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El radical Fernando Gliubich expuso su decisión de ser candidato el año próximo y apuesta a un proyecto político integrador. Fue crítico de la falta de apoyo en elecciones anteriores y recordó que cuando quiso disputar una banca de diputados “faltó que llamaran a Fabiana Ríos al espacio para jugar”. Se preguntó dónde están los que participaron de la interna, porque “no se los ve”, y lamentó la pérdida de votantes de la UCR por haber cerrado el partido, como observa en otros tradicionales. Valoró el gesto de involucrarse de los convencionales Ramiro Requejado y Myriam Canga, mientras que otros con mayor liderazgo y trayectoria han optado por no participar o buscar “lugares más seguros”. Apela a “la construcción de un espacio distinto pero el conservadurismo lleva muchas veces a no jugar, a las medias tintas y a quedarse en la mitad del río, y nos lleva la corriente”, advirtió.

Río Grande.- El radical Fernando Gliubich visitó los estudios de Radio Universidad 93.5 y Provincia 23 adelantó su intención de ser candidato de Juntos por el Cambio en el 2023, además de cuestionar la falta de respaldo del partido en elecciones anteriores.
En principio hizo un análisis de la situación del país y planteó “un escenario muy complejo con las restricciones a las importaciones. La mayoría de los productos que uno comercializa son de origen importado. Se hace difícil la planificación, hay tiempos de cobro, de recupero, y las restricciones de la semana pasada se referían a la aprobación de SIMI -sistema integral de monitoreo de importaciones-, con mercadería en tránsito recién ingresada a la Argentina. A los 180 días teníamos que cancelar esas divisas y se hace difícil poder pagar, porque el Estado no permite pagar y la mercadería no la van a despachar, por otro lado, el mismo Estado a través del Banco Central sale a comprar dólares en la plaza. Son contradicciones que se van generando en el mercado interno y repercuten en los distintos niveles de la economía, desde el comerciante pequeño al más grande”, dijo.

“Hoy es difícil ser comerciante y también ser empleado, porque a la gente se le hace muy complicado llegar a fin de mes, con una suba de precios de productos básicos de manera permanente. Hoy es muy difícil vivir en la Argentina y el salario se ha deteriorado de manera significativa”, sostuvo.

Cruce por aguas argentinas

Sobre la presentación del estudio de factibilidad para la obra del cruce por aguas argentinas, prefirió “esperar el resultado final porque todavía no ha finalizado el análisis económico-financiero. Cuando uno escucha la presentación, parece un proyecto faraónico y genera ruido, por el nivel de deterioro que tiene la provincia y grandes cuentas pendientes en materia de desarrollo. Es importante avanzar del punto de vista estratégico en un proyecto de integración con el continente, pero hay que ver la magnitud de la inversión. De la factibilidad a la realidad hay un paso muy grande, sin mencionar las prioridades que tiene la provincia. También está atado a la factibilidad la cuestión energética y el grave faltante de energía que tiene toda la provincia, porque estamos totalmente al límite. Hay gente en el mundo que se dedica a llevar adelante estos proyectos y puede ser una alternativa para la provincia. En su momento hablamos de proyectos de industrialización del gas que todavía están de manera incipiente”, observó.

Lamentó la falta de convocatoria a otros poderes para debatir este proyecto, como la Legislatura. “Es poco y nada el intercambio que se ha dado del punto de vista político con los legisladores. Nosotros habíamos planteado foros consultivos para generar espacios de intercambio de pensamientos y ver las mejores alternativas de desarrollo, pero hasta ahora no recibimos ninguna invitación. En el partido hemos generado comisiones y vamos a interactuar con la convención de la UCR, para generar un solo ámbito de discusión”, dijo.

Pérdida de votantes

A partir de la elección de convencionales, con la integración de dos actores del sector privado por Juntos por el Cambio sin trayectoria política previa, marcó cambios en el partido. “Hay figuras emergentes y le adjudico el tercer lugar de Juntos por el Cambio a que tanto Ramiro Requejado como Myriam Canga no vienen de la política. Si se hubiese presentado Tito Stefani, Federico Sciurano o Liliana Martínez Allende, quizás el resultado hubiese sido otro. Yo valoro el gesto de ellos de involucrarse en la política y su posicionamiento es válido. Estas figuras emergentes se están dando en todos los partidos. Como sociedad estamos entendiendo que hay que involucrarse en este tiempo. Hay que participar y eso se está viendo de manera transversal”, afirmó.

