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Así lo afirmó el representante de CAFIN ­-Cámara Fueguina de la Industria Nacional- Alberto Garófalo ante la incertidumbre existente en algunas empresas confeccionistas que se encuentran paralizadas porque no tienen aprobación de la licencia automática. Asimismo, exteriorizó que “en un horizonte de escasez de dólares, la provisión de insumos del exterior no se sabe si va a estar garantizada”. Además, indicó que “todavía las empresas están a la espera de la reglamentación de los recién decretos 727 y 725”.

Río Grande.- En diálogo con Radio Universidad 93.5 y Provincia 23, el representante de CAFIN –Cámara Fueguina de la Industria Nacional- Alberto Garófalo analizó la situación de la industria en el nuevo contexto de país y provincia luego de la extensión del subrégimen industrial que anuncio el gobierno nacional el año pasado.

En este sentido manifestó que “estamos hablando de dos decretos, el 725 y el 727, donde el 725 en definitiva crea el fondo fiduciario, y el 727 es el que establece la prórroga por 15 años para la mayoría de las empresas sujeto a determinadas condiciones y que deja afuera a las textiles o bajo un sistema que no está muy claro todavía”, explicó.

Puntualizó que “el decreto 727 se ha comenzado a reglamentar, no así el 725, pero suponemos que todo esto debería estar definido en el plazo que marca el decreto porque la opción debería ejecutarse antes del 22 de abril”, dijo.

Si bien el decreto establece que se comenzaba a recaudar a partir del 1 de enero, Garófalo señaló que “eso es lo que dice el decreto, lo cual genera algunas discusiones de tipo legal, dado que si la prorroga es a partir del 1 de enero del 2024, anticipar el cobro del fondo a enero del 2022 es cambiar las condiciones del contrato original, o sea en principio es así, pero veremos si este punto no lleva a una discusión”.

El representante de CAFIN indicó que “las empresas tienen ese plazo para definir si van a ingresar en la prorroga o no, en todo caso si no lo hacen sus beneficios continúan hasta el 31 de diciembre de 2023, a partir del 1 de enero de 2024 ya no tiene más los beneficios del subrégimen industrial, eso está claro en la letra del decreto”.

Asimismo dijo que “en principio está claro que la gran mayoría de las empresas harán uso de la prórroga, pero hay un grupito de empresas que deberán revisar muy bien sus números por diversas condiciones que incluso exceden al régimen promocional, o sea esto es porque en definitiva hay algunas empresas que no definen sus precios porque  sus productos son un commodities que el precio se los pone su cliente y en algunos casos complica, y si a eso le agregamos que no está claro cuál será en el futuro del acceso a los insumos importados porque algunas están teniendo restricciones fuertes para la importación de materia prima como por ejemplo aquellas que tienen insumos que necesitan licencia automática, en este momento hay algunas empresas confeccionistas que están paradas porque no tienen aprobación de la licencia automática, entonces en un horizonte de escasez de dólares, la provisión de insumos del exterior no se sabe si va a estar garantizada, por lo cual es la preocupación adicional al tema promocional al impacto sobre su inversión económica, pero la gran mayoría va a optar por continuar, por lo menos en las condiciones que todos conocemos y que la reglamentación tendrá que venir a aclarar dado que hay muchos puntos grises en los decretos, pero sobre todo en el 727 que esperamos que la reglamentación finalmente los pueda dilucidar”, sentenció.

Con relación a las textiles dijo que “las empresas radicadas en Tierra del Fuego importan sus productos desde Pakistán, China, pero no necesariamente desde la India, pero el tema no es el origen de las mercaderías, sino sobre todo en el caso de que necesitan licencias automáticas y si estás serán acordadas”, aclaró.

Empresas reinvertirán en productos que no se encuentran dentro del subrégimen industrial

Consultado sobre aquellas empresas que se encuentran radicadas en la provincia reinvertirán sus ganancias en otros productos que no están dentro del subrégimen industrial como para apoyar la modificación de los recursos naturales de la provincia. “Hay empresas interesadas en una serie de posibilidades, dado que esto abre efectivamente por un lado la posibilidad de invertir en productos electrónicos que seguirán bajo el subrégimen, que no tienen que afectar al continente y no se deben fabricar en Tierra del Fuego, lo que es una condición bastante curiosa, pero además están los proyectos y habrá financiamiento para aquellas actividades no ligadas al subrégimen como lo es el turismo, la ganadería, la madera, la turba, el agua, es decir todo lo que está relacionado a los recursos naturales, e incluso operaciones no de transformación sino de tipo más comercial como puede ser un proyecto de turismo amparado bajo este paraguas de financiamiento”.

Garófalo dijo que las Cámaras están a la “espera de que se reglamenten estos dos decretos, dado que a partir de que un 40% del aporte que hacen las empresas lo van a poder destinar a inversiones en proyectos propios, todo el mundo va a buscar donde invertir ese dinero porque es una forma de capitalizarlo y tener un retorno por el dinero que está invirtiendo”.

Finalmente explicó que “la empresa hace el aporte a este fondo fiduciario que es nacional, pero la empresa al hacer el aporte al Estado puede comunicar que el 40% del cual dispone para hacer inversiones productivas lo va a destinar a determinado proyecto, pero ese proyecto debe estar aprobado por el comité ejecutivo”, cerró el representante de CAFIN –Cámara Fueguina de la Industria Nacional- Alberto Garófalo.