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El gremio que nuclea a los trabajadores de seguridad de los locales bailables, mal llamados “patovicas”, denunció la “protección política” de que gozaría un boliche de Río Grande que está a cargo de un funcionario del Gobierno provincial. Se trata de Sebastián Ortiz, coordinador de Cultura, de acuerdo a los dichos del gremialista. El sindicato reclama el blanqueo de 40 trabajadores, dado que no sólo no está registrado el personal de seguridad sino ninguno de los empleados. Se trata del boliche ‘Maldito Ibiza’.

Río Grande.- Raúl Bombares, secretario general de SUTCAPRA -Sindicato Único de Trabajadores de Control de Admisión y Permanencia de la República Argentina-, expuso por Radio Universidad 93.5 y Diario Provincia 23 la situación de los trabajadores en general, y en particular la falta de registro de la totalidad de los empleados en el local bailable de un funcionario de la provincia.

En principio dijo que “los viernes y sábados son los días que más se trabaja, sobre todo en boliches y confiterías. En Río Grande aproximadamente hay cien trabajadores, diez en Tolhuin y cincuenta en Ushuaia, que tiene solamente dos boliches. Tolhuin tiene uno y Río Grande, cuatro o cinco”, detalló.

“Nosotros venimos trabajando hace un año y medio en la rama del control, admisión y permanencia. Somos nuevos en nuestra rama, los mal llamados ‘patovicas’ por la comunidad. Desde que me hice cargo del sindicato hemos charlado con los empresarios y hemos hecho notas al Ministerio de Trabajo porque algunos no quieren formalizar a sus trabajadores”, dijo.

Mencionó un local específico que “tiene a todo su personal en negro, no solamente los controladores. Se encuentra ubicado en 25 de Mayo y San Martín, y abre seis veces por semana. En ese lugar el 100% está flojo de papeles, los controladores y el personal que cumple funciones en el guardarropas, en la barra, los mozos, los cocineros, todos están sin registro. El salario de bolsillo, estando precarizados, es de alrededor de 8 mil pesos por noche. Hay trabajadores que están muchas horas los viernes y sábado. Nosotros hemos hecho las denuncias en el Ministerio de Trabajo porque no está tributando ese lugar y aparte hay una deslealtad empresarial que está cometiendo el señor Sebastián Ortiz, que es uno de los dueños. Hay otros boliches que tienen a sus trabajadores formalizados y en regla, hacen los aportes y tributan”, comparó.

Aseguró que “Sebastián Ortiz nos ha dicho que está protegido por el Ministerio de Trabajo, ya que es funcionario del gobierno de Gustavo Melella, porque es Coordinador del área de Cultura del gobierno de la provincia y está trabajando en Los Yaganes. Nos ha dicho que hagamos lo que queramos porque tienen afinidad con el Ministerio. Nosotros no creíamos eso, pero día a día que va pasando nos estamos convenciendo de que es así, porque el Ministerio no actúa con la misma vara con todos los empresarios. Esta persona que es funcionario del gobierno no respeta nada y hace lo que quiere”.

Aclaró que “en los papeles el responsable directo es Sebastián Ortiz, pero sus dichos son otros. En comercio figura tomo titular con otros dos empresarios, pero yo hablo por los dichos de estas personas. Igualmente Ortiz es funcionario de Gobierno y tiene un cargo importante. Entendemos que la afinidad con el Ministerio de Trabajo es a consecuencia de esto”, barajó Bombares.

“Los pagos los hacen en mano al finalizar la jornada. Cuando trabajamos en un boliche, Comercio es el que inspecciona y tenemos libros de actas de todos los boliches donde están nuestros compañeros. Le hemos marcado esto al Ministerio de Trabajo, incluso hay dos demandas de trabajadores que tiene Sebastián Ortiz. Todo está asentado en el libro de actas”, sostuvo.

Requisitos de trabajo

Para poder desempeñarse en el cargo, los trabajadores deben cumplir varios requisitos. “Primero hay que estar habilitado por el área de Comercio del Municipio. Los requisitos son no tener antecedentes penales, tener un certificado de análisis psicológico que diga que la persona está apta para cumplir la función, certificado médico y la nota de alta del boliche adonde va a trabajar. Esos son los requisitos fundamentales para que uno tenga la libreta sanitaria y el carnet de control, admisión y permanencia”, indicó.

“Nosotros denunciamos al Ministerio de Trabajo, porque debe controlar el trabajo precarizado. Dicen que han encontrado muchos trabajadores en negro pero yo no veo eso, por eso lo estoy denunciando públicamente. Esto lo vengo denunciando públicamente hace bastante y también lo hice por nota, como corresponde. Sin embargo no tengo la respuesta que debería dar el Ministerio de Trabajo. Hubo una constatación del Ministerio de la situación de los trabajadores pero parece que terminó en un tacho de basura”, cuestionó.

