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El primer docente de la UTN fueguina, ingeniero Eduardo González, confió emocionado que “absolutamente me siento realizado por haber sido parte de la Tecnológica, siempre la consideré mi verdadera casa” y a modo de homenaje a los 40 años de la creación de la alta casa de estudios, “brindo mi saludo a toda la comunidad educativa de la FUNDATEC en este nuevo aniversario, cuarenta años nada menos, y a Radio Universidad que se ha sumado desde hace diez años a este proyecto difundiendo la cultura y el conocimiento”. González tuvo la particularidad de haber sido docente de sus tres hijas, una de la cuales se recibió de Ingeniera Química, la misma carrera que él.

Río Grande.- El ingeniero Eduardo González, primer docente de la UTN fueguina, desgranó parte de sus recuerdos a 40 años de la fundación de la hoy Facultad Regional Tierra del Fuego y cómo vino a vivir a la Isla.

“Inicié mis estudios universitarios en la Universidad Nacional de Tucumán, en San Miguel de Tucumán, en la Facultad de Ingeniería, de donde me recibí de Ingeniero Químico a los 23 años, realmente lo hice en un tiempo realmente bueno; a la par que estudiaba hice mi experiencia laboral en la industria azucarera y con el desarrollo como auxiliar docente en las cátedras de Química y Operaciones Unitarias mientras cursaba la carrera, dentro de la Facultad”, dijo el docente, ahora jubilado.

Confió que “elegí esa carrera porque ya en el secundario supe que era mi vocación y sentí la necesidad de estar en el laboratorio, de ver procesos industriales. Fue la decisión del momento de mi vida y pude llevarla adelante”.

Su llegada a Tierra del Fuego

“En 1979 me invita YPF y salgo seleccionado para realizar un curso en la Facultad de Ingeniería; ese curso duraba un año y tenía la especialidad en Petróleo con asignaturas que debíamos cumplir, rendir las materias y aprobarlas y se me expidió justamente el título de Ingeniero en Petróleo en diciembre de ese mismo año. Ese fue un paso previo, mientras tanto me había recibido de Ingeniero Químico en abril, también de ese mismo año de 1979”, contó.

El ingeniero Eduardo González recordó que “estando en la empresa (YPF) se nos dio la posibilidad de elegir destinos que tenían a la actividad petrolera como importante. En mi caso particular estaba soltero en diciembre de 1979 cuando me recibí y tomé la decisión de elegir a Río Grande, Tierra del Fuego; hice saber a la empresa YPF y previo al viaje, me casé en enero de 1980, llegando a Río Grande el 17 de enero de ese año”.

El ingeniero Eduardo González también tuvo un recuerdo muy especial hacia Gustavo Tielens y Claudio Sphar “quienes fueron mis alumnos y muy buenos; además, hay todo un vínculo mío con la historia universitaria acá con ambos y también con el colegio”.

“Llegué con mi esposa y tuvimos tres hijas fueguinas, nacidas en 1980, 1982 y 1983; es decir, todas seguidas y todas nacieron en el Hospital Regional Río Grande”.

Su hija mayor, María de los Ángeles, siguió la carrera de Ingeniería Química “y se recibió en esta casa de estudios, en la UTN y fui docente de ella, pero por supuesto, exceptuado en todos los finales, ella tenía que rendir con otros docentes”, dijo.

Primer docente de la UTN fueguina

Eduardo González fue consultado sobre su ingreso a la UTN fueguina. “Desde 1980 a 1983 desarrollo mis actividades en la empresa YPF en los yacimientos del Área Norte y del Área Sur, así se llamaban, que serían el Área A y el Área B donde justamente estaban los yacimientos de petróleo más importantes. En ese tiempo también desarrollamos unos proyectos de investigación de los cuales uno de ellos fue presentado en el Primer Congreso Nacional de Hidrocarburos que se realiza en nuestro país, en diciembre de 1982”.

Agregó que a fines de ese año “recibo la invitación del ingeniero Galaor Urcelay, todo un referente para mi en el ámbito de la educación y de la universidad para sumarme a esa idea que había nacido para generar profesionales propios, ya que ese desarrollo de enseñanza terciaria no tenía todavía su base acá en Río Grande particularmente ni en Tierra del Fuego en general”.

