El flamante presidente de la convención radical, electo este lunes por unanimidad, descartó que el órgano partidario avance con sanciones al intendente Gustavo Melella, como se propiciaba de la lista que integró en las elecciones internas. Por el contrario, remarcó que buscará el acercamiento. La misma política se aplicará con el resto de los radicales que se alejaron de la vida partidaria. Planteó una “libertad de opinión” dentro del radicalismo y decisiones consensuadas con los afiliados.
Río Grande.- El presidente de la convención marcó un giro en la postura de referentes de su propio sector, dado que formó parte de la lista encabezada por la legisladora Liliana Martínez Allende quien, junto a Alejandro Vernet, pedían la expulsión o suspensión del intendente Gustavo Melella y de “todos los radicales que habían apoyado a Rosana Bertone”.
Con la presidencia del órgano partidario en sus manos desde este lunes, y habiendo sido electo por unanimidad, Pablo Canga sentó una postura totalmente opuesta y adelantó que buscará un acercamiento con el riograndense y con todos los radicales que se habían alejado de la vida interna del partido.
Por FM La Isla, aseguró que es su “objetivo personal” lograr que los radicales que se alejaron puedan retornar. “No tengan dudas de que está entre mis prioridades”, enfatizó.
“El año pasado formé parte de una lista como candidato a legislador, y con mucho dolor cuando fueron las elecciones nacionales y no teníamos un candidato, nuestra sede partidaria estaba cerrada. Tampoco tuvimos candidatos en los municipios. Tenemos un objetivo claro de recuperar las intendencias, recuperar más legisladores, más concejales, diputados y senadores nacionales”, dijo, como puntapié de esta decisión de sumar.
Particularmente consultado sobre la relación con Gustavo Melella, dijo que su intención es dialogar lo antes posible. “Por supuesto que sí. Yo creo que es inteligente, que hoy está un poco alejado del partido, pero es decisión también de él. De mi parte, yo voy a conversar con todas las personas que pueda conversar para unir, no para separar”, sostuvo.
Prefirió dejar atrás los planteos de expulsión durante la campaña interna. “Yo ingresé ahora a la convención y no quiero hablar de lo que pasó antes de la elección. Ya no está entre los objetivos del partido hacer este tipo de cosas”, sentenció, poniendo fin a toda intención de sanciones, reclamadas por referentes de su propia lista interna.
Consideró “posible por supuesto” sentarse con el intendente Melella. “Para mí son todos radicales. El intendente Melella está afiliado a la UCR y sí o sí quiero conversar con él. En cuanto pueda voy a tener una reunión y no tengan ninguna duda”, remarcó.
Canga, si bien fue parte de la lista Integración tiene una profunda raigambre en la zona norte de la provincia y fue presidente de la Sociedad Rural, inserta en la vida de la comunidad riograndense, además de su trayectoria en el sector privado.
Aunque se impuso su lista por mayoría, fue contundente al expresar que en la convención “no somos 14, 16 ni 13 convencionales: somos 26 convencionales para trabajar juntos por el bien del partido y por el bien de la provincia, cuando sea el momento”, dijo.
Alianzas, fuera de preocupación
De la convención depende la decisión de las alianzas electorales y consideró que, si bien “es una gran responsabilidad”, el debate en la provincia es lejano e incluso no estarán en funciones las actuales autoridades.
“En caso de que se hagan alianzas, nosotros formamos parte de Cambiemos a nivel nacional. Se harán con la mayor seriedad y se elegirán los mejores candidatos disponibles, que son muchísimos. En eso no vamos a tener problemas, vamos a tener exceso de candidatos, no faltantes”, auguró.
“A nivel Provincia no tenemos elecciones hasta dentro de tres años. Las elecciones del año que viene son nacionales y, para cuando sea el momento, no va a estar esta conducción. Nuestro mandato vence antes del momento que haya que hacer alianzas provinciales, así que no tendría que haber mayores inconvenientes; y las alianzas nacionales –para 2017- son decisión del comité nacional”, manifestó.
“Libertad de opinión”
Respecto de la cercanía con otros espacios de algunos afiliados radicales, se mostró abierto a la “libertad de opinión”.
“Es posible que algunos estén más cercanos a otros espacios, pero la UCR es una fuerza política con más de cuatro mil afiliados en la provincia y es imposible que todos piensen igual. Hay una libertad absoluta de opinión y por eso hubo internas. No necesariamente a todo el mundo le van a gustar las resoluciones que se toman, pero tampoco se van a tomar resoluciones apuradas y sin consultar con la gente. Queremos que la gente acompañe con sus opiniones y no vamos a hacer nada ocultándolo a los afiliados. Por supuesto vamos a consultar a las personas antes de tomar una decisión”, se comprometió.
Generación de empleo
Se le consultó sobre los ejes de debate en la provincia, y se mostró dispuesto a involucrarse desde el partido, pero no solamente en la defensa de la 19640 sino en otras actividades que generan trabajo “y se están olvidando, como la ganadería, la pesca, los recursos naturales en general. Eso genera trabajo mucho más genuino”, subrayó.
En cuanto a la electrónica, dijo que “hay que seguir apoyando la industria y, si hay una reconversión, tiene que ser de la mano de otras actividades que empiecen a crecer y que convivan con estas actividades. Tenemos una industria ganadera que está destrozada, tenemos menos del 30% de la hacienda que teníamos hace veinte años. Estos son temas importantísimos que generan mucha mano de obra, producción de materia prima genuina, como la turba, el petróleo, la pesca. Son actividades que tienen que generar mano de obra a partir de recursos naturales”, concluyó.
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