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El contador Ramón Gallardo cuestionó las medidas anunciadas por el ministro Sergio Massa, por inconsultas y nocivas en la relación empleador-empleado. Planteó que no se puede generalizar el pago de una suma fija cuando existen paritarias, que atienden la realidad de cada sector en particular. También observó el aumento del gasto público con el incremento fijado a los estatales, y el dilema que genera en provincias y municipios que lo tendrán que pagar. “Estos parches son inconsultos y parece un chiste que los anuncien un día domingo, tipo Tiktok”, expresó.

Río Grande.- El contador Ramón Gallardo analizó las medidas anunciadas por el ministro de Economía Sergio Massa durante el fin de semana, por las redes sociales. Por Radio Universidad 93.5 y Provincia 23 dijo que “esto es consecuencia de la devaluación que hicieron del 22%, anteriormente había sido del 7,5%, y obviamente se volcó todo a precios. Esa devaluación que hicieron quedó neutralizada por el aumento de precios que va a venir en octubre, con lo cual a mediados de noviembre vamos a tener un atraso que algunos estiman que será superior al 30%, y se habla de hasta el 45% que se va a tener que devaluar el peso, por el atraso que provoca”, adelantó.

Consideró que tras la devaluación “tenían la obligación de salir a sacar algo. El aumento para trabajadores de 60 mil pesos, pagaderos en dos cuotas, lo separo en dos partes. En el sector privado no estamos de acuerdo porque existen las paritarias, que son libres y se juntan las cámaras empresariales con los sindicatos para acordar las remuneraciones. El hecho de que meta las uñas el Estado no tiene por qué, porque para eso están las paritarias. No tendría por qué intervenir el Estado, distorsionando la realidad de cada sector. La realidad es que no conoce a los distintos sectores, porque una cosa son los madereros, otra los metalúrgicos, y por eso existen las paritarias. Muchos acuerdos ya están pactados. Independientemente de que diga que es a cuenta de las paritarias, esto provoca que haya sectores que no van a poder hacer frente a esto. Hay pymes a las que realmente las ponen contra la pared, porque el empleado va a ir a reclamar, y esto enfrenta al empleado con el empleador”, criticó.

De hecho  CAME y otras cámaras empresarias ya salieron a repudiar estas medidas. “Estamos de acuerdo con que el Estado maneje a los empleados del Estado, pero no en el privado, porque para eso están las paritarias”, reiteró Gallardo.

“Con respecto al sector público, también existen broncas de algunos intendentes de la provincia de Buenos Aires, porque no les avisaron que venían estos aumentos y no tienen dinero para afrontarlo. También se escuchan voces que dicen que hay municipios que tienen plazos fijos y ahorros para hacer frente, y también los pusieron en un brete. Lo mismo sucede con las jubilaciones. Siempre digo que el jubilado está muy mal pago con la mínima, porque aun con el aumento no deja de ser un sueldo de 124 mil pesos, que es ridículo y con eso nadie vive. Muchas veces se da un bono y ni siquiera se da un aumento sobre la base. Hasta un 100% de aumento serían dos pesos, porque la base está distorsionada. La realidad es que los jubilados hoy ganan migajas y con eso no vive nadie. Es una vergüenza lo que están haciendo. Este aumento a los jubilados es para los que dependen del Estado nacional, y en la provincia tenemos una caja para el sector provincial. No sabemos quién se va a hacer cargo en la caja de previsión de la provincia de este aumento, porque seguramente los jubilados van a presionar para que también se les abone”, advirtió.

“Estos parches son inconsultos y parece un chiste que los anuncien un día domingo, tipo Tiktok. Todavía no salieron las resoluciones respectivas y quieren ayudar por el problema que ellos mismos provocaron con esta devaluación. No se evitó que la devaluación vaya a los precios porque nunca se toman las medidas correspondientes, que es bajar el gasto público. Seguimos con la misma historia de darle a la maquinita y crear billetes, porque de algún lado tiene que salir la plata para pagar estos aumentos. Esto se va a reflejar en inflación y encima todos estos aumentos van hasta después de las elecciones, como si en noviembre todo fuera una belleza y se abriera el cielo. No es así, porque en noviembre vamos a estar peor que ahora. Esto no resuelve la situación, por el contrario, provoca rispideces en el sector privado, donde existen paritarias y deberían respetarlas. El Estado debería cumplir su rol con las empresas que ellos administran pero no meterse con los privados, porque no corresponde”, sentenció.