Deslizó críticas a la falta de participación de los líderes del partido. “Dentro del espacio hay una tendencia a jugar algunas posiciones más seguras que otras y esto va a contrapelo con la situación que vivimos a nivel nacional, donde no se llevan adelante las reformas estructurales que necesita el país y esto tiene una consecuencia económica. Apelamos a la construcción de un espacio distinto pero el conservadurismo lleva muchas veces a no jugar, a las medias tintas y a quedarse en la mitad del río, y nos lleva la corriente”, expuso.

“Nosotros perdimos un caudal de votos importante en la elección de Ushuaia y gran parte de esos votos se disiparon en otras fuerzas que pensamos que no eran tan significativas. Crecieron espacios como Republicanos Unidos y la estatuyente municipal marca el escenario político. No es menor que una vicegobernadora haya quedado en el lugar que quedó y fue un golpe muy bajo para el gobierno”, subrayó.

Se le preguntó si hay mezquindades dentro de la UCR, porque los que encabezan son de Ushuaia, también los electos, y tiene muchos menos afiliados que Río Grande. “No sé si hay mezquindades, si yo midiera más que Federico Sciurano para ir a una elección, la lógica sería que encabezara ese proceso. Para decir si hay un esquema de mezquindades dentro del radicalismo tenemos que saber cuál va a ser el próximo armado y la oferta electoral, cómo se va a dar la interna este año. Supongo que a fines de agosto el partido y el espacio de Juntos por el Cambio tenemos que discutir cómo se van a ordenar los liderazgos. Lo más probable es que esos cargos se diriman a través de una interna, pero quienes estamos trabajando de manera continua y queremos una provincia distinta, vamos a estar peleando en ese plano. Si hasta ahora fue gente de la ciudad de Ushuaia, seguramente el partido lo ha aprobado porque es muy orgánico. Yo voy a hacer todo lo posible para ser candidato en 2023 dentro de Juntos por el Cambio. Iremos a una interna y ahí veremos si la UCR y todos los actores del espacio tienen un esquema de mezquindad o no”, anticipó.

Respecto de si las listas se van a definir en la provincia o en Buenos Aires como ocurrió en la elección anterior, consideró que “sería un grave error no definir las listas en la provincia, porque hay no menos de 10 ó 12 figuras emergentes en Juntos por el Cambio que se encuentran trabajando de manera permanente. El trabajo local es muy grande y hay un nivel de inserción en todas las instituciones. Sería un grave error si la dirigencia del partido pretende repetir ese proceso. Yo soy defensor de la democracia y a veces reniego de algunos procesos, porque una cosa es ser orgánico en política, y otra remar en contra de la corriente. En la elección anterior el radicalismo quiso conquistar nuevamente una banca para la UCR, porque el último diputado fue Trejo, y cuando quise ser candidato faltó que llamaran a Fabiana Ríos nada más al espacio para jugar. No esperaba la bendición de nadie, pero me gustaría saber cómo se van a unir otros actores que participaron en su momento en Juntos por el Cambio, porque no los veo”, cuestionó.

“La política es un tire y afloje y hay que ceder determinadas posiciones. La falta de intercambio de ideas y consenso ha provocado que los partidos se vayan cerrando cada vez más y pierdan un nivel de representatividad importante. Lo vemos con partidos históricos, que cada vez son más chicos, y el radicalismo no es ajeno a esto. Evidentemente algo estamos haciendo mal y, si no lo asumimos, hay un problema. Sabemos que es una provincia que en su mayoría adopta al peronismo como corriente política, y yo desde el día uno entendí que tenía que hablar con referentes de otros partidos, con comerciantes, colegas, para armar un proyecto político local, que comprenda a los fueguinos”, planteó.

Escenario incierto

Gliubich hizo referencia al “escenario incierto para el 2023, porque la Argentina pende de un hilo y no hay un gran acuerdo político. Tenemos que avanzar hacia un gran pacto de todo el arco político y eso se está buscando ahora. El conflicto más importante está dentro del gobierno mismo, porque hay una vicepresidente que no se hace cargo de las peleas internas y un presidente que aparentemente vive en otro país. La oposición no termina de construir un espacio y de consolidarlo, y también tiene una fuerte puja interna”.

“En ese esquema de mezquindades, el 70% de oposición no alcanza, porque un proyecto político se construye con consenso y hay que ceder. La Argentina es un país que tiene un poder de recuperación enorme, pero no de esta manera”, manifestó.

