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El Diputado Nacional Tierra del Fuego por Juntos por el Cambio,  Héctor ‘Tito’ Stefani aseguró que está dispuesto a concurrir a los gremios si éstos lo convocan para discutir el proyecto de reforma laboral que está impulsando. “Siempre el sano debate permite mejorar cualquier proyecto y estoy dispuesto a reunirme con los gremios para discutir mi proyecto”, expuso. También destacó la unidad lograda entre las cinco listas que compitieron en las PASO y el objetivo de trabajar juntos para las generales del 14 de noviembre. Afirmó que el gobierno de Macri, si bien cometió errores, fue “mejor que cualquier gestión kirchnerista” e instó a ampliar la base con otros partidos y ciudadanos que quieren “democracia de calidad” y defender la república. Adelantó que “en 2023 el Gobierno que asuma va a ser de Juntos por el Cambio y va a tener que tomar medidas que en principio van a ser resistidas por la sociedad, pero después le van a permitir a la Argentina arrancar”. Entre ellas mencionó la reforma laboral, la reforma impositiva y la reforma del Estado.

Río Grande.- El diputado Héctor Stefani, de Juntos por el Cambio, presidente del PRO en Tierra del Fuego y candidato a la reelección, dialogó por Radio Universidad 93.5 sobre el avance del trabajo conjunto de las cinco listas que participaron en las PASO. “Yo tenía la convicción de que había que construir con todos y todos cumplieron con lo que dijeron que iban a hacer en campaña, que quien pierde acompaña. Entendemos que el desafío es muy grande y tenemos que armar un equipo. Todos queremos vivir en una democracia de calidad, con divisiones de poderes, con libertades. Estamos todos entusiasmados, tanto Fernando Gliubich como Javier Da Fonseca, Maxi Ybars y Ricardo Garramuño. Tenemos la vocación de formar un equipo y con vocación y trabajo esto va a pasar”, manifestó.

“Las elecciones del 14 de noviembre son un paso importante para el país, porque la Argentina está sumida en una crisis profunda. Estamos en un barco sin rumbo, no hay plan económico, y se emite una cantidad de dinero con la consecuencia que tiene sobre la economía. En el presupuesto están planteando una inflación del 33% y que los números cierran con 10 mil millones que va a prestar el FMI, es un dibujo”, consideró.

“Ya nos endeudamos y no podemos seguir endeudándonos. Hay una gran desaprobación de los argentinos, que no quiere este modelo. Esto tenemos que tomarlo con mucha responsabilidad y por eso tenemos que juntarnos. Este equipo está abocado a representar a la mayor cantidad de fueguinos y estamos dando a conocer nuestras propuestas, escuchándonos entre nosotros”, sostuvo.

En cuanto a las críticas a la gestión Macri, sobre todo por el perjuicio a la provincia de Tierra del Fuego, expresó que “en los cuatro años de Cambiemos se cometieron errores pero se hicieron muchísimas cosas bien. Hay un enorme relato sobre la fuga de fondos de la deuda que se tomó y resulta que los 15 primeros en la lista son kirchneristas.  Además el 75% de la deuda que se tomó fue para pagar lo que dejó el kirchnerismo. Tomaron deudas a tasa cero y se gastaron la plata del fondo de sustentabilidad y de los jubilados. Uno de los errores de la gestión de Macri fue querer acomodar en 4 años errores de 30, como el subsidio de tarifas. Igualmente comparado con cualquier otro gobierno kirchnerista, el gobierno de Macri es un lujo”, subrayó.

Reforma del Estado

Adelantó que “en 2023 el gobierno que asuma va a ser de Juntos por el Cambio y va a tener que tomar medidas que en principio van a ser resistidas por la sociedad, pero después le van a permitir a la Argentina arrancar. El país no tiene actividad privada. Las pymes tienen que pagar 106 impuestos y tienen que trabajar de manera informal, porque se funden y los empleados no cobran indemnización”, señaló, abogando por una reforma del Estado.

“Tenemos sindicalistas multimillonarios que representan a trabajadores pobres, y todas esas cosas hay que cambiarlas. Si el gobierno de Juntos por el Cambio no hace una reforma laboral, impositiva y del Estado, Argentina no va a cambiar”, aseveró.

Asimismo, aclaró que su proyecto no busca la “eliminación de las indemnizaciones sino un seguro de garantía de las indemnizaciones. Eso sale de la planta que están aportando los empleadores. Hoy tienen una carga del 34,6% y el promedio de América Latina es del 21%. Yo propongo que parte de esos fondos vayan a un seguro a nombre del trabajador, manejado por un fideicomiso entre el Banco Central, la Superintendencia de Seguros y el ANSES. La antigüedad se acumula aunque el trabajador cambie de trabajo. La empresa va a poder tomar trabajadores y, si se va, cobra ese seguro. Si es despedido el empleador se hace cargo de su salario y luego cobra el dinero del seguro. Hay 27 países con estado de bienestar que aplican esto en el mundo, y no son países neoliberales, sino que generan empleo. No hay Estado posible sin actividad privada. La plata la genera la actividad privada y el Estado administra”, remarcó.

