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El gerente de operaciones de la empresa chilena que realiza el cruce del Estrecho de Magallanes, Alejandro Almonacid, adelantó medidas para el próximo mes, de no tener respuesta ante el reclamo de pago de la deuda acumulada. No recibirían más pesos argentinos y se procedería al corte de las cuentas corrientes. Actualmente se encuentra en Buenos Aires intentando una solución, dado que la deuda vencida asciende al millón trescientos mil dólares. Los clientes han intentado cancelar, pero el problema es que no se liberan los dólares desde Argentina. Además señaló que “para los argentinos la barcaza subió en un día de $14 mil a $19 mil pesos argentinos”.

Río Grande.-  El gerente de operaciones de TABSA, Alejandro Almonacid, dialogó con Radio Universidad 93.5 y Provincia 23 sobre el conflicto generado por la falta de liberación de dólares de parte del gobierno argentino, que los llevaría a tomar medidas, como el cierre de las cuentas corrientes de los clientes y la decisión de no recibir más pesos argentinos.

Almonacid se encuentra en Buenos Aires donde ha mantenido reuniones “con clientes de la empresa y con autoridades argentinas y chilenas”, dijo a este medio. Hace unos meses se había anunciado la decisión de no aceptar pagos en pesos argentinos, pero luego se revirtió con la intervención de Cancillería. “Nuevamente estamos con inconvenientes para el pago de nuestros clientes argentinos que tienen cuenta corriente. Ellos nos han pedido cancelar las últimas semanas de agosto, lo que ha generado que crezca la deuda y que tengamos que empezar nuevamente a evaluar medidas. En una primera etapa sería el bloqueo de algunas cuentas corrientes, el cierre de líneas de crédito, y a la vez esto va a ir llevando a medidas como las que evitamos hace un par de meses atrás, como la no recepción de pesos argentinos”, dijo. 

“La deuda vencida actualmente asciende al millón trescientos mil dólares y corresponden a 70 ó 90 días, porque nosotros vamos cerrando en forma mensual. Estamos al tanto de la situación económica en Argentina y es importante aclarar que nosotros no hemos cambiado nuestra tarifa en dólares ni en pesos chilenos. El cambio es por la devaluación del peso argentino”, sostuvo. 

Lo cierto es que un cruce en vehículo rondaba los 8 mil pesos hace pocos días y ahora casi llega a los 19 mil pesos argentinos. “Por el momento nosotros seguimos recibiendo pesos argentinos, porque sabemos que tenemos un servicio que es muy importante para nuestros usuarios. Estamos haciendo las gestiones para mantener esas condiciones pero, si no se liberan los pagos vamos a tener que restringir la recepción”, lamentó. 

En este caso, los argentinos deberían comprar pesos chilenos para pagar la barcaza, o hacerlo en dólares. “Todos los clientes pueden pagar con tarjeta de crédito o tarjeta de débito en la misma barcaza”, apuntó Almonacid sobre un medio de pago que sigue siendo válido. 

El impacto se sentirá en los precios del lado argentino, porque un camión ahora debe pagar 146 mil pesos para el cruce con la última devaluación, y un colectivo ronda los 98 mil pesos.

Se le preguntó si se comunicaron autoridades de la provincia o los municipios con la empresa. “Nosotros nos hemos comunicado principalmente con los gremios de transporte, con el presidente y con el cónsul chileno en Río Grande. Estamos siempre disponibles a atender a todos quienes quieran cooperar en la resolución de este inconveniente pero hasta el momento no hemos recibido llamados de autoridades de la provincia”, indicó.

“Nosotros nos hemos mantenido con los ingresos de otros clientes, que son clientes chilenos, y veremos los avances de las gestiones realizadas esta semana, porque la próxima semana ya deberíamos tener alguna resolución y definir una estrategia de cómo seguir adelante”, señaló.

De parte de los clientes argentinos, la explicación es que “ellos solicitan las transferencias pero en algún sector del Estado eso queda retenido”.

Septiembre sería el mes en que cambiarían las condiciones de no solucionarse la deuda. “Es una posibilidad en septiembre dejar de recibir pesos argentinos. Entendemos la situación, y somos parte de la Patagonia, pero debemos responder a nuestros accionistas y buscar una forma de cobrar la deuda atrasada”, concluyó.