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Así lo aseguró Ramírez Rubén Bernardo, primer locutor nacional que llegó en 1971 a Rio Grande para trabajar en la radio de la Misión Salesiana, quien visitó los estudios de Radio Universidad en el marco de la sección «Personajes de los viernes»  en comunicación con nuestro corresponsal en Roma, el Dr. Marcello D´Aloisio, y junto al director de la emisora Alberto Centurión y Lorena Vera. Asimismo, al no ponerse finalmente en marcha el proyecto de la radio de la Misión, Ramírez participó en Radio Nacional, además de Canal 13 y Canal 2, convirtiéndose en uno de los principales pioneros y referente de varios profesionales de la locución en la ciudad. Actualmente es dueño de la imprenta ´Impresiones Tolhuin´, además de ser el fundador del club de fútbol Club Tolhuin.

04-03-16 Río Grande.-  Ramírez Rubén Bernardo, oriundo de Buenos Aires, fue el primer locutor recibido en el ISER y quien llegó en 1971 llegó a Rio Grande de la mano de los curas para trabajar en la radio de la Misión Salesiana.

De esta manera, Rubén contó que “llegué a Río Grande invitado por la institución salesiana, ya que había ganado la licitación para poner la 38 Radio Nacional Salesiana, como se iba a llamar, la cual nunca salió al Aire. Fue así que hicieron durante un tiempo una transmisión experimental y yo participé en la etapa final que se emitía desde las 13 hasta las 16 horas”.

Asimismo, el locutor explicó que “quien hizo los trámites para la licitación de la emisora fue el Padre Muñoz, el cual cuando yo llegué ya había sido trasladado. En aquel entonces el Padre Murat era el director de la Misión a quien no le interesaba demasiado toda la cuestión de la radio y además ya estaba en construcción lo que es La Red, Radio Nacional Río Grande, por lo que decidieron no seguir adelante con el proyecto”.

Cabe mencionar que según indicó Ramírez sus primeras experiencias como locutor nacional una vez recibido fueron en LU3 en Córdoba.

En relación a su llegada a la ciudad de Río Grande, el profesional manifestó que “en aquella época habían 5.000 habitantes, algo totalmente distinto a lo que se puede ver hoy en día teniendo en cuenta lo que ha crecido”, al tiempo que señaló “en una primera impresión no quería quedarme a vivir aquí. Sin embargo, con el correr del tiempo cambié de opinión y finalmente me quedé”.

Por otro lado, Ramírez se refirió a las características de la Radio de la Misión y manifestó que “era algo muy casero y rudimentario, aunque pese a todo tenía un alcance hasta la provincia de Santa Cruz. Es así que la escuela agrotécnica utilizaba la emisora como un modo de vinculación entre sus alumnos y sus familias, ya que  los padres en su mayoría se dedicadaban al campo principalmente“.

Así también, el profesional sostuvo que “en un primer momento la idea de la Misión era que dicha radio sea comunitaria, transmitiendo así además de toda la parte religiosa de la institución todas aquellas actividades que involucraban a la sociedad de Río Grande”.

En cuanto a sus compañeros de trabajo de aquella época Ramírez recordó a Marisa Mora y Cristina Franco en locución y Luján Muñiz y Oscar Muniz en operación.

Cabe decir que si bien durante la década del ’70 ya existía en la ciudad Canal 13, la radio era el principal medio más cercano que tenía la sociedad, más que nada en el campo. “La emisora de la Misión era la única que estaba en sintonía cuando yo llegué, sino la gente tenía que escuchar las radios de Punta Arenas o de Río Gallegos”, contó Rubén.

Por otra parte, Ramírez se refirió a su paso por Radio Nacional Río Grande como segundo director en 1973 cuando ésta se inauguró y explicó que “trabajé como locutor de 3era, es decir el base. En aquel momento los locutores se dividían por categorías, siendo que los de primera eran aquellos que trabajaban en radio de mayor rango como Buenos Aires o Córdoba, los de segunda en radios intermedia y los de 3era en emisoras del interior”.

De igual modo, el profesional contó que “nuestra función como locutores eran varias, ya sea leer las noticias, mensajes, construir programaciones. Participé de varios programas, pero el que más recuerdo era ´la mejor música para la mejor noche´ que se transmitía los días sábado donde la gente llamaba para pedir temas. En un principio nos costaba que la gente se anime a llamar, por lo que nosotros inventábamos las llamadas, hasta que finalmente comenzamos a desbordar de pedidos”.

Así también, Rubén indicó que “teníamos una programación que se transmitía en Malvinas una vez por semana, la cual era bilingüe por lo que recibíamos ayuda de una profesora de inglés. Es así que tengo guardada mucha correspondencia por parte de la gente de Malvinas”.

En cuanto a las líneas telefónicas de la Misión en aquella época, Ramírez recordó que “funcionaba una línea de magneto que traía la señal desde la central en Río Grande. Es así que el primer timbre del teléfono equivalía al campamento de YPF, el segundo era la escuela agrotécnica, el tercero la Estancia Sara y el 4to la Estancia San Martín, por lo que si uno levantaba el teléfono escuchaba la conversación de cualquiera de esas líneas”.

Por otro lado, el locutor se refirió a la situación actual de la programación en las radios argentinas y opinó que “como todo están aquellas producciones que son buenas y otras quizá no tanto, pero creo que tenemos muy buena calidad de programas en nuestro país”; al tiempo que sostuvo “algo que ha saturado durante el último tiempo y que no me gustó tanto fueron las reiteradas cadenas nacionales”.

En referencia a su trabajo en otros medios de comunicación de la ciudad Ramírez mencionó que “estuve en Canal 13 haciendo el noticiero al igual que participé de algunos programas del género musical, aprovechando la invitación de varios artistas por parte del club Esportiva. Además estuve como locutor oficial de Canal 2 desde su inauguración hasta hace 10 años atrás aproximadamente”.

Vale decir que Rubén Ramírez fue también fundador del Club Tolhuin. “El club comienza gracias a la iniciativa de algunos de los chicos que trabajaban en la imprenta Tolhuin Impresiones, la cual fundé en 1981, quienes en 1984 hicieron fuerza para que pudiéramos ingresar en la liga local. De esta manera, el club tuvo muy buena participación en dicha Liga ya que había ganado varios campeonatos. Tal es así que al tener participación en los torneos nacionales de fútbol de salón, uno de los integrantes del equipo, Alejandro Navarro formó parte del seleccionado argentino de esa categoría y pudo viajar a Australia, Italia, a Colombia, etc.”.

Por último, Rubén se refirió al Papa Francisco Bergoglio y opinó que “él representa fundamentalmente a todos los argentinos. Creo que está haciendo una tarea muy importante en favor de la paz de todo el mundo y es admirable el prestigio que se ha ganado internacionalmente».