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El presidente de la Cámara Hotelera José Luís Recchia evaluó la temporada invernal, que está permitiendo la recuperación del sector luego de un año y medio de paralización por la pandemia. Las perspectivas para el verano son buenas si se logra la apertura de fronteras y la experiencia piloto vendrá de la mano del puerto de Ushuaia. Salvo algunas noches, la ocupación es casi total, no hay tablas disponibles ni coches para alquilar, por el desborde de turismo en el Cerro Castor. Apuesta a una “mirada provincial” y se integrarán a la cámara representantes de Tolhuin, Río Grande y un delegado de Almanza para avanzar en la capacitación necesaria para dar una óptima atención al turista.

Río Grande.- El presidente de la Cámara Hotelera de Tierra del Fuego, José Luís Recchia, evaluó por Radio Universidad 93.5 la temporada invernal, con buenas perspectivas para el verano a partir del inicio de la recuperación del sector. En agosto pasado asumió la nueva comisión directiva y el estatuto permite la incorporación de representantes de Tolhuin y de Río Grande. “La comunicación tiene que ser fluida entre las tres ciudades y está previsto un delegado en Almanza, para los cursos de capacitación tanto de hotelería como de gastronomía, que tanta falta nos hace para el destino”, dijo.

Cuentan con una sede propia en Ushuaia y un centro de capacitación para la hotelería y gastronomía “con una cocina equipada para dar los cursos. También hace varios años que se viene dando capacitación en idiomas, en portugués por la llegada de brasileros en la época invernal y en verano, por supuesto inglés, también francés y alemán, para capacitar al personal. Hay gente que está haciendo capacitación en chino y vienen estudiando hace años, porque es el turismo del futuro”, señaló.

“Tenemos una mirada provincial, porque antes era solamente de Ushuaia y modificamos el estatuto. Tenemos 120 establecimientos hoteleros en toda la provincia y el eje central de la cámara es la capacitación, luego la participación, las reuniones con las otras cámaras, el trabajo con el municipio. Hay una gran apuesta al cuidado del medio ambiente para reciclar el plástico, el vidrio, y todos tenemos que participar por el turismo y por nosotros mismos”, propició.

Despegue en invierno

Entre las razones para la buena sorpresa que tuvo Ushuaia, indicó que “se dieron bastantes circunstancias positivas para el sector en los últimos meses, como la falta de nieve en otros destinos, la promoción permanente que se hace desde hace más de veinte años, la tecnología y el confort que ofrece el Cerro Castor para el esquiador, que no tiene nada que envidiar a varios centros de esquí del mundo. Esto hace que tengamos una muy buena ocupación en todo el producto nieve. La temporada termina la primera semana de octubre, y tenemos una buena proyección para el verano, siempre que no aparezcan complicaciones por alguna variante de COVID. Estamos cruzando los dedos y trabajamos bien, con buena ocupación en la mayoría de las categorías. Tenemos la problemática de los alojamientos informales, que le pegan en la línea de flotación a todo este segmento”, advirtió sobre un tema pendiente.

“Todavía no tenemos el número exacto de turistas que han llegado pero hay alta ocupación hotelera. No hay tablas para esquiar, ni autos para alquilar. Los equipos olímpicos que vienen a hacer la contra temporada a nuestra ciudad significaban diez mil noches de alojamiento. En general Francia e Italia traen cinco o seis delegaciones y son estadías de entre 20 y 25 días, y ocupan entre 20 y 22 habitaciones por delegación. Todo eso no existió este año porque no los dejaron entrar, y tampoco entró el turismo de Brasil. Al venir turismo nacional, se mantuvo la ocupación hotelera, pero los servicios se vieron desbordados porque las camas que normalmente ocupaban los equipos olímpicos que ya tienen todo armado, la ocuparon los argentinos y necesitaban tablas, autos de alquiler, restaurantes y se ubicaron donde podían y había lugar. Se vio un poco desbordada la ciudad, que es bueno pero no tan bueno a la hora de hacer un balance”, observó.

Apuntó que “la gastronomía está trabajando muy bien, por supuesto tapando los pozos de hace un año atrás, porque estuvimos un año y medio sin facturar”.

Reservas para el verano

Para el verano los operadores ya tienen reservas “de uno o dos años antes, y hay reservas de extranjeros que van desapareciendo, porque no pueden entrar. Todo lo que es turismo extranjero está colgado de pinzas, pero en turismo nacional con el Pre Viaje II hay una proyección del destino y se ve un avance en las reservas. Octubre viene relativamente bien, noviembre normalmente es uno de los meses más altos del año, pero viene medio tibio. Ha cambiado todo con la pandemia y las reservas son mucho más sobre la fecha. De hecho en invierno en diez días arrancaron con todas las reservas, los pasajes, y se vino todo el mundo”, planteó.

“Probablemente a partir de octubre se abran algunas fronteras, creo que en Brasil va a ser más lento, pero esperamos en octubre y noviembre estar recibiendo turismo de Europa. La clave de todo es la vacunación, pero no hay certeza y ojalá no sea un mensaje de campaña que vamos a abrir las fronteras. Todos confiamos en que se van a abrir, porque los casos han bajado en nuestra provincia, la Patagonia en general es un destino donde hay mucha naturaleza y se puede transitar sin peligro”, aseguró, y estimó que “la apertura en el puerto de Ushuaia significa una prueba piloto y quizás puede llegar a abrir más rápido las fronteras”.

Poca conectividad

Respecto de la posibilidad de nuevas inversiones, advirtió sobre el condicionamiento de la conectividad para poder incrementar la llegada de turistas y en consecuencia de inversores. “La realidad demuestra que prácticamente Aerolíneas Argentinas es la que va a quedar como línea de bandera que va a llegar a la ciudad y eso es bastante incierto”, opinó.

“Nuestra ciudad tiene un potencial turístico porque no está demasiado impactada. Esto lo tenemos que cuidar y mantener. La llegada de cruceros y las camas ocupadas por supuesto generan trabajo en la ciudad, pero tenemos que pensar a futuro y en el impacto de la gente. La pandemia ha demostrado la importancia del turismo y ahora tenemos la oportunidad de demostrar al funcionario de turno que el turismo es una de las salidas laborales más importantes de la provincia. A veces es difícil hacer ver esto, porque cada uno está en lo suyo y siempre en la provincia se habla de la industria. Por supuesto que la industria genera mano de obra pero, por el potencial que tenemos en la provincia, tenemos que organizar el turismo porque tenemos trabajo para muchos años”, avizoró.

Asistencia estatal

Finalmente se le consultó sobre la asistencia del Estado. “Durante la pandemia se redujo el salario el 25% y tuvimos la ayuda de los REPRO, con fondos directamente a la cuenta de los trabajadores o de la empresa para afrontar los sueldos. El gobierno provincial también destinó dinero a las cuentas de los trabajadores y a las empresas, para poder abrir las puertas cuando empezó a venir gente, con el personal adentro. La ayuda de la nación, de la provincia y de los trabajadores, nos permite hoy estar parados. Ya prácticamente no hay asistencia en la actualidad. Según la facturación de los establecimientos es la ayuda del gobierno nacional. Casi no hay destino en el país que haya trabajado de la manera que trabajamos nosotros desde que abrió el Cerro Castor. No hemos tenido baches en el medio, con algunas habitaciones libres algunas noches, pero bien en general. No es que estamos en la gloria, sino que estamos tapando pozos de hace un año y medio atrás”, concluyó.