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Como conocedor de la zona, Adolfo Imbert mencionó los inconvenientes en Península Mitre pero a la vez aseguró que Elio Torres, desaparecido hace 20 días, es un deportista preparado que ya ha recorrido el territorio. “No es una persona improvisada y tiene una condición física muy buena para esto”, sostuvo, confiando en que habrá un final feliz tras la intensa búsqueda.

Río Grande.- Adolfo Imbert, conocedor de Península Mitre, fue consultado por Radio Universidad 93.5 y Diario Provincia 23 sobre la desaparición de Elio Torres y la convocatoria nacional e internacional de voluntarios para sumarse a la búsqueda y rescate de realizada por sus familiares.

“Estamos atentos y preocupados por la situación de Elio Torres, sabemos que hay una intensa búsqueda en el terreno y estamos esperando cómo evoluciona esto. Ya se ha informado bastante con respecto a esta expedición que emprendió Elio Torres empezando por la estancia María Luisa, recorriendo la costa norte, y la última comunicación fue en la zona de Policarpo y Bahía Thetis. Hubo una comunicación normal y después se perdió por un problema del servicio de la compañía que presta satelitalmente un sistema de mensajes”, dijo.

“Elio Torres es un deportista muy preparado, no es la primera vez que recorre la Península Mitre, además ha escalado el Aconcagua, ha hecho varias actividades deportivas en la montaña. No es una persona improvisada y tiene una condición física muy buena para esto”, aseguró.

No minimizó la preocupación de la familia, porque no hay contacto a través del comunicador satelital. “La familia con justa razón comenzó a preocuparse y se ha desplegado un comité de búsqueda para localizar a Elio en la región de Península Mitre. El terreno en esta época es dificultoso, más con las nevadas. Las condiciones ahora no están ayudando, pero hay gente capacitada en el lugar y muchos baqueanos que han hecho esta región caminando en innumerables oportunidades. Es la manera de buscarlo, por los lugares que se supone que él podría haber transitado, pero no es fácil en esta época del año”, sostuvo.

Respecto del terreno diverso de la península, dijo que “la costa norte es la más accesible porque la amplitud de mareas es mucho más importante. Ya está descartada esa costa porque fue relevada esa recorrida. A partir de ahí, de bahía Thetis en adelante, la geografía cambia y hay un bosque bastante tupido, hay turbales, y en esta época el terreno está bastante congelado. La costa en sí misma no tiene tanta amplitud de mareas, uno puede caminar por la costa y muchas veces se utiliza la parte alta, porque reúne mejores condiciones. Así y todo es una zona de aspecto selvático, muy tupida y cerrada, con bastante dificultad para desplazarse. Son cortas distancias pero uno demora mucho porque el bosque es muy cerrado, muy achaparrado, y caminar en ese tipo de bosque con mochila se hace bastante dificultoso”, concedió.

“En esta altura del año, las nevadas, los vientos, la escarcha, agregan la dificultad propia de esta época. Por supuesto Elio estaba preparado para este tipo de dificultades. Es una superficie inmensa de más de 300 mil hectáreas terrestres en toda la Península, pero se centra la búsqueda en las regiones donde la gente habitualmente camina, y que utiliza para unir la costa norte con la sur. Hay algunas variables y hay mucho personal interviniendo en esta búsqueda. En estos días se suma la meteorología que no ayuda en absoluto a que se desplace la gente, pero hay gente en el lugar trabajando y buscando”, manifestó.

Consultado sobre la fauna de la zona, no hay animales que representen un peligro. “Hay loberías en las costas, sobre las rocas, mucha cantidad de aves y baguales, que es hacienda bovina asilvestrada en toda la región. Son pequeños grupos de animales que andan tratando de buscar su alimento en distintos lugares donde pueda haber pasto, porque ya es una región muy cerrada de bosque y con muchos turbales. Tampoco es un lugar tan propicio para estos animales, a diferencia de la costa norte”, indicó.

