radiouniversidad.com.ar

La Juez Federal Mariel Borruto reveló que “esto incluye, por ejemplo, reclamos por los créditos UVA, también tenemos la parte de Nación, créditos o tarjetas del Banco Nación que no se han pagado. En el caso de la AFIP, tengo nueve mil expedientes con ejecuciones, algunos con embargos, con inhibiciones. Es decir, hay un movimiento que realmente es importante”. El próximo año el Juzgado Federal de Río Grande cumplirá 30 años de labor y en ese contexto la magistrada contó el trabajo que llevan adelante con el apoyo de las fuerzas federales y las instituciones provinciales.

Río Grande.- En diálogo con ‘La mañana de la Tecno’ que se emite por Radio Universidad 93.5 MHZ, la Doctora Mariel Borruto, Juez Federal de Río Grande revela la labor del juzgado abarcando temas penales y civiles, colaborando con distintas instituciones y trabajando en equipo para impartir justicia.

La magistrada fue consultada sobre cómo funciona un juzgado federal, cómo está organizado, su organigrama y qué áreas le competen exclusivamente.

“A mí siempre me gusta participar de esto y de poder llevarle a la comunidad una idea de lo que estamos haciendo porque ha cambiado un poco la mirada de la justicia ahora tiene que estar un poco más abierta a la sociedad y es lógico que la gente quiera saber qué se trata. Nos ha pasado hace un tiempo atrás en un curso que brindé me preguntó una señora que me dijo ‘yo paso por y ahí ¿qué harán acá adentro? Eso no tiene que ocurrir, uno tiene que tener una idea de lo que nos pasa”, introdujo la Doctora Mariel Borruto.

Contó que “nosotros tenemos un juzgado federal que atiende cuestiones donde primordialmente la ley nos dice que son cuestiones federales o bien cuando el Estado nacional es parte, y el seguimiento en dos grandes ramas, la penal y la civil. Dentro del área penal, que es la que más noticias tenemos en los diarios y demás pero no quiere decir que no sea la que más expedientes tiene, porque trabajamos en lo penal con casos de trata de personas, con estupefacientes, el lavado de dinero, evasión impositiva, dentro de los parámetros más fuertes que son esos. Está dividido en un edificio, en el otro edificio se trabaja con la faz civil que tiene que ver mucho con seguridad social por ejemplo todo lo que tenga que ver con ANSES y jubilaciones calculadas de una manera u otra o mal calculadas o algún ítem que no corresponda, también los ajustes salariales que tiene que ver con todas las fuerzas”.

“Por otro lado tenemos los daños y perjuicios, los amparos de salud que no es un tema menor porque todas las obras sociales y prepagas que no sea OSEF, vienen al Juzgado Federal en los reclamos”.

Aumento de los casos de amparo

La Juez Federal reveló que “nosotros hace dos años atrás teníamos un amparo por mes, hoy tengo 14 amparos cada 15 días más o menos. Esto incluye, por ejemplo, reclamos por los créditos UVA, también tenemos la parte de Nación, créditos o tarjetas del Banco Nación que no se han pagado. En el caso de la AFIP, tengo nueve mil expedientes con ejecuciones, algunos con embargos, con inhibiciones. Es decir, hay un movimiento que realmente es importante”.

Detalló que “somos 40 personas las que trabajamos y yo estoy a cargo como juez de un gran equipo de profesionales. Tengo cinco secretarios federales que son expertos cada uno en su materia, para arrimarme un proyecto y poder tomar la decisión de la mejor manera posible. La responsabilidad es mía, pero el trabajo es un gran equipo. Todos participamos y todos vamos colaborando para que esa causa prospere en ese expediente”.

Explicó que el Juzgado Federal y la Fiscalía Federal “son dos partes totalmente distintas. La fiscalía es parte, igual que la Defensoría es parte, y el Juzgado sería como el árbitro en un partido entre River y Boca”, graficó.

Agregó que “siempre participa y como el Fiscal siempre está en la defensa, en la investigación o en la tutela de que se resguarden todos los derechos y sobre todo los del Estado nacional”.

Agregó que “en todas las causas penales interviene el Fiscal, muchas investigaciones las lleva el Fiscal, una gran mayoría sobre todo en estupefacientes y en trata de personas. Obviamente, cuando cierra la investigación viene la causa al Juzgado y nosotros evaluamos si está completa, si no está completa, y si en el caso que estuviera, ya empezamos con las indagatorias y toda la situación procesal de quienes estén involucrados”.

En ese sentido recordó que “el Fiscal en lo civil también participa, porque opina en los amparos, opina en la competencia. La fiscalía tiene un trabajo enorme dentro del tribunal y está a cargo de la Fiscalía el doctor Marcelo Rapaport junto con su secretaria, la doctora (Eugenia) Razuk, que realmente hacen un trabajo con muchísimo esfuerzo, porque tienen poco personal, porque están en un lugar donde tienen una casita muy precaria, si bien ya ellos han estado tramitando para ver si se pueden mudar, porque esa casa es patrimonio cultural y no se puede modificar. Cuando hay viento se abren las puertas”, dijo en referencia al antiguo Juzgado de Paz en la avenida San Martín.

