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El dirigente de la UOCRA Julio Ramírez aseveró que nunca estuvo tan mal el sector de la construcción, ni siquiera con la crisis del 2001. No hay reactivación por falta de giro de fondos y las empresas siguen esperando. El gremio pedirá un subsidio para sortear la situación, dado que tampoco reciben el aporte de los meses de invierno. El dirigente expuso que la Nación “miente” y además denunció una operatoria similar a la que tuvo el kirchnerismo con Lázaro Báez, esta vez con Calcaterra.

La temporada de veda terminó hace tiempo y “estamos como cuando empezó el gobierno nacional, como sabemos todos: echando gente, sin trabajo, hasta ahora sin ninguna obra de las que prometieron que se haya puesto en actividad. Dicen que en cualquier momento empiezan y así estamos, de mal en peor, como estábamos desde diciembre”, dijo Ramírez.

Río Grande.- El dirigente de la UOCRA Río Grande, Julio Ramírez, aseguró a Radio Universidad 93.5 que no hubo avances en la reactivación de la obra pública, y pedirán un subsidio para sortear la crisis del sector.
La temporada de veda terminó hace tiempo y “estamos como cuando empezó el gobierno nacional, como sabemos todos: echando gente, sin trabajo, hasta ahora sin ninguna obra de las que prometieron que se haya puesto en actividad. Dicen que en cualquier momento empiezan y así estamos, de mal en peor, como estábamos desde diciembre”.
“Estamos esperando que se puedan reactivar algunos trabajos privados y alguna obra que tiene que pagarle Nación a una empresa, donde tenemos 120 compañeros para trabajar. Es el gasoducto que quedó parado en Río Grande” precisó.
Dijo que “le prometieron a la empresa que la plata estaba y le iban a pagar pero no pagaron nada. Les dieron la mitad y la empresa decidió parar hasta que le paguen”.
La deuda era de 66 millones y llegaron solamente 32 millones, que no alcanzan para reactivar los trabajos. Según el Ministro de Obras Públicas, habrían existido inconvenientes porque desde la provincia mandaron un pendrive en blanco y esto retrasó los pagos, pero no lo pudo corroborar Ramírez. “Yo no sé lo que pasó. Yo hablo con la empresa CONINSA como habla el ministro, que es una UTE. Hace diez días atrás el empresario me dijo que no tenían ningún pago. Si pagaban todo lo que debían, iban a seguir la obra, pero si daban la mitad no podían porque no alcanza para seguir la obra”, señaló.
“La empresa está con la promesa de que le van a pagar. A fines de mayo dejó de trabajar y esa plata ya tendría que haber estado. Pasó junio, julio, agosto, septiembre y octubre y hace seis meses que les prometen que les van a pagar”, cuestionó.
Respecto del personal afectado, dijo que en este caso son “120 empleados y les dieron un subsidio para afrontar la veda invernal, que ya se terminó. Ahora tengo parados todos los compañeros que están sin trabajo”, planteó.

Más ayuda

Para poder llegar a enero, cuando supuestamente se reactivaría, gestionarán un subsidio nuevo: “Estuve halando en gobierno con el ministro de obras públicas hace veinte días y le propuse que le comente a la gobernadora que aunque sea consiga un subsidio de 5000 pesos para los compañeros y una bolsa de alimentos, para que puedan comer todos hasta diciembre”, dijo, a la espera de lograr una audiencia con la gobernadora.
“En la provincia hoy tenemos un padrón de 980 personas, aparte de la gente que va y viene”, indicó del personal desocupado.
“A fines de agosto se va la veda invernal y en septiembre normalmente empezábamos a trabajar. En los gobiernos anteriores empezábamos siempre con casi mil trabajadores y terminábamos la temporada con 1.500 ó 1.600”, repasó de lo que venía ocurriendo.
“Esta temporada no empezamos con ninguno y vamos a terminar con nadie”, contrastó.
Consultado sobre la empresa que estaba construyendo el camino en la zona San Sebastián, estimó que los empleados tendrán trabajo “hasta el 15 de diciembre, porque terminan la obra del hito 1. Los trabajadores que tenemos ahí son 60 y también van a quedar sin trabajo porque ya tienen que entregar la obra”.
En cuanto a las obras del IPV, dijo que “están adjudicadas pero faltan los fondos. Dicen que ya van a llegar, en 30 días, en 60 días y no aparecen”, apuntó sobre la situación que se repite en todos los casos.

