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El senador (mc) Julio Catalán Magni fue crítico del llamado a reformar la carta orgánica y lo atribuyó al “capricho de un par de pícaros” que buscan permanecer en el poder. “Hay sectores que se sirven de la política como una herramienta propia, se han apoderado de ella y no la quieren soltar porque no les importa otra cosa que no sea la caja. Esto atenta contra el funcionamiento de las instituciones y el sistema democrático”, fustigó. Afirmó que lo que se busca es “modificar la carta orgánica para tener un mandato más como intendente para ver después si puede ir por la gobernación, porque en el 2023 no le gana al gobernador. Es excesivamente chato y la sociedad pide otra cosa”. También criticó a La Cámpora por la fractura del Frente de Todos y la oposición a la reestructuración de la deuda con el FMI, y los invitó, ya que tienen disidencias, a “renunciar al PAMI, al ANSES, a Desarrollo Social, a Aerolíneas, y entregar las cajas más importantes que tienen, porque podemos escribir un libro con los lugares más importantes de gestión que ocupan en el Ejecutivo”, disparó. Consideró que estamos “en un momento histórico” por la afinidad de los intendentes de Ushuaia y Río Grande con “el poder real” y, si bien el gobernador Gustavo Melella “es muy respetado por propios y ajenos porque está haciendo un trabajo local y nacional muy válido, si a esto le dieran el plus de un empujón político, estaríamos hablando de una transformación mucho más profunda de la provincia”. Para Catalán Magni los intendentes “hoy tienen el teléfono directo de los que tienen la lapicera para ayudarnos de verdad, no para pintar los cordones o hacer cinco cuadras de asfalto. Es un momento histórico para empezar a resolver una demanda de muchos años, con una planificación en serio”, sentenció.

Río Grande.- El senador (mc) Julio Catalán Magni fue consultado por Radio Universidad 93.5 y Provincia 23 sobre la reforma de la carta orgánica de Ushuaia y la posibilidad de que se habilite una nueva reelección del intendente, y apuntó contra “el par de pícaros” que usan esta herramienta para permanecer en el poder.

“La política cada vez está más lejos de la gente y obviamente no estoy de acuerdo. Los procesos democráticos están establecidos y hay que respetarlos. En los últimos años hay sectores que se sirven de la política como una herramienta propia, se han apoderado de ella y no la quieren soltar porque no les importa otra cosa que no sea la caja. Esto atenta contra el funcionamiento de las instituciones y el sistema democrático. Es bueno que se vayan renovando las autoridades que ocupan distintos cargos y tenemos enorme cantidad de ejemplos para dar en la provincia de Buenos Aires y provincias del interior, donde los dirigentes están atornillados al sillón y es lo único que les interesa”, dijo.

“Además de eso hay un costo importante para llevar adelante todo esto, tanto costo operativo como económico, más el desgaste de someter a la sociedad a otra elección por el capricho de un par de pícaros. No se puede ser tan irresponsable, hay que entender que tenemos el 50% de desocupación, casi el 30% de indigencia. Viven en un mundo muy lejano de la realidad. Ayer se derivó a un chico de Ushuaia que tuvo un accidente por la presión que tuvo este tema, hubo colectas de vecinos y finalmente se consiguió el avión sanitario”, citó como ejemplo de los problemas a resolver.

“Tenemos que lograr que la política vuelva a tener empatía con la sociedad, y que la gente se sienta identificada con quien los representa. Se pretende modificar la carta orgánica para tener un mandato más como intendente para ver después si puede ir por la gobernación, porque en el 2023 no le gana al gobernador. Es excesivamente chato y la sociedad pide otra cosa”, enfatizó.

La Cámpora “golpista”

Por otra parte se refirió a la sesión de ayer y la oposición interna en el frente que gobierna el país. “Tendríamos que estar pensando en otra cosa. Ayer un sector del Frente de Todos saqueó el Congreso de la Nación, cuando se intenta llegar a un acuerdo por una deuda contraída de la que nadie se hace cargo. En el frente que gobierna el país algunos dicen que sí, otros que no y, cuando asumimos, todos sabíamos los vencimientos que teníamos. Tuvimos dos años para renegociar y hay que tener responsabilidad institucional. Hoy el debate es muy chato, nada más que para el microclima político y hay que volver al contacto con la sociedad. Esto aleja a la gente de la política, cada vez la enoja más, y con mucha razón”, sostuvo.