Se le preguntó si el deportista podría haber caído en un turbal, pero no lo cree posible. “Se puede caminar encima de la turba y la gente conocedora sabe cómo hacerlo. Generalmente hay pequeñas lagunas en verano pero a esta altura del año se hace mucho más fácil transitar por el turbal porque esas pequeñas lagunas están congeladas. Lo que se suma es la acumulación de nieve como dificultad, o si uno está caminando en zona de roca, que también se hace por los filos de los montes, ya hablando de la costa sur. Ahora están trabajando en ese sector y se supone que habría estado transitándolo Elio al momento de perder comunicación con su familia. Es un terreno muy variado, con mucho bosque cerrado. Si pasa un helicóptero por encima no se puede divisar lo que hay, entonces están tratando de cubrir la mayor superficie posible de los senderos que utilizan los que caminan por Península Mitre, pero no es un trabajo fácil”, dijo.

Estimó que “más o menos 20 ó 25 días es el promedio que la mayoría utiliza para hacer la vuelta a la Península Mitre” y, en caso de quedarse sin alimentos, una persona entrenada puede conseguirlo. “No es tan simple atrapar un ternero o una vaca en ese territorio si uno no tiene los elementos, pero posiblemente pueda ser más fácil recolectar algo de la costa, de la playa, como mejillones o lapas. Para la pesca habría que tener los elementos para poder pescar y se puede sacar algo en la desembocadura de los pequeños ríos. No es fácil pero una persona preparada como en el caso de Elio, lo puede hacer”, remarcó.

“El mar provee de mucho alimento y cuando baja la marea quedan lagunas formadas entre las piedras y ahí puede quedar algún pez atrapado, así que se puede conseguir alimento en la costa. También está la posibilidad de llegar a algunos de los refugios que hay. En la costa norte están los puestos de la estancia Policarpo, que la familia Bilbao ha puesto a disposición para la búsqueda. Estos centros tienen estufas, se deja leña y comida. Es decir que toda la costa norte está cubierta. En Bahía Thetis el puesto está muy acondicionado, hay agua, leña, estufa, y a partir de ahí empieza una travesía más larga con dirección a la Bahía Buen Suceso, donde tenía un puesto la Armada Argentina. En esta oportunidad está cerrado, sin personal”, dijo.

Aclaró que en la zona “no hay una senda marcada, cada uno que conoce lo hace con su conocimiento o con un gps o dispositivos satelitales. Es en base al conocimiento de cada uno o al track que tengan determinado, que puede ir variando. Pueden ir por la costa o más por el interior, sobre todo cuando empiezan a dirigirse hacia la costa sur. Ahí la vegetación es muy importante y es muy trabajoso buscar a alguien en ese territorio. Creo que se está haciendo de manera muy profesional, con gente que tiene mucho conocimiento del lugar, y estamos esperando algún resultado positivo en estos días”, confió.

En cuanto a la posibilidad de iniciar una búsqueda con perros, dijo que “hay perros que están adiestrados para buscar personas y la familia estaba contactándose para poder utilizar al menos un perro que está en Ushuaia y pertenece a una familia de un cuartel de bomberos. Toda la población está muy atenta y dispuesta a colaborar. Lo importante de todo esto es hacerlo de manera organizada. Creo que por orden judicial se ha creado el comité de búsqueda, con la policía, la armada, defensa civil de las ciudades y baqueanos que están a disposición. Es importante hacerlo de manera coordinada para que tenga un resultado más positivo”, consideró.

Afirmó que “Elio iba muy equipado y tenía alimento suficiente para los días que había planificado su travesía. Uno puede encontrar dónde alimentarse si se excede en los días que planificó. Si él no puede continuar su caminata y está en un lugar con algún tipo de lesión, es importante encontrarlo para asistirlo. Es entendible la urgencia y la desesperación de la familia, que cuenta cada hora y cada día. Si ha tenido algún accidente o alguna dificultad para continuar caminando, va a necesitar de asistencia”.

Como recomendación, dijo que “lo ideal siempre es ir acompañado, al menos es mi forma de hacerlo, pero hay gente muy capacitada. Nunca se descarta un accidente, que no tiene nada que ver con la negligencia. La comunicación es fundamental y en este caso se perdió por un problema del servicio con la empresa. Según lo que ha declarado un amigo de Elio, esto se había resuelto y no se detectó que se hubiera activado el botón de S.O.S. que tiene este tipo de equipo para pedir ayuda. Puede ser que con los días se haya descargado ese equipo y por esa razón no hay comunicación. Son todas hipótesis y lamentablemente, estando fuera del terreno, desespera por supuesto a la familia, a los amigos, pero todos los recursos que tiene la provincia están en funcionamiento para tratar de localizar a Torres. Seguimos atentos y ojalá termine en un final feliz”, concluyó.