Hasta 2017

Para Ramírez, no llegará dinero hasta el año próximo. “Si van a aparecer o se va a hacer algo, no va a ser hasta después de las fiestas o fines de enero. Eso, si llegan a mandar los fondos. Yo no le creo nada al gobierno nacional, porque lo anunció en la campaña, le mintió a la gente, ganaron y le siguen mintiendo a la gente”, fustigó.
Aseguró que “la gobernadora está haciendo todo lo que puede, se preocupa por Tierra del Fuego y creo que hace todo lo posible para que haya obras y la gente esté mejor. Pero estamos con la esperanza de fondos a nivel nacional porque la provincia no está pasando por un buen momento”.
Respecto de la licitación del puerto de Ushuaia para la extensión del muelle, fue escéptico al igual que con el resto. “Dicen que se van a licitar y no creo que se haga en esta temporada. Lo veo difícil. Firmamos un convenio de dos mil millones pero el poncho no aparece”, subrayó.

Privados, limitados

Consultado sobre la obra privada, dijo que hay algunas en Ushuaia, que tiene personal ocupado, “aparte de algunos subsidios que tenemos a nivel municipal”.
“En Río Grande está un poco parada la parte privada. Estamos esperando de Total una obra bastante grande. En pocos días se abre la licitación para empezar a mediados de enero y ahí tenemos casi 500 puestos para ocupar”, indicó de una importante obra, con buena remuneración, para los trabajadores de la zona norte.
Por otra parte, no esperan respuesta de la estatizada YPF que “no anda bien. Yo había hablado hace dos o tres meses con una empresa que iba a hacer un trabajo, y aparentemente se tiró todo atrás por falta de fondos”, señaló Ramírez.

Problema regional

La desactivación de obra pública atraviesa la región: “Santa Cruz esta muy mal. Está lleno de promesas a nivel nacional y todos sabemos que son mentiras. No le van a dar nada, al contrario. A nivel nacional yo pienso que a Santa Cruz la quieren destruir, tomando venganza del gobierno que estaba antes”, opinó el dirigente.
Para Ramírez “el nuevo contratista que tenemos no se llama Lázaro Báez sino Calcaterra. Tenemos las licitaciones más grandes que puede haber en el plan Belgrano que las agarraron ellos y creo que este gobierno puede terminar un poco peor que el gobierno que terminó antes. Es lo que veo a nivel nacional”, analizó.
Apuntó que “en Caleta Olivia sigue todo parado. De Río Colorado, donde empieza la Patagonia, a Tierra del Fuego, está todo parado”, ratificó.

Medidas en pausa

Por el momento no se analizan medidas concretas. “Ahora vamos a esperar, en noviembre tengo que viajar a Buenos Aires a una reunión de secretarios generales y voy a comentar la situación de la provincia, para ver si puede haber alguna respuesta a nivel nacional.
Si no, los compañeros decidirán qué vamos a hacer. Todos los días tengo 30 ó 40 compañeros esperando, a ver si sale algo. Algunos vienen con que no pueden pagar la luz, o el alquiler. Nunca pasamos una situación como esta. Hemos estado mal en 2000 y 2001 pero no recuerdo una situación como la que pasamos ahora”, remarcó Ramírez.

Contratistas de Río Grande

Por otra parte, espera reunirse con el intendente Melella, disconforme porque tienen “una cooperativa que le paga a la gente por horas, está en negro, no les dan ropa, calzado, nada. Están trabajando en la avenida Prefectura Naval y ya mandé a mi gente a que haga una denuncia en el Ministerio de Trabajo. Una cooperativa no puede tener la gente en negro y pagar por horas. Deberían ser todos socios, y están haciendo veredas en San Martín, yendo para Chacra IV”, precisó, reclamando que se controle que la gente esté en blanco “como en cualquier licitación”.

Procrear funcionando

También se le preguntó sobre el programa PROCREAR, y dijo que en Río Grande ya termina, porque “en cualquier momento van a entregar las viviendas. Están en los últimos pasos y falta un 5% para terminarlas”, con lo que habrá otro grupo sin trabajo.
En Ushuaia faltan terminarse y “van bastante bien”, por lo que esperan que se mantenga la ocupación de casi 200 empleados. “Las únicas obras son de PROALSA y de Cóccaro, que están construyendo y mantuvieron la gente en Ushuaia”, destacó.
En síntesis, definió que la situación está “peor que nunca. No entiendo cómo este gobierno nacional pudo despedir casi 70 mil compañeros de la UOCRA en casi todo el país dejándolos sin trabajo y mintiéndoles a la gente”.