En cuanto al proyecto de reforma de los sindicatos, limitando la reelección indefinida, consideró que “el sindicalismo tiene que corregir el rumbo y defender al trabajador. Tenemos que hacer que el trabajador se afilie al sindicato pero que elija voluntariamente al sindicato. Además el que maneja el sindicato no puede ser el mismo que maneja la obra social, y todos los años debe mostrar su declaración patrimonial, como hacemos nosotros”, dijo.

“Encima hay sindicatos que permiten que las empresas hagan contratos con los trabajadores por debajo de las condiciones que plantea el convenio colectivo. En Tierra del Fuego tenemos contratos semanales, quincenales, mensuales, y ese fue un arreglo del kirchnerismo con ‘el Zurdo’ Martínez”, acusó.

Reiteró que, de no corregirse el rumbo, “vamos camino a Cuba o Venezuela, donde no se va a ir a vivir ningún kirchnerista jamás, y nosotros estamos enfocados en sostener a la república, porque el Poder Ejecutivo no puede seguir haciendo lo que está haciendo”.

Fuga de cruceros a Chile

También cuestionó las políticas nacionales que están ahuyentando al turismo de Argentina y en particular de Ushuaia. “Hoy los barcos se van a Chile porque no quieren firmar la posibilidad de apertura. Ya vimos lo que pasó con los vuelos, donde todo el mundo volaba menos Argentina. Los barcos manejan con mucha antelación su temporada y estamos dilapidando lo que conseguimos con muchos años de esfuerzo. Necesitamos que los barcos entren, porque el turismo es una actividad importantísima. Una vez que el barco se fue a otro puerto donde recibe los servicios que necesita, no vuelve más”, sentenció.

“El puerto de Ushuaia fue una obra espectacular en el ’94 y tiene que ser turístico exclusivamente. Hay que concesionarlo por 30 años. Río Grande debe tener su puerto, porque es vital para el desarrollo productivo teniendo en cuenta que vivimos en una isla”, agregó.

Asimismo, se lo consultó sobre la queja del presidente de la Cámara de Turismo, Ángel Brisighelli, porque solamente están previstos 4 vuelos diarios a Ushuaia para la temporada de verano, cuando normalmente eran 12 y llegaron a tener 20 por día. “Esta es la misma política del Estado kirchnerista, porque tenemos una línea de bandera con uno de los costos más altos de funcionamiento. Hemos reclamado mayor cantidad de frecuencias porque en Ushuaia hemos tenido más de 14 vuelos por día y con 4 es muy difícil viajar. Yo presenté un proyecto no solamente para Tierra del Fuego sino para varias provincias, donde establecemos un pasaje para residentes con un descuento del 50% de la tarifa y la disponibilidad de un 30% del avión para los fueguinos. Hoy si se saca un pasaje de un día para otro a Buenos Aires está entre 60 y 70 mil pesos y además hay que conseguir lugar. El ex ministro Guillermo Dietrich en materia aerocomercial generó una revolución en Argentina, porque desarrolló El Palomar, la ruta a Córdoba para vincular todo el norte argentino con el sur, había varias líneas aéreas funcionando, como Norwegian, Jetsmart, LAN, y todas se fueron. El camino es totalmente diferente al que está llevando este gobierno”, comparó.

Pobreza en la provincia

Respecto de la pobreza que observa en Tierra del Fuego, dijo que ha “caminado los distintos barrios y en la margen sur hay 62 comedores comunitarios. La persona que recibe un plan tiene una solución temporal, pero no puede ser permanente. Hay gente en el Estado como pasantes que cobran 36 mil pesos por mes. Está demostrado que el Estado no puede absorber más gente y no resuelve los problemas económicos, sino que administra lo que genera la actividad privada”.

“Lo que vemos es que la gente quiere trabajar y no quiere más el plan, quiere que generemos empleo privado y quiere dignidad. No se puede estigmatizar al pobre, darle un plato de comida y que vaya a votar. Por eso necesitamos una profunda reforma laboral, y dar un seguro de indemnización al trabajador que le va a garantizar que la cobre”, enfatizó.

Ampliar la base

Finalmente indicó que “de acá al 14 de noviembre vamos a seguir trabajando todos los días, contándole a la gente cuáles son los proyectos a todos los sectores que integramos Juntos por el Cambio y también a los partidas que tengan vocación de vivir en una democracia de calidad, no en un gobierno autoritario que gobierna con decreto”.

Se intentarán sumar más voluntades en este camino de construcción. “Nosotros vamos a buscar unir todas las voluntades y los partidos que entiendan que quieran sumarse a sostener la república el 14 de noviembre. Vamos a hacer lo posible para que se sumen todos los partidos que tienen esa mirada, e integrarlos a un proyecto. Tenemos que juntar a los mejores dirigentes de cada partido y tenemos el desafío grande de construir con una visión más grande”, sostuvo.

“Para cualquier estamento ejecutivo donde vayamos a participar tenemos que tener un proyecto, y ese proyecto debe tener la integración de toda la actividad privada, la actividad educativa, las facultades, los empresarios, las asociaciones civiles. Si no formamos un equipo y solamente nos quedamos con el proyecto, tampoco nos va a ir bien. Queremos armar un proyecto para la provincia y para los municipios”, concluyó.