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El director del Banco Tierra del Fuego Gabriel Clementino habló con Radio Universidad durante el programa «Buscando el Equilibrio» y dio a conocer la orientación al desarrollo que está tomando la entidad, fundamentalmente con líneas para PYMES. También explicó el aumento de la renta que pagan las financieras y compañías de seguros, que no impactaría en mayores costos para los clientes.

18-03-16 Río Grande.- El contador Gabriel Clementino se refirió por Radio Universidad 93.5 a una parte del paquete de leyes aprobado el 8 de enero, vinculado con la reforma tributaria, y aseguró que no tendrá impacto en el contribuyente.
“Lo que se ha incrementado es la renta que pagan las financieras, como también las empresas de seguros, en virtud de las comisiones que cobran ellos. Del 5% se fueron al 7,5% y, entre la póliza y la comisión que le toca, en vez de pagar 50 pesos cada 1000, van a pagan 70 cada 1000; pero eso no se traslada al público porque ya viene en la póliza. Es un costo que va a tener la empresa de seguros y está dentro de los valores normales que tienen en otras provincias”, afirmó.
Consideró que hay una falta de análisis o de sinceridad, cuando vemos cómo se llega a la situación de aumentar impuestos o retocar algunas cosas. Todos estamos pagando un costo de este sinceramiento de la economía. Tenemos que sincerarnos también los actores políticos y esta no es una cuestión de privados contra públicos”.
Recordó cuando se hizo “el incremento de la tarifaria tres años atrás y se le dio una masa de recursos al Estado, direccionado principalmente a mejorar la salud y la educación. No fueron a los servicios esenciales en forma directa y terminaron yendo a la gran masa de salarios que tiene la provincia. La salud y la educación están mucho peor que antes de poner este 1% de más que pagamos todos por Rentas. Y ahí sí pagamos todos. En este caso de los servicios financieros no, y hasta son medidas que algunos progresistas siempre plantearon”, aseguró.

Impuesto inmobiliario

Consultado sobre su posición frente al debate abierto entre gobierno y municipio por el cambio del impuesto inmobiliario, indicó que fue “convencional constituyente de la ciudad y soy un gran defensor de los recursos municipales. Los municipios están cobrando el impuesto inmobiliario en el marco de un pacto fiscal. El municipio tiene que sentarse a dialogar con la provincia y replantear esto, sin llevar a un nivel de pago al contribuyente que le genere un mayor perjuicio”, sugirió.
“Lo dejaría aparte del análisis, porque no tengo una posición concreta tomada y me parece que es un tema institucional más que económico. Se ha generado más como un tema de discusión de competencia, que del punto de vista de cuánto más le va a salir a la gente”, opinó.
También observó que la Municipalidad de Río Grande, “sin tasación catastral, que es lo que corresponde, llevó a cabo modificaciones en la tasación impositiva. Generó esta figura de tasación impositiva y ha tenido incrementos bastante considerables. Hay una falta de enfoque real de cómo está ese valor”, cuestionó.
Insistió en que “el tema es tan político que excede a los contadores y tienen que ser los dirigentes los que se tienen que poner a hablar de esto. Habrá que denunciar un convenio que se firmó oportunamente, ver el nivel de competencia del municipio y cómo el municipio sale compensado ante la posible pérdida de su capacidad contributiva”.

Banco para el desarrollo

Por otra parte, dio cuenta de la situación del banco provincial y el perfil orientado al desarrollo que fijaron como objetivo. “Está en una situación muy buena. Hay un buen trabajo que hizo la gestión anterior, con una profesionalización y una visión más acorde a la realidad”, reconoció.
“El banco necesita dar un paso más como motor de la generación de desarrollo, sin incrementar riesgos pero con una participación más fuerte. La gobernadora ha planteado ir más allá de los requisitos mínimos que manda el Banco Central para créditos de inversión productiva”, informó.
“Hoy estamos en una cuota del orden de los 30 millones de pesos como mínimo, que es lo que debemos cumplir para este semestre. Nosotros vamos a estar en los 100 millones, con una tasa del 21%”, dijo de la proyección para el 2016, y “pensamos en 200 millones para todo el año. Esto potencia a las PYMES y sectores de la industria”, manifestó.
“Estamos compitiendo con el sector privado en una parte del negocio y vamos a ir adelante con tasas muy por debajo de los que tienen otros bancos”, adelantó.
“El rol es ser un eje de desarrollo y estar en la atención del cliente en forma personalizada, y en la modernización del punto de vista tecnológico”, dijo, partiendo de utilidades de 170 millones de pesos que quedaron del ejercicio pasado.
Como consecuencia del canje, esperan además “implementar programas de financiamiento para capitalizar el sector público, ante el nivel de decaimiento del sector público en materia de inversiones”, señaló Clementino.
“Tenemos que dar un paso tecnológico adelante, y no estamos tan atrás de otros bancos. Tenemos una cobertura de cajeros que otros bancos no tienen. Muchos empleados de otros bancos van a nuestros cajeros. Es un banco público y tenemos un nivel más fuerte de responsabilidad social”, subrayó.
Aclaró que “en algunos rubros no vamos aponer competir porque hay niveles de riesgo que sólo pueden tomar los grandes bancos. Prestarle a una empresa 200 millones de una vez, nos pone en una situación de riesgo delicada. Antes de eso, preferimos competir en otro rango, con la PYMES”.

Recuperación para el campo

Consultado sobre los créditos para el sector rural, con seis meses de gracia que para los productores no alcanzan, tras el invierno que dejó como saldo pérdidas cuantiosas de ganado, dijo que “el sistema lo estamos viendo con (el Ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca Emiliano) Olmedo, para ver cómo hacer los ciclos de gracia. Hay una realidad: no estamos partiendo de cero ni comprando hoy la vaca o creando un estanciero. Seis u ocho meses de gracia es algo que se puede acomodar. El que tiene que reponer vientres, no es el primer vientre que compra, sino que está reponiendo. No vamos a poder financiar una actividad de cero a través de las líneas que tenemos. Estamos hablando de desarrollar un 20 ó 30 por ciento sobre la cantidad de animales que se tiene, y ahí sí estamos bien. Para comprar tres mil animales y aguantar cuatro años, no van a encontrar ninguna línea”, enfatizó el director.

Recesión preocupante

Respecto del panorama del sector privado, Clementino concedió que “hay una recesión preocupante pero es el marco general del país. No es un tema local”, y señaló como positivo que “hay un nivel de endeudamiento menor que en 2001, porque el nivel de acercamiento al crédito es más bajo. El comerciante PYME ha sido más conservador. Tenemos un nivel de caída de empleados muy bajo en la parte comercial, pero en el sector industrial ha caído y se ve en la calle”, lamentó.
Finalmente reiteró el perfil que se le piensa imprimir a la entidad crediticia como “motor de desarrollo, y que no sea más el banco de los amigos. Casi lo perdemos al banco y a toda la sociedad fueguina le costó recuperarlo”, concluyó.

Clementino dio cuenta de la situación del banco provincial y el perfil orientado al desarrollo que fijaron como objetivo. “Está en una situación muy buena. Hay un buen trabajo que hizo la gestión anterior, con una profesionalización y una visión más acorde a la realidad”, reconoció.