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Así lo afirmó Daiana, empleada de Digital Fueguina, empresa que mañana jueves 5 de mayo cumple un año de su cierre producto de la crisis que sufrió el grupo Garbarino a nivel país y que los empresarios dueños de Digital y Tecnosur abandonaron la fábrica, adeudando el pago de sueldos y aportes correspondientes. La empleada metalúrgica señaló que “es increíble que ya paso un año y todavía no tenemos respuestas concretas”. También fue critica del accionar de la UOM hacia la situación de la fábrica manifestando que “nos sentimos raro, como si no perteneciéramos a la UOM, en las elecciones no pudimos votar, somos UOM pero no pudimos votar, somos UOM pero no podemos estar en los congresos, somos UOM pero hay un montón de trabas que nos ponen y es difícil porque nos gustaría estar ahí”

Río Grande.- Mañana jueves 5 de mayo de 2021 se cumple un año del cierre de Digital Fueguina, producto de la crisis del grupo Garbarino a nivel país, donde las autoridades empresariales de Digital Fueguina y Tecnosur abandonaron la fábrica, desentendiéndose de todo tipo de responsabilidades laborales y sociales que tenían para con los trabajadores, adeudando de esta manera así el pago de sueldos y aportes.
Daiana, una de las empleadas de la fábrica, recordó que “hoy ya cumplimos un año del cierre de la fábrica, de lo que fue el último día de trabajo, el 5 de mayo ya no había nadie en la planta, la verdad que es horrible, es una situación feísima, nunca creímos poder llegar al año, creíamos que esto se iba a solucionar con tantas promesas que tuvimos, con tantos inversores que habían llegado, ahora en teoría hay un inversor nuevo, pero seguimos en la misma situación, seguimos con este inversor que están negociando, pero respuestas concretas no tenemos absolutamente nada”.
Rememoró que “la última respuesta fue de parte de la empresa y les llegó solamente a los supervisores, a los operarios no nos llegó nada, nosotros vinimos a las 6 de la mañana a trabajar como todos los días y nos encontramos con una planta vacía, abandonada y sin ninguna explicación”.
La empleada metalúrgica dijo que “en este último año hemos tenido cambios de compañeros que han estado conversando, muchísima gente que ha pasado por la fábrica, desde políticos hasta vecinos, pero cuando vienen, solamente vienen a hacer campaña, ven como estamos, están un rato, se van y se olvidan de nosotros, en tanto nosotros seguimos acá afuera, otra vez nos está agarrando el invierno, pero no vamos a bajar los brazos, estos son nuestros puestos de trabajo, son puestos de trabajo de Río Grande y los tenemos que defender, tenemos que entender que si no lo defendemos nosotros, lamentablemente no los va a defender nadie”.
Cabe recordar que al cierre de la fábrica, 250 trabajadores quedaron a la deriva sin explicación alguna y hoy se encuentran atravesando por una de las luchas obreras más largas de los últimos años.
En cuanto a ayudas que están recibiendo, señaló que “seguimos con la panificadora, la cual es de una gran ayuda, sobre todo a los compañeros que peor la están pasando y los vecinos que nos ayudan comprándonos lo que hacemos”, dijo, al tiempo que agregó que “nuestros compañeros no son todos jóvenes, la mayoría tiene entre 10 y 14 años trabajando en la fábrica, hay compañeros con problemas de salud que no los toman en ningún otro lado, entonces no nos queda otra que venir, hacer panificados, hacer tortas fritas, lo que sea necesario para no caer en la indigencia, pero es la única de poder estar a flote, además de los bonos que es una ayuda para todos los compañeros”.
Puntualizó que “la venta del bono va bien, los vecinos son muy solidarios, no nos podemos quejar, son los que siempre nos apoyaron, son los que pasan por acá afuera, nos tocan bocina, nos dan un grito de apoyo, lo cual nos alienta, entendiendo que los vecinos estén enterados de nuestra situación y que nos apoyen, realmente es algo gratificante porque te hace sentir en realidad que no estás tan solo”.
Por otro lado fue critica con respeto al apoyo que están teniendo desde el gremio, sosteniendo que “no hemos tenido muchas noticias de ellos en el último tiempo, a veces nos acercamos, pero ellos están más metidos hoy con el tema del paro, del aumento, con lo cual no hay muchas novedades por parte del gremio”.
En este sentido reprochó que “hoy nos sentimos raro, como si no perteneciéramos a la UOM, en las elecciones no pudimos votar, somos UOM pero no pudimos votar, somos UOM pero no podemos estar en los congresos, somos UOM pero hay un montón de trabas que nos ponen y es difícil porque nos gustaría estar ahí, nosotros mismos buscar el apoyo de todos los delegados y compañeros de todas las otras fábricas, nosotros mismos poder ir a las reuniones que ellos tienen y expresar nuestra propia situación, buscando todos juntos una solución, una respuesta porque nosotros somos operarios, no somos gente del gremio que la tiene clara con respecto a cómo se maneja esta situación, pero tampoco nos caemos en eso y de morir reprochando, le seguimos dando para delante de la manera que sea”.
Consultada sobre la situación de Australtex, que luego de un feroz incendio, hoy ya está nuevamente trabajando, mientras que Digital sigue igual, la empleada metalúrgica expresó que “Digital Fueguina es una fábrica nueva, con toda la tecnología, con todo al pie del cañón para poder arrancar mañana mismo, nosotros la vamos manteniendo, enciendo las máquinas para que no se estropeen, en tanto que una fábrica que se quemó integra como Australtex ya la levantaron, está completamente nueva, lista para salir en marcha, mientras nosotros seguimos a la espera con una planta impecable, realmente es un contraste muy difícil de asimilar”.
Finalmente se refirió a la relación con Newsan, para lo cual indicó que “no hemos tenido novedades, nos dieron vueltas la cara, desaparecieron, tenemos que comenzar a hablar de nuevo con ellos con los materiales que tienen en la planta, pero la realidad es que no tenemos novedades, nos habían dicho que Newsan era una empresa seria, muy respetada, pero terminó siendo una empresa como todas”.