos el padrón de demanda habitacional, porque tenemos varios asentamientos que se están regularizando. Cuando asumimos teníamos más de 14.500 inscriptos en el registro. Desdoblamos eso con los que estaban ocupando espacios no permitidos y nos quedó la mitad, casi 7.500 con demanda. Se desafectó tierra para urbanización y en diciembre aprobamos doce barrios en la zona alta de Ushuaia, donde ya se puede empezar a trabajar en el tendido de servicios, apertura de calles y el municipio puede preadjudicar predios. Hay alrededor de 7.000 preadjudicatarios en la zona de Andorra. La demanda real es de 7.000, y la urbanización más grande es el barrio San Martín, con 500 soluciones habitacionales. El municipio tiene que hacer apertura de calles, servicios, mensura y entregar el predio, y el costo del terreno lo pueden pagar hasta en 200 cuotas”, informó.
También dio cuenta de la decisión de aumentar el valor de los terrenos para evitar la especulación inmobiliaria:
“Hasta el 2016 los terrenos salían 11 ó 12 mil pesos en Ushuaia, que era un precio irrisorio. Les daban el título de propiedad y lo terminaban poniendo en el mercado inmobiliario. El Concejo, a pedido del municipio, elevó el monto de los predios y hoy hablamos de 250 mil pesos por un terreno del estado. Se puede pagar hasta en 200 cuotas, que lleva una cantidad de años durante los cuales el adjudicatario va a hacer las mejoras y va a vivir en el lugar, en vez de vender el predio. Igualmente el valor es menos que un vehículo cero kilómetro”, comparó.
“El precio está congelado a junio de 2016. El metro cuadrado municipal tiene un valor de 600 pesos. En la parte privada hablamos de un valor por encima de los 1.500 pesos o más, según la zona. Es un precio accesible para muchos vecinos”, sostuvo.
Transporte público
Asimismo, valoró el logro de haber resuelto el problema con los colectivos: “En 2016 aprobamos no sólo la creación de la sociedad del estado sino el crédito para la compra de colectivos. Hubo inconvenientes para acceder al crédito para el transporte y el municipio vino pagando la cuota hasta diciembre del año pasado, con fondos del estado municipal. A partir de diciembre comenzó a cobrar el subsidio, que simplifica un poco las cosas”, manifestó.
“La novedad es que el transporte de colectivos es municipal. Es una empresa del estado que no se va a ir de Ushuaia y lo único que tiene que hacer pagar sueldos y comprar colectivos. Las empresas que estaban antes no invertían en el transporte. En este caso hay una empresa municipal, que permite recaudar y reinvertir en nuevas unidades. No se trata de tener ganancias”, enfatizó.
Tendido de servicios
Respecto de las redes de agua, gas y cloacas, observó que “en Ushuaia no hubo inversión en agua y cloacas todos estos años. Hoy se está haciendo una planta en la desembocadura del Arroyo Grande, que va a contener por lo menos a siete mil usuarios de la zona. El crudo iba a parar al mar sin ningún tratamiento. Esta planta es una inversión de la DPOSS a través de fondos nacionales y provinciales. Toda la zona alta de la ciudad, Andorra y toda la zona norte, va a estar contenida por esta planta”.
“Además se tiene que hacer saneamiento en toda la ciudad. En El Escondido nace un cañadón contaminado y ya está trabajando la DPOSS en este tema, con un tendido de agua y cloacas que antes no tenía. Todo esto tiene que ver con mejorar la salud de la gente y nuestra ciudad no puede seguir todavía con camiones aguateros”, planteó el edil.
“Hubo un tiempo sin obras de estas características y la ciudad creció. El sector del Pipo en el 2005 tenía 600 habitantes y hoy tenemos 5.200 viviendas con servicios. Es la mayor urbanización que se ha hecho en estos tiempos y parte es privada y parte del Estado. En Andorra en 2005 vivían 350 familias, y era un lugar de emprendimientos productivos. Hoy viven 1.800 familias, sin contar la zona alta, donde tenemos viviendo unas dos mil”, apuntó sobre los asentamientos irregulares.
“La gente cuando no puede pagar el alquiler ha tomado estas decisiones por desesperación. En Ushuaia los alquileres van de los diez mil, quince mil, para un monoambiente o una vivienda para dos o tres integrantes. En muchos casos es imposible pagar. Es una ciudad turística y las cosas cuestan más que en otros lugares. Hay que solucionar el tema habitacional y el saneamiento del sistema cloacal, y brindar el agua”, subrayó.
“Nosotros proveemos de gas al resto del país y hay siete mil familias que usan garrafa. La decisión que ha tomado la gobernadora de llevar el gas y hasta colocar el nicho, es lo que se debe hacer, porque es un ahorro a futuro y mejora la calidad de vida de la gente. Si hubiera red de gas, disminuiría el gasto en subsidios”, dijo, dado que se llevan más de 700 millones del presupuesto de este año.
“Uno trata de no responsabilizar a nadie, pero sabemos que fue poca la inversión en estos últimos 15 años en materia de servicios. Esto va más allá de lo electoral, porque los caños que van bajo tierra no se ven. Muchas veces se decidió hacer cosas que se vieran y no estas que van bajo tierra”, cuestionó.
En cuanto al pase de la DPOSS a la órbita municipal, puso en duda “si conviene o no en este momento. Lo que sé es que el servicio se le tiene que dar a la comunidad. O lo da el gobierno, o lo da la Municipalidad. El intendente Vuoto al comienzo pidió el traspaso de Obras Sanitarias y por distintos motivos no se pudo llevar adelante, pero siempre tiene que haber diálogo. En la elección de 2015, Walter Vuoto, Rosana Bertone y Gustavo Melella estuvieron juntos, después vinieron las ambiciones políticas y otras cosas, pero lo que no se puede dejar de hacer son las cosas para la gente. No importa si lo hace el Estado municipal o el provincial. En Ushuaia hay muchas cosas que le corresponden al municipio y las hace el gobierno, y está bien, porque de última le da solución no al intendente, sino a los vecinos”, concluyó Pino.
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