“Los trabajadores no tienen ningún seguro, porque ninguna aseguradora va a dar cobertura a un trabajador en negro. Nosotros hemos hablando con la aseguradora y nadie va a cubrir a un trabajador no registrado, que además desempeña un trabajo de alto riesgo. La única solución es formalizar a los trabajadores. Nosotros tenemos un convenio colectivo de trabajo y no es imposible sostener a un trabajador”, afirmó.

En cuanto a las otras dos ciudades, dijo que “en Tolhuin hay un boliche que trabaja dos veces por mes, por la poca cantidad de vecinos que tiene. Venimos hablando con el dueño, que ha tomado el compromiso de formalizar a sus trabajadores. El problema que tiene es que hay varios trabajadores que son asistidos por el gobierno de la provincia y por el gobierno nacional con planes sociales, becas, módulos alimentarios, y pierden esos beneficios si se blanquean”.

“En Ushuaia hay dos boliches importantes, venimos trabajando con los dos empresarios y no tendrían inconvenientes para regularizar a los trabajadores, que también están asistidos con planes sociales”, apuntó.

Trabajo insalubre

También dio cuenta de las situaciones de violencia que tienen que enfrentar a diario. “Nosotros tenemos inconvenientes todas las noches. No estamos para golpear sino para prevenir. El trabajador de control, admisión y permanencia no puede golpear y estamos a la buena de dios como trabajadores. Ha pasado que tuvimos un hundimiento de tabique a un trabajador, porque hubo un evento en el club O’Higgins y tuvimos cinco trabajadores lastimados. El trabajador está a la buena de dios y queda a voluntad del empresario ver si se le ocurre comprar una aspirina para un trabajador nuestro. La persona que va al boliche por lo menos está asegurada con la entrada que paga, pero nosotros no. Solamente estamos protegidos por dios”, dijo.

Reunión con la Policía

A consecuencia de toda esta problemática, hubo una reunión con la policía de la provincia, porque “tenemos la necesidad de que el personal policial nos acompañe, ya que no tenemos el acompañamiento de algunos empresarios. Entendemos que en cualquier momento nos va a pasar una desgracia. Pedimos presencia constante por lo menos cuatro o cinco horas en los boliches donde hay más concurrencia. Los horarios pico son de 3 a 7 de la mañana. Hemos notado que en las veredas, cuando termina el boliche, los esperan a los trabajadores para pegarles, rompen los autos, las vidrieras de los vecinos, pelean con los taxistas. Nosotros tenemos la facultad de resolver los problemas dentro del boliche, ya no en la vereda, que es competencia de la policía” explicó.

“Nosotros consideramos que es importante que el empresario pague el adicional a la policía, como lo está haciendo La Morena, que era uno de los boliches más complejos y se ha resuelto el problema. Antes había autos rotos, vidrios rotos de los vecinos, compañeros golpeados, y hoy no existe más eso, por la presencia de la policía en los horarios clave”, expresó.

“En cualquier evento donde alquilen un club se solicita la presencia de la policía si hay concurrencia de más de cien personas, así que por qué no vamos a tener presencia policial en un boliche al que van 800 ó 1.000 personas en una noche. No es suficiente con el trabajo de control. Además se sobrepasa la capacidad del boliche. Particularmente el de 25 de Mayo y San Martín tiene una capacidad de 600 personas y entran mil por noche, y hay una parte del segundo piso que no está habilitada por Bomberos ni por Comercio. Se hacen fiestas en ese VIP y los trabajadores son amenazados con ser despedidos si dicen algo. Ahí entra el que tiene poder adquisitivo para pagar ese VIP. Ahí vale todo el doble y no sería malo, lo malo es que no esté habilitado ese lugar. Es un riesgo tremendo, porque ese lugar tuvo un incendio hace un par de meses. Hasta que llegaron los bomberos, el problema lo resolvieron los trabajadores. Ese lugar es tierra de nadie y estamos por hacer una acción gremial, ya que el Ministerio de Trabajo no hace nada. En cualquier momento vamos a tener una desgracia con los trabajadores, con el público, y el Ministerio de Trabajo no funciona para lo que está. Hoy tenemos 40 trabajadores en negro de este boliche y me pregunto para qué está el Ministerio. La afinidad política es la única explicación, porque hacen lo que quieren. Tenemos los libros de entrada de todos los días para demostrar lo que decimos, y es grave que un funcionario de la provincia se escude en el cargo que le dio Melella y haga lo que quiera. No estamos pidiendo una locura, sino que se formalice a los trabajadores. Nosotros hemos ido a la AFIP, entregamos una nota donde denuncio esto, porque no están tributando tampoco”, concluyó.