Agradecimiento a las fuerzas federales y provinciales

La Doctora Mariel Borruto destacó y valoró a las distintas fuerzas federales y provinciales que colaboran como auxiliares de la justicia. “Las fuerzas federales con las que trabajamos, son todas. Con Gendarmería mayormente porque tiene mayor cantidad de personal y porque tienen también los laboratorios de pericias. Con la Policía de la Provincia también trabajamos muchísimo, sobre todo el tema de estupefacientes. Ellos también nos colaboran con las pericias, igual que el Superior Tribunal de Justicia que nos brinda, por ejemplo, el resultado de las autopsias y demás. Realmente son muy gentiles. La comunidad recuerda el caso del avión (caída del Learjet en el aeropuerto de Río Grande), donde tuvimos que echar mano de herramientas que la justicia federal no tenía y la provincia nos ayudó y nos colaboró con todo el personal, con el material y demás”.

Agregó que “trabajamos con Prefectura Naval, con la Policía Federal, con la Policía de Seguridad Aeroportuaria, con la Aduana y con Migraciones, dependiendo de los casos, ellos trabajan en una investigación o bien como querellantes dentro de los expedientes”.

Dentro de las instituciones provinciales valoró el trabajo de la División de Narcocriminalidad y la Delitos Complejos de la Policía de la Provincia de Tierra del Fuego. “Se trabaja a través de sus jefes, donde obviamente la mayor parte de las investigaciones las tramita con el Fiscal federal, lo que llega al tribunal es cuando ya está avanzado, pero sí, es una de las fuerzas principales con las que se trabaja. En el caso de que no tenga cupo o no pueda, siempre seguimos con el resto de las fuerzas”, dijo.

Confió que “a mí me encanta que se trabaje en equipo, que se mezclen las fuerzas, me da mayor transparencia y seguridad, me gusta, pero a veces cada uno, cada una de las fuerzas lleva en su estadística para su lugar. Pero se pueden compartir los logros y las estadísticas. Nosotros no, en eso, no queremos ningún laurel. Es de ellos el trabajo, sabemos que ellos ascienden, que ellos tienen otro camino. No, no es el caso de la Justicia Federal, nosotros estamos acá y punto, tenemos que trabajar”.

Detalló que “hay dos juzgados federales, uno en Ushuaia y otro en Río Grande que tiene jurisdicción al sur hasta el río Turbio, llega hasta San Sebastián hacia el norte, pero también incluye las Islas Malvinas y las Islas del Atlántico Sur. La nuestra es la jurisdicción más grande de la provincia. El Juzgado Federal de Ushuaia tiene todo lo que es el Mar Argentino y la Antártida. Tiene muchísimo movimiento también el juzgado de Ushuaia porque trabaja mucho con muchos temas que hay en las bases antárticas, pues hay accidentes, hay lesiones y muchas otras situaciones que se dan, hasta lo ambiental y con los cruceros. Este año yo subrogué a Ushuaia en enero y me llamó mucho la atención los fallecidos a bordo de los buques. Llegaron 500 cruceros, la mayoría con muchas personas mayores. En las autopsias me dieron todos los casos muertes naturales. Es un trámite que hay que hacerlo, hay que investigarlo. Como dato curioso, en el caso de un fallecido hay que sacarlo del camarote donde está, ver si es compartido con otra persona; se tiene que hacer la clausura; tiene todo un proceso hasta llegar a la ciudad de Ushuaia, hacer una autopsia y después terminar con una sentencia, para ver qué es lo que ocurrió”.

“Los casos nos afectan como humanos que somos”

La Juez Federal confió que hay situaciones que, más allá de la justicia, los afecta en su humanidad, uno de ellos fue la caída del avión sanitario. “Para nosotros, no solo como tribunal, sino como ciudadanos, sabemos la importancia que tienen los aviones sanitarios, porque lo vemos acá con los amparos de salud, con las derivaciones. Uno siempre confía en que todo tiene que estar en perfecto orden y que no puede pasar nada. En el caso del avión que se estrelló, tiene una investigación en curso, hay muchos peritos que están tratando de determinar cuáles fueron las causas exactas del accidente. Así que todavía nos falta determinar algunos pasos más para continuar con la causa. Pero más allá de la administración de justicia, es decir, de la función fundamental de un juez o un funcionario judicial, los casos nos tocan en lo humano. No puedo yo ni mi equipo, separarnos de eso. Así sea un crédito UVA. Siempre pensamos, ¿y la persona por qué no lo puedo pagar? Muchas veces se acercan, nos cuentan cuáles fueron los motivos, hay problemas de salud, de su economía, y escuchamos todo. Obviamente que tengo que decidir en el marco de la Constitución Nacional y las leyes de la Nación argentina. En eso no me puedo abrir, pero siempre trato de poner la mirada humana sobre todo esto, sobre cualquier caso, ya sea la del avión, como ya sea la de una ejecución en un crédito. Por todos lados, todo el equipo pone su mirada humana para tratar de resolverlo de la mejor manera posible”.