Continuó diciendo que “fui invitado y di la cátedra de Química en marzo de 1983 como primera clase y recuerdo esa situación y por supuesto, me emociona -confesó- y recordar toda esa etapa me moviliza internamente. Teníamos pocos recursos porque recién iniciábamos y la Química necesitaba de laboratorios; pero con ayuda de empresas del medio, con la misma YPF, conseguíamos materiales de vidrio y algunos reactivos y hasta se podían hacer algunos trabajos prácticos, sencillos hasta dentro del aula; eran ensayos simples y nada peligrosos. Eso hacíamos hasta tanto se desarrollaran los laboratorios y pudiéramos comenzar a usarlos”.

Observó que “la Química era una de las primeras carreras que tuvimos y 13 meses después que yo estaba ejerciendo la docencia, me llega la resolución de nombramiento en mayo de 1984, como Jefe de Trabajos Prácticos a cargo del Curso Interino, reconociéndome la antigüedad de un año y un mes que es la que tenía desde que había iniciado mi actividad académica”.

Reiteró que toda esa etapa académica “fue emocionante porque uno tenía muchas y grandes expectativas porque la actividad docente me llenó de satisfacción y de hecho ya la traía desde Tucumán también y sumada a la actividad petrolera, la actividad docente en forma simultanea y fue una gran alegría, recuerdo a mis alumnos con mucho reconocimiento”.

La UTN se va perfeccionando

Contó que “se formaron equipos con otros docentes para las carreras que eran Auxiliares en Ingeniería Electrónica y Auxiliares de Administración Industrial; había una cantidad importante de mujeres también entre los alumnos y todo esto fue perfeccionándose para formar profesionales en otras carreras de grado con licenciaturas en 4 ó 5 años de cursada y luego todo esto evoluciona hacia una Ingeniería Electrónica, una Licenciatura en Organización Industrial hasta que en 1990 trabajamos en la conformación de una nueva carrera que era la Ingeniería Química”.

El ingeniero Eduardo González confió que “nos ha costado mucho establecer esta carrera, se ha trabajado mucho porque es una carrera realmente dura, pero tuvimos muchos alumnos cursándola. Costó mucho armar una estructura inicial pero una vez que se comenzó a aceitar esto, comenzó a dar frutos”.

Recordó que Ingeniería Química “tuvo dos partes, una parte donde la carrera se discontinúa y luego se vuelve a reabrir con la presentación de otro proyecto. Es decir, la carrera tuvo dos etapas, en la primera se recibió Marcela Argüello (ver aparte) una excelente alumna y profesional y luego hubo esa segunda etapa que sigue hasta la actualidad”.

Previo a todo este tiempo previo a 1990 “hubo Auxiliares tanto en Electrónica como en Administración Industrial; Licenciados en Electrónica, Licenciados en Organización Industrial, Técnicos Universitarios en Electrónica que se fueron formando en ese tiempo y que llegaron a culminar sus carreras y es así que tenemos licenciados como América González, como Petroli, como Guerrero, como Lida Rojas e ingenieros como Samo y Monza que desarrollaron sus estudios en todo ese tiempo que va desde 1983 hasta 1996 cuando se inicia este proceso de Regionalización (Facultad Regional Río Grande)”, recordó.

También tuvo un recuerdo muy especial hacia Gustavo Tielens y Claudio Sphar “quienes fueron mis alumnos y muy buenos; además, hay todo un vínculo mío con la historia universitaria acá con ambos y también con el colegio. También tengo un recuerdo muy especial con los ingenieros Galaor Urcelay, Abraham José, Francisco Álvarez, todos ellos junto a otros, fueron un poco antes o un poco después, el núcleo que defendió a esta institución académica desde su origen”, elogió.

Además de haber sido docente en la UTN durante 35 años, el ingeniero Eduardo González lo fue también del CIERG (Colegio Integral de Educación Río Grande) dependiente de la FUNDATEC durante 20 años que “también me dio enorme satisfacciones y alegría y la nota es que además de ser profesor de mi hija en la Universidad, lo fui también de mis otras dos hijas en el secundario que se han recibido en el CIERG, es decir, en la institución de la FUNDATEC. Mis tres hijas son parte de este hermoso proyecto”.

El ingeniero González tiene 6 nietos y ya está jubilado. “Por problemas muy complejos y difíciles tuve que tomar una decisión y me jubilé. Mi última actividad y participación en la Universidad fue en la Asamblea del 2018 en la cual nuevamente se lo reelige al ingeniero Mario Ferreyra y al ingeniero Francisco Álvarez como Decano y Vicedecano y ahora nuevamente tenemos la noticia de la reelección de ambos que asumen el 14 de septiembre”.