Falta de gasoil

En este marco, hizo referencia a la falta de insumos básicos para el desarrollo. “Si no hay combustible es bastante difícil para los sectores productivos, además en este proceso inflacionario estamos en una espiral y ya el aumento es especulativo, por las dudas, porque no se sabe a qué valor se va a reponer mercadería. Hace diez días aumentaron un 12% el diesel para disminuir la demanda y es repetir recetas viejas”, opinó.

Un gran acuerdo

Para Gliubich debe haber un gran acuerdo en el país y “esto no significa que le demos la derecha a un gobierno nacional, lo que significa es que de una vez por todas tenemos que comenzar un programa de desarrollo, que tenga sustentabilidad, anclado sobre los recursos propios. Quizás estamos hablando de un proceso de desarrollo que en la provincia va a llevar mucho tiempo, por un lado por el contexto macroeconómico, y por otro lado porque tenemos que acompañar esto con un ciclo de formación, de enseñanza, para salir de este nivel de dependencia del Estado. Nunca vimos en Tierra del Fuego estos niveles de pobreza y de indigencia, y esto no es solamente producto de la pandemia. Hay que parar de echarle la culpa a la pandemia, a Macri o a cualquiera. Tierra del Fuego es una provincia rica, con recursos innumerables, y me pregunto qué obra importante o trascendental ha finalizado la provincia en estos últimos años”, señaló.

“No podemos pensar en desarrollo con chicos que tienen frío dentro del aula. Sin educación no hay un país que salga adelante. Cuando hablo de un gran acuerdo, no es sarasa. Lo que tenemos que hacer todos los actores a nivel provincial es ponernos de acuerdo en cuatro o cinco puntos e ir todos en la misma dirección. Como sociedad esto me preocupa mucho, porque cuando hay hambre, hay sangre, y si seguimos con estos niveles de pobreza, que para algunos es el 45%, para otros el 60%, lo cierto es que hay millones de argentinos que están totalmente excluidos y chicos que no tienen ningún futuro, hay adolescentes que se van, tarifas que están atrasadas, y los mismos jugadores en la timba financiera. Este es el nivel de acuerdo que necesitamos para que el país salga adelante y esto requiere de un amor por la Patria muy grande, porque hay que pagar el costo político. Ojalá todos seamos lo suficientemente inteligentes para acompañar a Silvina Batakis como nueva Ministra de Economía, porque además es un orgullo que sea fueguina. Tenemos que tener ese nivel de inteligencia para no seguir tirando piedras, porque estamos todos en el mismo barco y no hay manera de salir adelante si no llegamos a un gran acuerdo político”, enfatizó.

“Es una vergüenza lo que pasa y, si utilizáramos la misma inteligencia que para sacar los memes que uno ve en las redes, sería formidable. El otro día estuve en la zona franca de Río Gallegos y estaba llena de perfumes, de ropa importada, y después veo que no aprueban la importación de insumos para la producción, materiales, herramientas, insumos médicos que son fundamentales, o cubiertas. Es hermoso irse de vacaciones, pero no podemos en este contexto de país estar pagando pasajes para ir al exterior en 12 cuotas. En un contexto restrictivo hay que aplicar el sentido común. Nos falta una cuota de sensatez y seguimos viviendo en una gran ilusión. Así va a ser bastante complejo, y en este punto la política no puede ser mezquina”, dijo.

Expresó su esperanza de que “se tomen decisiones estructurales, porque al país le está apretando el zapato, es un país sin reservas, y la situación es delicada, porque estamos rozando los 9.400 puntos de riesgo país. Hay que tomar decisiones estructurales y el país necesita aplicar distintas medidas, que tienen que acompañar a la economía y a la educación que ha quedado aletargada. Hay un montón de gente que hay que reinsertar en materia laboral para que estén incluidos dentro de un proceso productivo, y esa gente también tiene que recibir una capacitación. Hay que estar del lado de comerciante, de las empresas, cuando tienen que empezar a recibir a esa gente, a la que hay que empezar a formar en valores, en actitudes, en cultura del trabajo. Es muy profundo el trabajo que hay que hacer en distintos niveles. No podemos plantear una Argentina que salga adelante sin el 20% de la población porque eso no funciona. Somos casi 50 millones y hay que gobernar para todos. Tenemos que centrarnos en colaborar con este nuevo proceso que hay que llevar adelante a nivel local”.

“Nosotros vamos a seguir trabajando en pos de sumar en este contexto. Lo que falta es un gran gesto patriótico y tenemos que trabajar para sacar el país adelante, y generar trabajo hoy más que nunca para la familia”, concluyó.