Respecto de las pymes, que tendrían una compensación en las contribuciones patronales, señaló que estas medidas “no dejan de romper algo que está funcionando bien, que son las paritarias. Hablan de una parte que tendría una reducción según lo que facturen, pero en realidad hoy no se conoce y lo que tenemos es un gran anuncio solamente”.

“No sé cómo se van a manejar con las provincias y los municipios, porque los que tienen plazos fijos tendrían que afrontar los costos de este aumento. Desconozco las finanzas de la provincia pero todo esto provoca un desajuste. Son medidas totalmente inconsultas”, insistió.

“Todas las sumas remunerativas o montos fijos, se aplican en el sector privado cuando no hay paritarias. Hay que respetar las paritarias porque hay sectores que son muy chicos y una medida así por decreto las perjudica. Ya están en una situación bastante crítica, porque la inflación no solamente afecta al empleado, sino que afecta a todos parejo. Hay cámaras que le están diciendo que no a este aumento y es muy probable que alguna se presente con un recurso de amparo, porque esto es totalmente inconstitucional. Son lamentables estos parches que salen de la nada”, manifestó.

Más gasto, menos cumplimiento

Lo cierto es que las medidas directamente aumentan el gasto del Estado, que va en contra de lo que pide el FMI: “Es totalmente contradictorio, porque dentro de las pautas del FMI está la reducción del gasto. Seguimos con reservas en rojo y el FMI ha pedido que el déficit fiscal siga con la meta del 1.9% del PBI para diciembre. Esto no se está cumpliendo porque estamos arriba del 2%. Una de las pautas es seguir bajando el gasto y esto apunta a no aumentar el gasto público con los empleados y las jubilaciones. Ojalá esto fuera al consumo en forma proporcional a lo que están dando, para reactivar la producción, pero no es así. Los precios tuvieron aumentos superiores a lo que se devaluó y uno lo ve en el supermercado. Se perdió la noción de precios y de todo, devalúan en pesos y ahora quieren devolver una parte, pero lo que sabe la gente es que cada vez le cuesta más llenar un chango cuando va al supermercado. No es que esto va a reactivar, porque también los empresarios están en una estanflación, que es inflación con estancamiento y recesión. Los comercios venden menos y con precios que son consecuencia de toda esta cadena de aumentos”, expuso.

Esperar la letra chica

Tras el anuncio mediático, el contador prefiere esperar a ver “la letra chica” cuando salgan las resoluciones. “Hay que esperar las resoluciones y ver la letra chica de estos anuncios. Seguramente están recepcionando las quejas de más de un sector, tratando de reacomodar lo que ya dijeron. Por ejemplo, en principio era un aumento para los jubilados del Estado nacional, pero hay provincias como Tierra del Fuego que tienen una caja previsional propia. Ese jubilado tiene las mismas necesidades y el haber no le alcanza, y no sabemos si les van a dar esos 30 mil pesos y quién va a poner la plata”, observó.

“La realidad es que se puede esperar cualquier cosa, y el hecho de querer llegar al ballotage provoca estas situaciones. Por lo visto no hay escrúpulos y todo pasa por captar votos. Van a seguir con ‘planes platita’ y ojalá hicieran la tarea. El gobierno no tiene fondos y ese es el problema, así que va a seguir inventando papeles. Es plata que no tiene respaldo de nada. La emisión monetaria provoca inflación y es seguir dándole a la maquinita. Eso lo terminamos pagando todos los argentinos. Hay cosas para tocar, como el déficit de las empresas del Estado o la corrupción con la obra pública, pero evidentemente eso no se ve”, lamentó.

Deuda con TABSA

En otro orden de cosas, se le consultó sobre la deuda con la transbordadora chilena, que no recibiría más pesos en septiembre. “Yo llevo la contabilidad de la Cámara de Transporte, he hablado con Darío Loreto que es el presidente en este momento, cuando se aplicó el impuesto País del 7,5%, donde estaba incluido el flete. De la noche a la mañana aumentaron el dólar y encima es retroactivo, porque la deuda que hay que pagar está en dólares. Loreto me comentó que por suerte el Banco Central había liberado dólares y la deuda de las empresas había bajado bastante. Por supuesto el costo para cruzar aumenta con el 7.5%. El principal problema que puede haber es que no reciban más pesos y uno de los grandes problemas que tenemos nosotros es que el Banco Central no tiene dólares”, concluyó.