“Esto genera una enorme preocupación y vivimos echando culpas. Formamos un frente electoral y hay un sector que estuvo saqueando la Plaza de Mayo, no acompañaron la renegociación que generó el propio espacio, y son cómplices de lo que está pasando. Me parece muy bien que nos sentemos a discutir las condiciones de acá para adelante porque esta deuda nos complica y a todos nos pone en jaque. No estoy en desacuerdo con la decisión que tomó la vicepresidente de someterlo a debate en el parlamento, pero hubo dos años en medio para trabajar este proceso y, cuando se logra un consenso, viene casi un golpe institucional, como ya pasó con la renuncia de distintos funcionarios”, afirmó.

Recordó que “al presidente no eligió cualquiera, la vicepresidente tomó la decisión de generar un frente político encabezado por Alberto Fernández y nos tenemos que hacer cargo. A partir de ahí todos tenemos que trabajar para que las cosas salgan lo mejor que podamos. Este sector del frente que se opone -dijo por La Cámpora- debería renunciar al PAMI, al ANSES, Desarrollo Social, Aerolíneas, y entregar las cajas más importantes que tienen, porque podemos escribir un libro con los lugares más importantes de gestión que ocupan en el Ejecutivo”.

“Yo no tengo afinidad con el presidente, pero hoy tiene una gran responsabilidad y lo mínimo que uno espera es que los integrantes del frente no sean quienes pretendan ser a la vez oficialismo y oposición. Es bastante perverso y mediocre”, calificó.

“Esto nos pasó cuando asumimos con Rosana Bertone y tuvimos 90 días la Casa de Gobierno tomada por los propios. Hay que tener memoria y cuidar el funcionamiento democrático. A esta altura del mes, frente al compromiso que se asumió con el FMI, tenemos que refinanciar la deuda porque no se pueden pagar los vencimientos. El presidente y Sergio Massa han buscado el consenso, y la oposición, los que no somos tan oposición y el Ejecutivo, estamos tratando de empezar a desandar un camino en pos de la construcción, porque ni hablar lo que sería para Argentina entrar en default”, alertó.

Dado que Máximo Kirchner tampoco acompañó la aprobación del presupuesto el año pasado, insistió en que “son cómplices de lo que está pasando y se tienen que hacer cargo. El frente se armó en torno a la figura de mayor volumen electoral, que es Cristina Kirchner, y nadie lo cuestiona. A partir de ella, por un hilo conductor, se sumó su hijo, además de movimientos sociales. Pero en el momento crítico que estamos viviendo terminan siendo los más golpistas contra el Ejecutivo”, fustigó.

“No está bien porque la Argentina necesita responsabilidad institucional y tenemos que acompañar desde el lugar que nos toca. Yo cumplí mi mandato y me alejé de la política activa, porque es lo que hay que hacer, pero los que tienen responsabilidad en este momento deben dar respuestas a la sociedad. Hay que hacer mucha fuerza para sostener la paz social, para que el país se ponga en marcha, y no quedarnos en quién tiene más o menos culpa”, planteó.

Las diferencias con Vuoto

Teniendo en cuenta su afinidad con los legisladores Federico Bilota y Ricardo Furlan, que se separaron del bloque del Frente de Todos por diferencias con la conducción de Walter Vuoto, mencionó que “cuando empecé en política lo hice junto con Federico y seguimos juntos. Hoy Ricardo y Federico se separaron del bloque oficialista porque claramente hay diferencias enormes. Federico y yo trabajamos juntos desde el primer momento. Con Juan Carlos Arcando, Ricardo Furlan y tantos más que no nombro para no comprometerlos, estamos en contacto permanente. Hay gente ligada al MPF, también al Frente de Todos, al peronismo más ortodoxo, y no estamos de acuerdo con la forma de gestionar. Esto nos pone en un lugar de oposición responsable y tenemos la autoridad moral para decirle a la sociedad dónde estamos parados y hacia dónde queremos ir”, aseveró.

Cargó contra “un par de militantes que está tratando de quedarse con la llave de la casa para no moverse más de ahí e ir fluctuando en distintos ámbitos de poder, cuando es muy bueno para la vida democrática ir cambiando autoridades. Hoy en el Parlamento se puede debatir y me parece muy bien, porque de lo contrario hubiese sido una escribanía, y creo que nuestra provincia va en el mismo sentido”.

“Yo estoy yendo periódicamente a la provincia y, si digo que Ushuaia está fea, estaría mintiendo. La ciudad está linda, pero hay que empezar a mirar un poco más fino el nivel de endeudamiento y otros temas más profundos. Con la llegada que tiene el intendente de Ushuaia y el intendente de Río Grande con el Ejecutivo nacional, no sé cómo no han resuelto problemas de fondo, como el puerto de Río Grande o el cruce por aguas argentinas. Se prorrogó el subrégimen casi con las mismas condiciones que tenía y eso permite hacer negocios a cuatro o cinco empresarios, más allá de que ponen como bandera ante la sociedad los 8 ó 9 mil puestos de trabajo en la industria electrónica. Con la llegada que tienen al poder real, deberíamos discutir la sustentabilidad del subrégimen, el recambio que nos permita fabricar productos que tienen un mercado enorme. Por otro lado, hay que trabajar fuertemente con el Polo Logístico Antártico, con el puerto de Río Grande, con el cruce por aguas argentinas, hacer una doble vía hasta el Cerro Castor para descomprimir los centros invernales. Hoy tienen el teléfono directo de los que tienen la lapicera para ayudarnos de verdad, no para pintar los cordones o hacer cinco cuadras de asfalto. Es un momento histórico para empezar a resolver una demanda de muchos años, con una planificación en serio”, sentenció.

Reiteró que “la prórroga que tenemos es importante pero no sirve, y el turismo se desarrolló por las restricciones para salir del país, pero hay que articular servicios básicos para la ciudad. No se puede seguir dando terrenos sin servicios en Ushuaia cuando la carta orgánica no lo permite, pero se siguen dando”.

Una ayuda a Melella

Consultado sobre la llegada de Gustavo Melella con el gobierno nacional para resolver estos problemas de fondo a los que hace referencia, observó que “Gustavo tiene llegada, pero, con franqueza, no es la misma que tienen los intendentes. Gustavo es muy respetado por propios y ajenos porque está haciendo un trabajo local y nacional muy válido. Realmente logró cosas importantes para la provincia, pero si a esto le dieran el plus de un empujón político, estaríamos hablando de una transformación mucho más profunda. Ojalá se pueda hacer en estos dos años que quedan. La provincia tiene demandas enormes de servicios, el cruce por aguas argentinas la industria no lo quiere porque atenta contra su negocio y es uno de los mayores aportantes al sistema político. A partir de ahí ponen los candidatos por teléfono”, disparó. “Estas cosas se tienen que discutir en serio, para resolver el problema de energía, de agua, de cloacas, en lugar de discutir si se modifica la carta orgánica para que alguien siga siendo presidente del Concejo Deliberante, porque si no va a una interna y deja afuera al intendente. La verdad es bastante chata la discusión y demasiado egoísta”, señaló en alusión al giro que dio Juan Carlos Pino, en apoyo al intendente Vuoto.

“Tenemos que hablar en serio de adónde queremos ir, generar trabajo genuino y una renovación de la mirada para empatizar con la sociedad, pensando en el futuro en lugar de tener una mirada personal para ver si se quedan en la próxima elección ocupando un lugar público con todos los beneficios del Estado”, pidió.

Respecto de su futuro político, dijo que “mi lugar en el mundo es Tierra del Fuego y voy a trabajar siempre para que le vaya bien. En el futuro quien esté dispuesto a formar un espacio donde confluyan los que pensamos de esta manera, ahí voy a estar yo, va a estar Federico (Bilota) y tantos más, tratando de que hablemos de una Tierra del Fuego de verdad y no de un club de amigos que busca sostener distintas cajas”, concluyó.